Aventuras en la nieve

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Abrí los ojos y miré a Zack. Estaba todavía durmiendo. Me encantaba verlo así, parecía un ángel.

Hoy estaba haciendo mas frío que ayer. Miré por la ventana y estaba nevando. Por fin cae nieve. Hoy se va a pasar bien con la nieve.

Volví a la cama y traté de dormir un poco mas, pero no podía. Me levanté y fui a la cocina.

-Buenos días bella durmiente. ¿Quieres café?-preguntó Mamá.

-Sí-contesté.

-Estoy haciendo los pancakes que tanto te gustan-dijo.

Me encantaban esos pancakes. Ella los hace ricos.

Comencé a saltar como una nena pequeña.

-Si, si, si-dije alegre.

-Hola-saludó Keysha.

-Está nevando, eso quiere decir que va a ser un día de guerras de nieve-dijo Mamá.

-Te acuerdas cuando te tiré con una bola de nieve y te dio en la cara-dije riéndome. Nunca me olvido de eso. La cara de Keysha valía un millón.

-Te acuerdas cuando después te metí un manotazo en la cara-dijo Keysha en modo de defensa.

Nos reímos, extrañaba esto.

Entro Zack a la cocina junto a Papá. Parece que se llevan bien ahora.

-Sammy, Santa te trajo regalos-dijo Zack.

-Es cierto vallan al árbol.

Corrí al árbol de navidad junto a Keysha. Estaba repleto de regalo.

Zack me dio una caja. La abrí con emoción. Era una reloj caro. Me encanta.

-Gracias Zackito-dije.

-¿Zackito?-preguntó Zack.

-Va a ser tu nuevo apodo-dije.

Nos intercambiamos de regalo todos. Y de vez en cuando Zack se me quedaba mirando. A veces pensaba que tenía algo en la cara porque se quedaba fijo. Soy bien insegura cuando se me quedan mirando a la cara.

Le di mi regalo a Zack, era ropa y unos zapatos nada barato. No tenía imaginación en que regalarle, pero al parecer le encanto

-¡Vamos a hacer guerra de nieve!-gritó Keysha.

Salimos corriendo afuera y preparé un murar con nieve. Comencé a lanzar bolas de nieve. Le tiré la primera a Mamá.

-¡Samanthaaaa! Me distes en la cara-gritó.

-Sorry-dije riéndome.

El frío me estaba matando, mierda. Voy a tener que salir de aquí por que me voy a morir. No quiero morir de frío y no ahora.

Entré a la casa dejando los demás jugar. Decidí aprovechar y darme un baño caliente. Subí a la habitación y entre rápidamente al baño, me quité la ropa y dejé el agua caer sobre mí. Que relajante, no quisiera que este momento termine.

-Sammy, ¿por qué te fuistes?-escuche la voz de Zack.

-Quería darme un baño caliente. Por poco me muero de frío-dije desde la ducha.

-Termina rápido que también me voy a bañar. Voy a contar hasta veinte y si no sales me voy a meter.

Este idiota ahora me va a hacer salir de mi momento más rico.

-20....19....18-contaba Zack. Maldito, lo odio.

Comencé a cecarme lo mas rápido que podía. Pisé la cortina, no fijé el otro pié y caí de boca al piso con todo y cortina. Ahora si voy a matar a Zack.

Alone.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora