XVII

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Alexia

Ya había aprendido, si quería que Denna pillase una indirecta tenía que ser bastante clara.

Hubo un momento en el que Cata y Jana volvieron a aparecer y secuestraron a Denna para hacer las cafres, yo decidí entrar con todas, aunque no sé si fue buena idea.

-Pero bueno, ¿Y esa camiseta?-Dijo Mapi pícara.

-¿Qué pasa?-Pregunté con una risa nerviosa.

-Que no es tuya, y si no me equivoco es de otra rubia-Dijo mi amiga con una sonrisa divertida y yo negué con la cabeza riendo.

-Tenía frío, y me la ha dejado-Dije sentándome junto a ellas.

-Que romántica-Dijo Patri haciendo que me sonrojase.

-Y tu que tonta-Dije riendo.

-Ay mira como se pone rojita-Me vaciló Mapi y yo la miré mal.

-Dios, no os aguanto-Dije rodando los ojos.

-Lo mismo decías de González y ahora le quieres hacer de todo guapa-Cuando Mapi dijo eso me quedé alucinada y ella comenzó a reír.

-¿Ya me estáis criticando?-Preguntó Denna entrando junto a Cata y Jana.

-Claro, es que nos caes tan mal-Dijo Jana picandola.

-Pensaba que había superado ya esa fase-Dijo mirándome directamente a mí.

-Todavia no-Dije siguiéndole el rollo.

-Llevas mi camiseta puesta, tienes cero credibilidad diciendo eso-Dijo riendo, me sorprendí esa faceta tan atrevida, pero me encantaba.

Las horas pasaron y cuando ya era de noche tuvimos que volver a la casa, nos quedaban solo dos días en Ibiza, mañana iba a ser un desmadre, una fiesta privada con esta gente era una locura.

A la mañana siguiente fue la primera vez que me desperté y Denna seguía dormida, quizás parecía una acosadora, pero me gustaba verla dormir, se le veía tan en calma que verla me transmitía tranquilidad.

Me levanté y fui al comedor, donde había ya algunas de las chicas, estaban repasando que iban a comprar para esta noche, las encargadas eran Cata, Pina y Laia, cosa que me daba bastante miedo.

-No os paséis eh-Dije firme y ella rodaron los ojos.

-Desactiva un rato el modo capitana porfa-Dijo Pina riendo.

Cuando fui a hacerme el desayuno una melena rubia salió por la puerta de mi habitación, tenía cara de dormida, cuando me vio me sonrió y se acercó a mí.

-Quiero darte las gracias por lo de ayer, hiciste que me olvidase de todo y que me lo pasara bien en mi cumpleaños-Dijo con la voz algo ronca y con una sonrisa.

-No es nada, me gusta verte feliz-Dije sonriente y ella se sonrojó un poco.

Desayunamos las dos juntas, las chicas que se iban levantando se añadían al desayuno y acabamos casi todas entre risas.

Las horas pasaron volando, cuando me quise dar cuenta ya estaban preparando las cosas para la fiesta, yo obviamente no podía ayudar en mucho y eso me sabía bastante mal, estaban preparando las cosas en el jardín, sería fuera ya que dentro de la casa hacía un calor infernal.

La fiesta empezó y algunas ya tenían una copa en la mano, Denna se acercó a mí con dos copas en la mano.

-Mojito sin alcohol para la reina de la fiesta-Dijo dándome el vaso con una risilla.

-¿Lo has hecho tú?-Pregunté llevándome el vaso a los labios, estaba brutal.

-No solo se me da bien el fútbol-Dijo con una risa que se me contagió.

-Está buenísimo Denna-Dije sincera y ella sonrió.

-Lo sé, aunque con Ron está mucho mejor-Dijo vacilandome.

-Mira que eres capulla-Dije mirándola mal y ella rió.

Mapi se acercó a nosotras y probó un poco del mojito, minutos después todas tenían un vaso de mojito en la mano, habían pasado algunas horas, de vez en cuando Denna y yo cruzábamos miradas, cada vez de pasaba me ponía nerviosa, y me puse más cuando se acercó de nuevo a mí.

