una nota no planeada

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18 de enero de 2015. Jordán, Santander.


Esta es una nota no planeada y que creí que nunca escribiría.

Regresé a la casa en el Jordán con una mezcla de escepticismo y curiosidad. Después de desestimar el libro como mera ficción histórica, sentí una obligación personal de verificar algunos de los relatos más insólitos que contenía. La mención persistente de un sótano con paredes móviles que conducían a un túnel secreto fue una de esas historias que no podía dejar de lado sin investigarla por mi cuenta.

Armado con linternas y herramientas, descendí al sótano. El lugar estaba oscuro y opresivo, cargado con una atmósfera que parecía guardar secretos antiguos. Para mi asombro, después de una minuciosa inspección, descubrí que una de las paredes efectivamente se movía, revelando un pasaje oculto. Un túnel sombrío y misterioso se extendía más allá de lo que mi vista podía alcanzar y la luz se perdía en la oscuridad. Debo confesar que en ese momento me invadió el miedo. La opresiva sensación de estar al borde de algo más grande y desconocido me hizo retroceder. Abandoné el sótano sin aventurarme más allá de la entrada del túnel. Sé que esta decisión puede parecer cobarde, pero la magnitud de lo que podría haber descubierto me sobrepasó.

Este hallazgo, sin embargo, confirma que hay más verdad en los relatos de lo que inicialmente creí. Necesito compartir esta experiencia y discutir los siguientes pasos con quienes me proporcionaron el libro. He decidido reunirme con ellos en Praga, lugar establecido por ellos mismos, en un parque neutral y seguro donde podremos hablar libremente. Todavía no me han dicho exactamente cuál parque ni la fecha así que estoy a la espera de sus respuestas.

Además, he comenzado a investigar más a fondo ciertos experimentos científicos, como el famoso "Universo 25" del Dr. John B. Calhoun. Este experimento sobre el comportamiento social y la sobrepoblación podría ofrecer una nueva perspectiva sobre la trágica masacre de los guanes en El Jordán. La posibilidad de que factores similares hayan influido en esos eventos me parece una línea de investigación que vale la pena explorar, aunque muchos desestimen este experimento porque no somos ratones y tenemos tecnología. Recordemos que pertenecemos al reino animal así que es posible que tengamos en común algunas condutas con algunos animales.

La búsqueda de la verdad es ardua, pero estoy convencido de que podré desentrañar los misterios que aún nos eluden sobre esta misteriosa desaparición.

La verdad del Jordán, el informeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora