La vida de Jisung y Felix volvió a la normalidad, aunque sus corazones aún latían con la intensidad del reciente reencuentro. Las semanas pasaron y su amor se fortalecía con cada día que pasaban juntos. Sin embargo, el destino tenía otra prueba reservada para ellos.
Una mañana, mientras desayunaban juntos, Jisung recibió una llamada inesperada. Era el decano de la Facultad de Música.
—Jisung, hay una oportunidad increíble para ti. La universidad ha sido seleccionada para enviar a uno de nuestros mejores estudiantes a un programa de intercambio en Londres por un semestre. Queremos que vayas tú —dijo el decano.
Jisung se quedó sin palabras, sabiendo que era una oportunidad única en la vida. Pero también sabía lo que significaba: meses lejos de Felix.
—Gracias, profesor. Es una gran oportunidad. Necesito pensarlo y hablarlo con Felix —respondió Jisung, mirando a su novio con una mezcla de emoción y preocupación.
—Entiendo. Tómate el tiempo que necesites, pero necesitamos una respuesta pronto —dijo el decano antes de colgar.
Felix, que había escuchado la conversación, se acercó a Jisung, viendo la lucha interna en sus ojos.
—Es una gran oportunidad, Jisung. No puedes dejarla pasar —dijo Felix, tratando de sonar positivo a pesar de su propia ansiedad.
—Felix, no quiero estar lejos de ti. Ya tuvimos suficiente con la última vez —dijo Jisung, tomando la mano de Felix.
—Lo sé, pero es solo un semestre. Podemos superarlo. Además, esto es importante para tu carrera. Y siempre tendremos nuestras llamadas y mensajes. Podemos hacerlo funcionar —respondió Felix, sonriendo con determinación.
Jisung suspiró, agradecido por el apoyo de Felix. Sabía que tenía razón. Esa noche, Jisung llamó al decano y aceptó la oferta.
Los días previos a la partida de Jisung estuvieron llenos de preparativos y despedidas. Pasaron cada momento libre juntos, creando recuerdos que les ayudarían a sobrellevar la distancia.
Finalmente, llegó el día de la partida. En el aeropuerto, Jisung abrazó a Felix con fuerza.
—Te voy a extrañar tanto, Felix. Prometo llamarte todos los días —dijo Jisung, sintiendo un nudo en la garganta.
—Y yo a ti, Jisung. Estaré aquí esperándote. Sé que podemos con esto —respondió Felix, con lágrimas en los ojos.
Se dieron un último beso antes de que Jisung tuviera que embarcar. Felix se quedó en el aeropuerto hasta que el avión despegó, sintiendo el vacío de la ausencia de Jisung.
Los primeros días fueron difíciles para ambos. Las videollamadas y los mensajes ayudaban, pero la falta de contacto físico era un recordatorio constante de la distancia entre ellos.
Una noche, mientras hablaban por videollamada, Felix notó que Jisung parecía más cansado de lo habitual.
—¿Estás bien, Jisung? Pareces agotado —dijo Felix, preocupado.
—Solo he estado trabajando mucho. Las clases son intensas, y también estoy tratando de explorar la ciudad en mi tiempo libre —respondió Jisung, tratando de sonar animado.
—No te sobrecargues, por favor. Quiero que disfrutes esta experiencia, no que te quemes —dijo Felix, sintiendo un pinchazo de preocupación.
—Lo prometo. Solo es que te extraño mucho —admitió Jisung, con una sonrisa triste.
—Yo también te extraño. Pero recuerda, esto es temporal. Pronto estaremos juntos de nuevo —dijo Felix, tratando de animarlo.
A medida que pasaban las semanas, ambos se acostumbraron a la rutina de llamadas y mensajes. Aprendieron a valorar más los pequeños momentos y a confiar en la fortaleza de su relación.
Un día, mientras revisaba su correo electrónico, Felix recibió una sorpresa. Había sido aceptado en un programa de becas para estudiar psicología, el mismo que él y Jisung habían encontrado juntos.
Llamó a Jisung de inmediato para darle la noticia.
—Jisung, ¡he sido aceptado en el programa de becas! —dijo Felix, su voz llena de emoción.
—¡Eso es increíble, Felix! Estoy tan orgulloso de ti. Sabía que lo lograrías —respondió Jisung, sintiendo una oleada de felicidad por su novio.
—Gracias, Jisung. No podría haberlo hecho sin tu apoyo. No puedo esperar a empezar —dijo Felix, sonriendo.
La noticia de la beca fue un rayo de sol en los días oscuros de la distancia. Ambos comenzaron a planear su futuro juntos con renovada esperanza.
Finalmente, llegó el día en que Jisung regresaría a casa. Felix estaba en el aeropuerto, esperando con ansias el momento de verlo de nuevo. Cuando Jisung apareció en la terminal, corrió hacia él y lo abrazó con fuerza.
—Te extrañé tanto, Jisung —dijo Felix, con lágrimas de alegría en los ojos.
—Yo también te extrañé, Felix. Estoy tan feliz de estar de vuelta contigo —respondió Jisung, besándolo apasionadamente.
Esa noche, celebraron el regreso de Jisung y el logro de Felix con una cena especial. Mientras cenaban, hablaron sobre sus planes y sueños para el futuro, sintiéndose más unidos y fuertes que nunca.
—Felix, no importa lo que venga, sé que podemos superarlo juntos. Eres mi roca, mi apoyo, y te amo más que a nada en este mundo —dijo Jisung, tomando la mano de Felix.
—Y tú eres mi inspiración, Jisung. Juntos, podemos con todo. Te amo —respondió Felix, sonriendo.
Se besaron, sellando su promesa de enfrentar cualquier desafío que el futuro les deparara. Sabían que su amor era fuerte y que, juntos, podían superar cualquier prueba.
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Todavía te amo. Jilix
Fanfiction-Felix, esta oferta es todo lo que hemos soñado. Estoy a punto de cumplir mis sueños, y no puedo dejar pasar esta oportunidad. No puedo cuidar de ustedes ahora... -dijo Jisung, su voz rompiéndose al final. ▪︎Historia mía ▪︎Jisung Top/ Felix Bottom...