-Te veo muy aburrida, ¿Quieres que vayamos a dar un paseo?-Propuso sonriente y los nervios me invadieron.

Denna

No iba borracha, había bebido solo un mojito así que estaba completamente consciente, le propuse eso a Alexia ya que la vi algo apagada, ella aceptó con una sonrisa, y sin llamar la atención de las demás salimos de la casa, el camino hasta la playa fue silencioso, pero un silencio reconfortante.

El viento cálido acariciaba mi piel mientras caminábamos por la suave arena de la playa, a mi lado, caminaba Alexia, con algo más de dificultad, pero con su sonrisa fácil y sus ojos llenos de una chispa que siempre me fascinaba.

-Vamos a sentarnos allí-Dijo señalando la tierra cercana a la orilla, asentí, tratando de controlar el nerviosismo que empezaba a invadir mi cuerpo. Nos sentamos y, por un momento, solo disfrutamos del silencio y de la compañía mutua.

-¿En qué piensas?- Me preguntó inclinándose hacia mí con curiosidad.

No sé si de verdad estaba preparada para decirle lo que estaba pensando, pero necesitaba soltarlo.

-En nosotras-Respondí honestamente, sintiendo un nudo en la garganta-En cómo me haces sentir-Continué nerviosa.

-¿Y cómo te hago sentir?-Inquirió suavemente, también nerviosa con su mirada fija en la mía.

-Especial-Dije, y me sorprendió lo fácil que fue decirlo-Diferente de cualquier otra persona con la que he estado.

Alexia no respondió de inmediato. En su lugar, se acercó más, sus ojos buscando algo en los míos. Pude ver la duda y la esperanza en su expresión.

-¿Y eso te asusta?-Preguntó finalmente.

-No-respondí, y era cierto.-Me asusta más que todo haya sido tan repentino, y no saber que hacer-Dije sincera, Alexia sonrió y acarició mi mano con una ternura que me derritió.

-Entonces no lo pienses demasiado, solo siente y deja que todo fluya-Susurró aún mirándome fijamente.

Antes de que pudiera responder, sus labios estaban sobre los míos. Fue un beso suave al principio, casi tímido, pero luego se volvió más profundo, más seguro. Una corriente eléctrica recorrió mi cuerpo, diferente a cualquier cosa que hubiera sentido antes. Besar a Alexia era como descubrir un nuevo universo, lleno de matices y sensaciones que nunca había experimentado con nadie más.

Nos separamos lentamente, y ambas nos quedamos en silencio, tratando de procesar lo que acababa de suceder, miré a Alexia y vi que sus ojos brillaban con una mezcla de alegría y alivio.

Ninguna de las dos dijo nada, no hacían falta las palabras, apoyé mi cabeza en su hombro y nos quedamos allí viendo cómo anochecía, ambas con las manos entrelazadas y escuchando solo la respiración de la otra en un silencio relajante.

-Llevo dos días sin beber leche -Dijo en un susurro y yo solté una carcajada.

-¿Enserio?-Pregunté riendo.

-Deseaba que esto pasase en cualquier momento, y no quería que te diera una reacción alérgica-Dijo sincera y yo volví a reír.

-¿Lo deseabas?-Pregunté divertida y ella agachó la cabeza avergonzada.

-¿Tú no?-Dijo siguiéndome el juego.

-Qué va-Dije para después dejar un beso en la comisura de sus labios haciendo que se pudiese roja como un tomate.

Me sentía en paz en ese momento, había afrontado los sentimientos que tenía por Alexia y todo había salido bien, ahora me daba miedo saber continuar como estábamos, pero haría todo lo posible para que funcionase.
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Ya se han besado🥳

Al final ha sido Alexia la que ha dado el paso

Es la primera relación de Denna con una chica, ¿Sabrá afróntalo?

𝐈 𝐇𝐀𝐓𝐄 𝐘𝐎𝐔-𝐀𝐥𝐞𝐱𝐢𝐚 𝐏𝐮𝐭𝐞𝐥𝐥𝐚𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora