Lisa oía los gritos de Jennie.
¿Por qué ahora? Ella estaba muy bien con ya no ver a esa chica con facciones gatunas. Estaba muy bien sin oír su voz. Estaba muy bien con su corazón roto.
Ella aceptó aquello.
—P-por fin te alcancé—jadeo.
Un horrible cosquilleo se instaló en su mano al sentir la calidez de Jennie, era horrible porque su corazón palpitó con fuerza. Su cuerpo era demasiado honesto.
Todo lo contrario a su cerebro quien la mantenía en la realidad, una realidad donde Jennie le hizo daño.
—Creo que no tenemos ningún asunto, Kim. Así que aléjate de mí—retiró la mano con brusquedad.
—Sí. Lo tenemos—recuperó la compostura.
—¿Qué? ¿Ahora vas a venir a este colegio para burlarte? ¿Estas tan aburrida sin un juguete al cual dañar?—sus palabras salieron con dureza—. No te preocupes, ya encontraras a una imbécil que acepte todo ello, digo, para eso eres buena, para denigrar a las personas.Parecía algo afectada por sus palabras y solo provocó que se llené de aversión.
La rabia iba en ascenso y parecía no querer disminuir ni un poco, incluso las palabras de Suga y su hermana Jisoo carecían de sentido al ver a Jennie, ¿por que querían que vuelva a ser la misma estúpida que le gusta los dinosaurios? No iba a ser la burla de nadie. No de nuevo.
—No me importa lo que digas.
—Vaya, que novedad—resopló.
—No me importa lo que digas porque sé todo lo que dices es porque estas enojada y herida. Lo entiendo—habló con sinceridad.
—Nunca. Pero escúchame bien. Nunca me vas a entender, ¿oíste?—arrugó la frente.
—Sí. Lo hago—se mantuvo firme.
—¡¿Entender qué?! ¡No enti...?
—¡Entiendo que estés herida y por eso ya no usas tu mochila de dinosaurio!
Permaneció callada y por un momento sintió mareo, oyó un pitido en sus oídos y apretó los labios. De todas las personas que pudo haberlo dicho, ¿por qué precisamente ella? ¿Por qué la necesidad de recordarle su humillante gusto por los dinosaurios?
Mala. Jennie era muy mala.
—No te importa—trató de huir.
—Me importa porque es importante para ti—sus palabras la detuvieron—. Amas esa mochila, incluso cuando me burle por primera vez no te la quitaste. Me dijiste que los dinosaurios eran geniales y empezaste a escribirme las notas. Tu mochila de, ¿Jurok? ¿Jurisek?
—¿Jurassic World?—sin ser consciente, sus ojos adquirieron un fugaz brillo.
—¡Incluso sonreíste! Aun te gusta—soltó una risita nasal.
—¿Y qué? Ya pasó. Aunque debo darte las gracias por hacerme dar cuenta lo ridícula que era—puso una mueca fría.
—Pobretona, no eres ridícula. Sol...
—Cierto, no soy únicamente eso. También soy pobre. Una vez más, gracias por recordármelo.
—¡Con un demonio trato de disculparme!—se exaspero.
—¡Ja! ¿Disculparte? ¿Cómo? ¿Recalcando que soy pobre o por mi ridículo gusto por los dinosaurios?
—¡Por todo! ¡¿Sí?! Es por todo—conectó su mirada.
—Ni siquiera sabes porque quieres disculparte. Solo quieres tener tu conciencia tranquila. Así que te perdono, ¿feliz? Ya no vengas a buscarme nunca más—declaró tajante.
![](https://img.wattpad.com/cover/354155446-288-k263166.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Yo no hablo con pobres
FanfictionSiete chicas pobres. Siete chicas millonarias. Un encuentro inesperado. ¿Qué es lo peor que puede pasar? Nota: no permito adaptaciones.