El sol ya se había puesto cuando Sakura Haruno salió del hospital, su paso lento y su expresión abatida. Había pasado horas en una cirugía complicada, luchando por salvar la vida de un joven ninja gravemente herido. A pesar de sus mejores esfuerzos y habilidades, el paciente no había sobrevivido. La pérdida pesaba sobre ella como una sombra, sumiéndola en un abismo de tristeza y culpa.
Cuando llegó a casa, encontró a Kakashi Hatake esperándola. Él la había estado esperando, preocupado por ella, ya que sabía que había tenido un día difícil. La expresión en el rostro de Sakura confirmó sus peores temores.
—Sakura... —dijo suavemente, acercándose a ella.
Sakura levantó la vista, sus ojos llenos de lágrimas contenidas.
—No pude salvarlo, Kakashi. Hice todo lo que pude, pero no fue suficiente.
Kakashi la abrazó con fuerza, sintiendo su dolor como si fuera propio. Sabía lo importante que era para Sakura salvar vidas, y lo mucho que se esforzaba por cada paciente.
—Lo siento mucho, Sakura —dijo, acariciando su cabello—. Sé lo mucho que te esforzaste. No fue tu culpa.
Sakura se aferró a él, dejando que sus lágrimas finalmente fluyeran.
—¿Y si lo fue? ¿Y si pude haber hecho algo más? —sollozó—. No puedo dejar de pensar en su familia, en el dolor que sentirán.
Kakashi la sostuvo con firmeza, permitiéndole desahogarse.
—Eres una increíble kunoichi y una médica brillante, Sakura. Hiciste todo lo que estuvo en tu poder. A veces, a pesar de nuestros mejores esfuerzos, no podemos cambiar el resultado.
Sakura se separó ligeramente, mirándolo a los ojos.
—¿Cómo puedes estar tan seguro?
Kakashi la miró con ternura.
—Porque te conozco, Sakura. He visto tu dedicación y tu pasión por ayudar a los demás. Eres una luz en la vida de muchas personas, incluyendo la mía. No puedes culparte por lo que no puedes controlar.
Sakura respiró profundamente, tratando de calmarse.
—Es tan difícil, Kakashi. A veces siento que llevo el peso del mundo sobre mis hombros.
Kakashi tomó su rostro entre sus manos, limpiando sus lágrimas con sus pulgares.
—No estás sola en esto, Sakura. Estoy aquí contigo. Siempre estaré aquí para ti.
Sakura sintió un calor reconfortante en su corazón al escuchar esas palabras. A pesar de su dolor, la presencia y el apoyo de Kakashi le daban fuerza.
—Gracias, Kakashi. No sé qué haría sin ti.
Kakashi la besó suavemente en la frente.
—Y yo sin ti, Sakura. Eres mi luz en la oscuridad.
Se quedaron en silencio, abrazados, encontrando consuelo el uno en el otro. Poco a poco, la angustia de Sakura comenzó a disiparse, reemplazada por una sensación de paz.
—¿Te gustaría hablar más sobre lo que pasó? —preguntó Kakashi con suavidad.
Sakura asintió, tomando asiento en el sofá. Kakashi se sentó a su lado, sosteniendo su mano.
—La cirugía fue extremadamente complicada —comenzó Sakura—. Había tantas cosas que podrían haber salido mal, y creo que hice todo lo posible. Pero aun así, no pude salvarlo. No puedo dejar de pensar en su familia, en cómo les diré que hice todo lo que pude.
Kakashi apretó suavemente su mano.
—Es natural sentirte así, Sakura. Pero recuerda que a veces, incluso los mejores ninjas médicos no pueden cambiar el destino. Lo importante es que hiciste todo lo que estuvo a tu alcance.
Sakura asintió lentamente, asimilando sus palabras.
—Lo sé, pero duele tanto...
Kakashi la abrazó de nuevo, su calidez brindándole consuelo.
—Permítete sentir ese dolor, Sakura. Pero también permítete sanar. Eres fuerte, y superarás esto, como siempre lo haces.
Sakura se acurrucó más cerca de él, sintiendo cómo su amor y apoyo la envolvían.
—Gracias, Kakashi. Gracias por estar siempre a mi lado.
Kakashi sonrió, besándola en la cabeza.
—Siempre, Sakura. No importa lo que pase, siempre estaré aquí para ti.
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Kakasaku One Shots IA
FanfictionEsto es un compilado de One Shots Kakasaku creados por la inteligencia artificial.