LXIII

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Después del parón de navidad empezaban partidos bastante importantes, ahora mismo yo no tenía ninguno a diferencia de Denna que ahora mismo estaba a minutos de jugar la final de la conti cup contra el arsenal por segundo año consecutivo, estábamos todas en casa, mi familia y las chicas, sería algo difícil para nosotras decantarnos por un equipo ya que en el Chelsea estaban Denna y Lucy y en el arsenal Mariona y Codina.

El partido comenzó y vimos un partido bastante tenso e igualdad, lo que se resume en decir que estaba siendo un partidazo, la árbitra pitó el final de la primera parte y el marcador seguía igualado a cero, en la segunda parte no había nada nuevo, se quedaban a nada del gol pero ninguno de los equipos lo conseguía, y así fue como se fueron a la prórroga.

Todas estábamos muertas de nervios y no quería ni pensar como estaban ellas, veía a Denna intentando constantemente ir a por el gol, cerca del minuto 115 cuando ya todas pensábamos que se iban a penaltis en una contra Denna tenía el balón y toda la banda libre para correr, aquello fue exactamente lo que hizo.

-Como corre la cabrona-Dijo Mapi causando una risa en medio de todos los nervios.

Cuando estuvo casi en el borde del área quiso seguir hacía delante pero una defensora del otro equipo llegó, hizo una carga no legal contra ella, Denna intentó mantenerse en pie, pero cuando apoyo la pierna en el suelo para seguir con la jugada cayó al suelo con un grito desgarrador de dolor que hizo que se me parara el corazón.

Cuando vi como caía temí que hubiese sido su rodilla, todas en el salón estaban con caras de preocupación extrema, cuando la enfocaron estaba en el suelo con una mano en la parte trasera de su gemelo y llorando del dolor, no pude ver aquello, aparté la mirada, no podía verla así.

Repitieron varias veces el momento de la falta y de su caída, cada vez que la veía me preocupaba más, las cosas fueron a peor cuando vimos que no podía levantarse por su propio pie, la sacaron del campo en camilla, ella seguía llorando y a mí se me escapó una lágrima al verla.

Denna

Se acabó, lo había notado, sabía que no era nada bueno, no solo lloraba por el dolor, lloraba porque sabía que ahí acababa todo, me había roto por completo y lo sabía.

Al apoyar mi pierna para no caer sentí un dolor agudo en la parte posterior de la pierna, un chasquido seco que resonó en mi cabeza, era como si alguien me hubiese golpeado con fuerza, pero no era así.

-Es el tendón de Aquiles-Susurró uno de los médicos hablándole a su compañero, cuando lo escuché se confirmaron mis miedos.

Desde la sala en la que estaba escuché el final del partido, segundos después escuché a gente celebrar, algunos de los equipos había marcado y no sabía cuál.

Los médicos lo único que pudieron hacer fue inmovilizarme la pierna y dejar una bolsa de hielo en ella.

Llevaba ahí un rato pérdida en mis pensamientos cuando la puerta de la sala se abrió y vi a Laia, desde que ambas estábamos en Londres nos habíamos vuelto muy amigas y agradecía que estuviera aquí.

-¿Quién ha ganado?-Le pregunté solo verla.

-Vosotras, después de la falta ha habido un centro y un gol de cabeza, pero eso es lo de menos, ¿Cómo estás?-Dijo acercándose con una sonrisa triste.

-Mal, no te voy a mentir, es el tendón de Aquiles-Le dije evitando llorar de nuevo.

-Joder…es duro pero nos tienes a todas contigo-Dijo tomando mí mano en signo de apoyo y yo sonreí.

-Lo se…-Dije triste y ella me abrazó.

-¿Quieres que haga algo?-Me preguntó al separarse.

-¿Me dejas tu móvil?-Ella asintió y me lo dió, supongo perfectamente lo que iba a hacer así que salió de allí dejándome sola.

Desde el teléfono de Laia llamé a Alexia, necesitaba hablar con ella, sabía que estaría preocupado.

-Codi, ¿Has visto a Denna?, ¿Está bien?-Dijo solo coger la llamada con bastantes nervios.

-Reina, soy yo-Dije para calmarla un poco.

-¿Estás bien?, vaya mierda de pregunta…lo siento, claro que no estás bien…-Hablaba rápido e insegura y eso me hizo sentir bastante ternura.

-Alexia tranquila-Dije con una pequeña risa.

-Dime como estás por favor-Dijo preocupada.

-Se acabó Alexia, me he roto-Dije notando como la tristeza volvía.

-No digas eso, cuando yo me rompí el cruzado también lo pensaba, pero mírame-Dijo intentando darme esperanza.

-No es lo mismo, me he roto el tendón de Aquiles Alexia-Cuando dije eso se hizo un silencio al otro lado del teléfono.

-Denna…juntas saldremos de esta te lo prometo-Dijo con un tono de voz tranquilizador.

-No me quiero casar en muletas-Dije empezando a pensar todo lo que me esperaba.

-La boda en unos meses, no estarás en muletas, y si pasa atrasamos la boda y ya-Dijo segura y yo sonreí.

-Te quiero tanto-Hablé sincera y ella soltó una pequeña risa.

-En cuanto pueda estaré allí contigo lo juro-Dijo sacándome una sonrisa.

-Aquí te esperaré-Contesté con una sonrisa de idiota, no se cómo era capaz de hacerme olvidar lo que estaba pasando.

Después de esa pequeña conversación colgué y cuando ya no estaba hablando con ella volví a la realidad, miré mi pierna la cual no podía ni mover sabiendo que esto no saldría bien, no sabía la razón, pero tenía la sensación de que esto era el final.

Muchas de mis compañeras vinieron a ver cómo estaba, me animó un poco tenerlas conmigo, cuando ya era hora de abandonar el estadio fui con ellas en el bus, pero solo llegar a Londres tuve que ir directamente al hospital.

Allí me dijeron todo, el grado de mi lesión y todo lo que harían para que me recuperara, me iban a operar ya que era una rotura grave, eso significaba que tardaría más en volver a jugar, sí volvía.

La operación sería al día siguiente por la tarde Alexia me prometió llamarme antes y después de la operación, ella no podía venir porque jugaba por la mañana y no iba a coger un avión solo salir del partido.
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Lo siento de verdad🥲

Este será el último drama de la historia lo juro

Pero esto os da más capítulos, os podréis quejar

𝐈 𝐇𝐀𝐓𝐄 𝐘𝐎𝐔-𝐀𝐥𝐞𝐱𝐢𝐚 𝐏𝐮𝐭𝐞𝐥𝐥𝐚𝐬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora