"Ese beso me hizo sentir que los besos mágicos sí existen. No sé qué significa esto para nosotras, pero sé que no puedo olvidarlo.".-Aria
Aria
Subí a casa con una tonta sonrisa. El beso que tanto había esperado al fin había llegado. Quizás era demasiado pronto para pensar que él y yo pudiéramos tener algo, simplemente ha sido un beso, nada más. No era como en los libros. Esos besos que describen, que te derriten, que hacen que enloquezcas, en mi opinión, había sido demasiado simple, demasiado normal. No quise darle vueltas, estaba feliz, habíamos avanzado un poco en la especie de relación que teníamos. Él me había dicho antes de subirme a casa que no se podía quedar con las ganas de besarme y ¡pum! El beso, ese que tanto había soñado, había sucedido.
En mi mente, siempre me había imaginado mi primer beso como algo mágico, algo que me iba a marcar. Si es cierto que, en cierta manera, el primer beso me lo dio Harley, pero no cuenta ¿Verdad? Al final ella lo hizo por rencor y yo simplemente aproveché la oportunidad para no decepcionar a Dante. Era una tonta enamorada o quizás no.
Desconocía lo que era el amor, mucha gente decía que hay personas que se enamoran solo con mirarse, pero yo no era de esas personas. Dante me gustaba, sí, pero simplemente eso, el gustar, la curiosidad de conocer a alguien, de ver lo que podía suceder, nada más. Quizás porque mis expectativas en el amor estaban bastante dañadas.
La relación de mis padres había sido un desastre y la de Harley y Stacy otro. Hay personas que no saben amar, como por ejemplo, Stacy, y otras que aman tanto que se olvidan de sus necesidades, de sí misma, como Harley. Eso me apenaba, ella merecía alguien que le bajara la luna, alguien que le dijera lo maravillosa y especial que era, porque Harley era especial.
Harley era como una noche oscura, intrigante y desconcertante, pero al mismo tiempo hipnótica y necesaria. Era un muro de un castillo difícil de entrar, pero, cuando lo logras, ves tesoros que jamás pensarías que pudieras encontrar. No sé por qué pienso de esta manera, quizás el beso con Dante me había vuelto más sensible, más blanda.
No me disgustaba. Siempre he sido una persona que expresa como se siente, lo que opina, lo que piensa. Mi madre me había enseñado eso, que no debía guardar mis sentimientos, que, con el tiempo, eso era como una enfermedad.
ESTÁS LEYENDO
Perdona Si Te Llamo Amor-Primer Libro De La Saga: Perdona Si Me Enamoro-
RomansAria siempre ha sido una chica risueña y alegre, capaz de encontrar el lado divertido de cualquier situación. Pero su optimismo es puesto a prueba cuando su madre decide mudarse con su nueva pareja. Ahora, Aria se enfrenta a un desafío mayor: adapta...