Las Inclemencias del amor // Binwoo [Omegaverse]

XIX

El día era agradable y un poco caluroso, pero eso no evito que Eunwoo utilizará otra de sus cómodas camisas cuello de tortuga.
Mucho más ahora que salió de casa para visitar a su querido padre.

Ha intentado por todos los medios comunicarse con él, pero simplemente su padre no atiende el teléfono, es más jura que lo tiene apagado porque los mensajes ni siquiera le llegan.

Cómo aún se encontraba resentido con Moonbin desde el insistente de la última vez, no le pregunto nada al alfa sobre su padre, así que por medio de Jinwoo, le hizo saber que lo iría a visitar, no buscaba su permiso, después de todo era su padre a quien visitaba, estaba en todo su derecho de hacerlo cuando quisiera, además estaba seguro que Moonbin no le tomaría importancia, como todo lo relacionado con él.

Tocó la puerta tres veces, antes que JuRim abriera y se sorprendiera al verlo.

—Joven Eunwoo, es un gusto verlo de nuevo. —Se tomo el atrevimiento de abrazarlo.

—Yo igual extrañé tu compañía JuRim, ¿Cómo has estado? —Pregunto entrando a la casa de sus padres, era la misma de siempre, pero se podía respirar la soledad y tristeza en el aire.

—No tan bien, desde la partida de la señora Ye-jin todo aqui es un caos. —Lo llevo a la cocina y le ofreció una taza de té, que Eunwoo recibió gustoso— Su padre a despedido a varios empleados, ha dejado solo unos cuantos, y tengo la fortuna de ser beta, cocinera y así conservar mi trabajo.

—¿Por qué mi padre haria algo así? —Tomo un sorbo.

—Despidio a todo omega o alfa que trabajará aquí, solo dejo al señor Eunhyuk, supongo que lo hizo porque no quiere que otros aromas se mezclen con el aroma a magnolias de su madre.

—Puede ser... Él... ¿Cómo está?

—Nada bien, no ha comido casi nada desde que su madre se fue, y eso tiene casi dos semanas, tampoco ha ido a trabajar y corre a cualquier que intente entrar a su habitación. —Eunwoo dió un lago suspiro.

—Gracias JuRim, iré a verlo.

—Suerte señorito Eunwoo. —El mencionado rodo los ojos, saliendo de la cocina y subiendo las escaleras, se detuvo antes de entrar a la habitación que compartían su padre y madre.

Toc toc.

—Papá. —Murmuro bajo, pero suficientemente alto para que alguien del otro lado oyera— Papá, soy yo... Wonnie.
¿Puedo pasar?

Un poco temeroso entro a la habitación, todo estaba a oscuras y hecho un desastre total, las sabanas en el suelo, la mesa rota, ropa afuera de los cajones.

Eunwoo tuvo que contener un poco la respiración, no solo por el agrio aroma de su padre, si no también por el hedor y humedad del lugar, seguramente su padre no habia permitido que nadie limpiara el lugar.

El alfa al sentir una presencia, gruño fuerte, pero luego de ver de quien se trataba, su rostro se suavizó.

—Papá. —susurro, no sabía que hacer, ¿Estaba bien acercarse?

Al escucharlo, los ojos del alfa picaron, y de inmediato lágrimas empezaron a correr sobre sus mejillas.

Al instante, Eunwoo corrió abrazarlo, sin dudarlo se inco a lado de su padre y se aferro a él. El hombre se dejó hacer en los brazos de su hijo.

—La perdí, —sollozo— la he perdido Wonnie... Ella se fué. —sus palabras salían a duras penas, el abrazo de su hijo lo termino de quebrar y rompió en llanto.

—N-no~ papá —su voz era quebradiza—, no e-es así. M-mamá... Ella volverá, verás que s-si.

—Mi mariposa... Ella me odia hijo. —Eunwoo no sabía cómo reaccionar, su omega le pedía a gritos que ayudará a su padre, pero no sabía cómo exactamente.