DANZA MORTAL

CAPITULO 10

CUATROS MESES MÁS TARDES

Cedric estaba en la sala tratado de llamar a Hope, la había telefoneado más de veinte veces, era la mujer más terca del planeta. Ella estaba enojada con él solo porqué le había regalado un teléfono celular.

Apena cerro el teléfono por la veintésima vez se metió a caminar de un lado para otro mientras hablaba a la nada, moviendo las manos con gestos - ¿Quién puede creer que en el 2008 una persona no tenga un maldito celular o un teléfono fijo en la casa? Por Dios hasta las personas ancianas tienen un celular. Ella vive por completo en los años 30 máximo los 50 y no solamente en su forma de vestir y cómo se comporta muchas veces, sino que también ella no usa ninguna tecnología. Yo no sé cómo es que ella no me entiende. Yo estoy en Charlotte toda la semana, ella a Raleigh y no tengo ningún modo de saber de ella hasta el viernes que es cuando ella regresa a Charlotte- Se dejo caer en el sofá y abrió los brazos en el espaldar del sofá dejando caer la cabeza para atrás con un desdén de cansancio y desesperación.

"Nadie sabe el carácter de mierda que tiene Hope, es verdad que yo no soy un santo, pero ella me gana, se comporta siempre cómo una adolescente caprichosa y pedante, aunque si ella dice lo mismo de mí, pero no es verdad, entres nosotros dos yo soy el más maduro y el más razonable" levanto la cabeza y respiro profundamente.

Cedric se levantó de sofá e inició otra vez a caminar de arriba para abajo -Hace más de tres meses que estoy detrás de ella para que comprara ese maldito teléfono- Cedric movía los brazos gesticulando mientras hacía pasos largos -O que me lo dejara que lo comprara, pero NO, la señorita A MI NO ME INTERESA NADA, no hace ni una ni la otra. Sus lemas son: yo no necesito nada, me da igual, haz lo que tú quieras, no me joda y su favorito es, a mí no me interesa nada, hay muchos más que ahora no me llegan a la mente, pero el hecho es que Hope y yo hablamos desde tres meses de la misma cosa-

Cedric tenía un público y no lo sabía, Linda y Walker estaban en un rincón a escondida escuchando a Cedric y mientras Linda reía a más no poder, Walker observaba con el ceño fruncido.

-Se atrevió a decirme que yo me mortificaba demasiado y si quería comunicarme con ella bastaba escribirle una carta ¡UNA CARTA! ¿Quién diablo se comunica con las cartas hoy en día? Pues te digo yo quien, Hope y su padre ¿Se puede creer? Y no solo eso, tuvo el coraje de decirme de comprar palomas mensajeras que son muy buenas para llevar mensajes, el problema es que ella no lo dice en broma, esa mujer hablaba en serio ¡Por Dios! Yo no pido tanto y no entiendo por qué no quiere usar el teléfono celular-

Después de tantas discusiones por la comunicación Cedric se cansó y esa semana decidió comprarle un celular a Hope pensando de hacerle una buena sorpresa, pero no fue así, Hope se negó en tomar él teléfono. Afortunadamente por poco tiempo, se podía decir que solo se negó por dos minutos. Cedric estaba muy feliz, él sabía que sería así porque al final ella siempre lo hacía contento ¡Bueno! La mayoría de las veces. Cedric pensó que Hope sabía que era él quien mandaba o por lo menos eso era lo que pensaba él.

La noche antes Hope se fue más o menos a las onces de las noches con su regalo y estaba muy contenta, cuándo se estaba marchando Cedric le pidió que lo llamara para avisarle si había llegado, pasada la medias noche no había recibido ninguna llamada de Hope y Cedric iniciaba a preocuparse, esperó algunos minutos para que ella digiera que era un exagerado y después la llamó, solo que ella no respondió y él continuado a llamarla y a las 3:00 am recibió una llamada de un número de teléfono que él no conocía, pensando a lo peor respondió inmediatamente.

Hope no lo había llamado para decirle que había llegado a casa sana y salva y no respondía a sus llamadas y un número que no conocía lo llamaba de madrugada. Lo único que le llegó a la mente fue que le había sucedido algo, imagina su sorpresa cuándo la que lo estaba telefoneando era nada más y nada menos que Hope para decirle que dejara de estar llamado que ella quería dormir y por su culpa debió levantarse de la cama, buscar un teléfono público para poder telefonear, eso fue lo único que le dijo y cerro el teléfono sin dejarlo decir una palabra. Hope le dedicó menos de un minuto y Cedric no pudo dormir de la rabia.