˚ · ༄ ── 𝐋𝐄𝐓 𝐈𝐓 𝐑𝐎𝐂𝐊
❛El mundo no estaba preparado para la revolución que dos bandas como Ivory Lace y Guns N' Roses supondría. Drogas, alcohol, sexo, música... No nos importaba nada, nos sentíamos invencibles. Alcanzamos la cima y nos hici...
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── PORQUE ME SIENTO COMO LA PEOR Y POR ESO ME COMPORTO COMO LA MEJOR
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Los Angeles, California 5th August, 1987
IZZY.
Era una común noche cualquiera para muchas personas, otra noche más sin importancia en el famoso club Whisky a Go Go. Ninguna banda actuaba en el momento y el ambiente que me rodeaba era despampanante, cosa irrelevante para mí, a decir verdad.
Mi cabeza pensaba en otras cosas más concretas, en otros asuntos que me carcomían internamente. Tracii esperaba a las afueras de la trasera del local, pues ambos teníamos un objetivo común, y ese objetivo era proponerle a Marian la que, posiblemente, sería la actuación más importante y peligrosa de su vida. La idea seguía sin convencerme, pues el hecho de que Marian pudiera salir malherida de toda aquella situación me mataba por dentro. Aún así, decidí escuchar y obedecer las indicaciones de Tracii por una vez en mi joven vida.
Marian era perfecta para el desempeño de nuestra arriesgada operación, y eso no podía negarlo nadie, así que todos tendríamos que correr un alto riesgo a cambio de la victoria y paz absoluta para el estado californiano y nosotros mismos.
Hoy había sido un largo día en todos los sentidos. Había entregado mercancía hoy, y muchos clientes ya me tomaban como dos figuras distintas; o bien como referente y modelo a seguir, o bien como rata traidora y pervertida. Normalmente, la suerte corría a mi favor, y la gente que aún me compraba me trataba medianamente bien, cosa que agradecía, aunque no me salvaba fácilmente de las críticas, de los golpes y amenazas que constante y diariamente llamaban a la puerta de mi mugroso y podrido apartamento.
Mi barriada era la peor de todo el estado de California y de los Estados Unidos de América en general, a decir verdad. Todo era una puta mierda... Las paredes estaban mugriento y rotas, incluso faltaban ladrillos, la pintura estaba podrida y grasienta, y el techo se caía cada vez más rápidamente. Por la noche se escuchaban gritos desesperados, gritos que únicamente podían transmitir sucios y malos pensamientos. También se escuchaban golpes en las paredes, el olor a tabaco, a drogas y alcohol era masivamente abundante y los gemidos constantes remataban el tan agradable perfil de hogar en el que, desgraciadamente, tenía que vivir y convivir con. Esto no únicamente pasaba en mi bloque, sino que también se daba cabida y paso en las calles tenebrosas de alrededor y en todos los malgastados y deteriorados bloques que las encubrían.
