III

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Por alguna razón que no entendía había algo de tensión, no podía hacer nada contra eso, era su problema, si no quería hablar conmigo no iba a forzar nada.

Alexia vino con nosotras hasta el hotel, había una salita donde podíamos estar todas juntas viendo la tele o haciendo cualquier cosa, ella estaba hablando con Jenni e Irene mientras yo escuchaba a Mapi contarme cualquier anécdota.

-Gonzalez, ¿Puedo hablar contigo?-Preguntó el seleccionador apareciendo en la sala.

Todas se callaron cuando él entró, sabía que no había muy buen rollo, lo había notado en los entrenamientos y en el vestuario, todas me miraban mientras me levantaba, pero había una mirada que pesaba más que las demás, la mirada que llevaban poniéndome nerviosa desde que llegué aquí.

-¿Pasa algo?-Pregunté ya fuera a solas con el.

-Solo quería felicitarte, se que ocupar el puesto de una jugadora como Alexia no es fácil, pero lo has hecho increíble, volverás a salir titular en el partido contra Alemania, confío en ti, no me falles-Habló con una sonrisa y yo en vez de sentirme bien tuve más presión encima.

-Le agradezco, intentaré dar lo mejor de mi-Dije devolviéndole la sonrisa.

-Eso quería escuchar, no te ocupo más tiempo te dejo con tus compañeras-Yo asentí y volví con ellas.

Alexia pasaba casi todo el día con nosotras, incluso había conseguido una habitación en el hotel para quedarse allí con nosotras, hoy era el partido contra Alemania y obviamente ella estaba en las gradas, no se porque, pero cada vez que nos cruzábamos apartaba la mirada, no me gustaba caerle mal a la gente, y menos cuando es sin razón.

Alexia

Cada vez que me encontraba a González por el hotel o en cualquier sitio me ponía nerviosa, no sabía la razón, una persona que no caía bien no podía causar eso sobre mí, no tenía sentido, nadie sabía esto obviamente, ni siquiera mis amigas más cercanas o mi familia, era algo que me avergonzaba un poco.

En el calentamiento antes del segundo partido de fase de grupo me di cuenta varias veces de que no le quitaba la vista de encima, cuando me percataba de que lo estaba haciendo apartaba la vista y miraba a cualquier otro lado, no sabía qué coño me pasaba, me estaba obsesionando con esa chica, lo más probable era que fuese por qué veía la posibilidad de que me quitase el sitio y quería.

El partido fue frustrante, el rival les pasó completamente por encima, en la cara de Vilda podía ver que tenía ganas de pegarles una buena chapa a las jugadoras, eso no era bueno, las charlas del seleccionador no eran muy delicadas a decir verdad, y esa era una de las razones que teníamos para no estar contentas con las condiciones de la federación.

Bajé al campo de nuevo, me salió la vena de capitana e intenté animar un poco a las chicas, no sé si funcionó pero lo intenté, me dejaron entrar al vestuario con ellas, sabía que les iba a caer bronca y quería estar allí.

Para sorpresa de todas cuando Vilda entró al vestuario se quedó en silencio, haciéndonos ver lo enfadado que estaba.

-Estoy muy decepcionado-Dijo en voz alta, y mirando a una jugadora en concreto, la cual agachó la cabeza.

Como capitana no podía permitir que el entrenador tratase así a una de mis compañeras, al ver cómo González agachaba la cabeza ante eso tuve la necesidad de decir algo.

-No puedes echarle toda la culpa a una jugadora-Solté llamando la atención de todas.

-¿Perdón?-Dijo ella seleccionador con una risa sarcástica.

-González no merece que la humilles delante de todas, ella ha hecho todo lo que ha podido al igual que todas-Dije muy seria y vi como la nombrada me miraba impactada

-Si hubiese hecho bien lo que tenía que hacer el partido habría sido diferente-Ante esas palabras me cabreé más, fui a hablar pero la chica a la que estaba defendiendo me cortó.

-No pasa nada Alexia, lo haré mejor a la próxima-Dijo casi en un susurro y vi como en la cara de Vilda se formaba una sonrisa prepotente, una sonrisa que odiaba ya que indicaba lo superior que se sentía comparado con nosotras.

El seleccionador salió finalmente del vestuario sin decir nada más, yo salí también para esperar a que todas se cambiasen, vi salir a todas y solo faltaba una, cuando salió llamé su atención.

-Eh, ¿Porque le has dado la razón a Vilda?-Pregunté hablándole a González.

-No quería que te metieras en problemas por defenderme-Respondió algo tímida.

-No te puedes dejar pisar de esa manera-Cuando dije eso saltó una pequeña risa y eso me sorprendió.

-¿Y qué hago?, soy la novata aquí, tengo que ganarme el sitio, y discutiendo con el entrenador no voy a hacer mucho, lo único que puedo hacer es callarme y jugar mejor en el siguiente partido-Dijo como si no hubiese otra solución.

-La culpa no es toda tuya, en ese campo erais once, no es justo que la bronca se la lleve una sola-Dije intentando que no se sintiera mal.

-Es lo que toca, y gracias por defenderme-Dijo dedicándome una sonrisa y después siguió caminando.

Aunque estuviese lesionada iba prácticamente con mis compañeras a todas partes, en ese momento estaba subida al bus de vuelta al hotel, donde obviamente tenía una habitación para mí, comencé a mirar las redes, todo eran noticias del partido, y lo que más me molestaba es que en todos lados señalaban a González como la culpable de la derrota, no era justo, a pesar del resultado había sido de las mejores sobre el verde, obviamente tuvo errores puntuales, como todas, pero que le culparan me parecía muy feo.

Denna

Me sentí bien cuando Alexia me defendió, todo el mundo me estaba echando la culpa de todo, quizás si la tenía, pero ver que mis compañeras me apoyaban me sentía mejor, sobre todo cuando la primera en saltar fue la chica que pensaba que me odiaba.

De vuelta en el hotel fui directa a la habitación, Ona me dijo que mejor no mirase el teléfono, sabía perfectamente la razón, y como tampoco iba a tener ningún mensaje decidí hacerle caso.

Ona estuvo toda la noche hasta que nos fuimos a dormir hablando de la comida del día siguiente, comeríamos con los familiares de todo el equipo, según ella era como una tradición aquí, hacían una comida con las jugadoras y sus familias para subir un poco el ánimo de todas al tener a los suyos allí.

A la mañana siguiente todas estaban emocionadas por qué llegasen sus seres queridos, cuando ya estaban todos y la comida iba a empezar sorprendentemente Alexia se volvió a acercar a mí.

-¿Estás sola?, Mapi me dijo que tenías un hermano, ¿No ha venido?-Tragué grueso ante esa pregunta y después asentí.

-Mi familia no ha podido venir, trabajan-Mentí intentando escapar de aquella conversación lo antes posible.

-¿Quieres ponerte con nosotras?-Preguntó una chica de pelo moreno, intuí que era la hermana de Alexia, ya que eran exactamente iguales.

Por la cara que puso Alexia ante la propuesta de su hermana supe que no sería buena idea aceptar, acabé sentada al final de la mesa, junto a la familia de Mapi, la cual consiguió que no me sintiese tan sola, pero notaba la mirada de la de Mollet encima mío constantemente, no entendía a esta chica, no me quería cerca, pero a la vez me defendía y no dejaba de mirarme.
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Alexia y Denna cada vez se van acercando más, pero tienen una relación algo curiosa.

Vilda es un cabron y al parecer Denna es su nueva víctima.

¿Porque la familia de Denna no está en Inglaterra para apoyarla?🤨

𝐈 𝐇𝐀𝐓𝐄 𝐘𝐎𝐔-𝐀𝐥𝐞𝐱𝐢𝐚 𝐏𝐮𝐭𝐞𝐥𝐥𝐚𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora