𝗺𝗶 𝗺𝘂𝘀𝗮 ─ 𝘵𝘳𝘶𝘦𝘯𝘰

cap; O3

( real life )

Catalina Sánchez

Estábamos en el estudio con Mateo; yo entré con mi vaso de mate en la mano y con una mochila donde tenía el termo con agua caliente y un par de cosas más.

—Hola, ¿Cómo están? —Saludé saludando al productor y al manager de Mateo.

—¿Y vos que andabas tan desaparecida? —Me dijo el manager, dándome una silla para que me sentara cerca de ellos.

—La universidad me tiene muerta, más encima se acercan las últimas evaluaciones y he estado estudiando. Además con los streams no me queda mucho tiempo —Expliqué y le di un sorbo a la bombilla del mate. Mateo se sentó a mi lado en un puf.

—La pobre está re copada —Dijo Mateo, yo lo miré y nos sonreímos mutuamente, cosa que no pasó desapercibida por el productor y el manager de Mateo.

—Mateo, tengo que hablar con vos. —Dijo el manager y vi como Mateo se colocaba serio, escuchándolo con atención —Me llamó Big One, quiere una canción contigo y una chica pero quiere a una chica nueva. Nos pidió si lo podíamos ayudar a buscar a una chica que quiera y se merezca esta oportunidad.

Yo escuché todo atenta y miré a Mateo para ver su reacción; él de inmediato me miró a mí.

—Vos —Me dijo. Yo lo miré sin saber que decir, sería una gran oportunidad para mí pero pensé me aterrorizaba un poco la idea, quizá no cantaba tan bien como otras chicas que se merecen esto más que yo.

—Mateo... Hay chicas que se merecen esta oportunidad más que yo... Además, estoy en la universidad y tengo que estudiar para las últimas evaluaciones... —Dije con nervios, todo me decía que aceptara la oportunidad pero estaba asustada.

—¿Tus exámenes son la otra semana, no? —Me preguntó, yo asentí y Mateo miró a su manager. —¿Cuánto tiempo nos dio Big?

—Dos semanas.

Mateo volteó a mirarme, yo miré el piso pensativa; era mi oportunidad.

"El que no arriesga, no gana" Pensé y miré a Mateo.

—Lo haré. —Mateo sonrió feliz, al igual que su manager. —Pero díganle la otra semana a Big, para librarme de los exámenes.

—Como tu digas, mami —Dijo Mateo y me guiñó un ojo que hizo que las cosquillas en mi panza aparecieran y mis mejillas se calentaran.

"¿Qué me estás haciendo, Mateo?"

Estábamos en la casa de Mateo, él se estaba bañando y yo estaba acostada en su cama, quería cambiarme ropa ya que estaba con un jeans y un top.

Me fui a rebuscar en el closet de Mateo, encontré unas calzas cortas mías y saqué una de sus sudaderas; me miré en el espejo, tomé mi teléfono y me saqué una foto, me volví a recostar y vi a Mateo saliendo del baño con las trenzas goteando y sin remera pero con el short puesto.

Me miró de arriba a abajo con una sonrisa.

—¿Vos buscás enamorarme, verdad? —Me chamuyó con una sonrisa coqueta, yo reí y le di una mirada rápida a su abdomen.

—Ya te gustaría, Mateito. —Dije riendo, él se acostó a mi lado viendo mi celular conmigo. —¿Qué vamos a hacer ahora?

—No sé, no tengo condones boluda —Bromeó y yo le di un suave golpe en el brazo. —Podemos ver algo... ¿Phineas y Ferb?

—Dale, mi wacho atrevido. —Dije riendo y acercándome a él para acurrucarme

—¿Vos me querés provocar? —Me dijo con una expresión divertida y acurrucándome en su pecho con una mano y con la otra colocó la caricatura en la televisión.

—Si buscara eso no te resistirías ni 5 minutos —Dije mirando la intro de la caricatura, Mateo me dio un beso en la frente.

—Estoy seguro de eso... —murmuró, y un escalofrío recorrió mi espalda; colocándome nerviosa.

Nos colocamos a ver la caricatura en silencio, pero yo pensaba en Mateo.

Los cosquilleos en la panza se aumentaron, mis nervios eran demasiados.

No sabía si estaba bien lo que sentía, no sabía si estaba enamorada o era algo del momento.

Conocía a Mateo como si fuera yo misma, sabía cosas que odiaba y amaba. Lo conocía de pies a cabeza, sé cuando algo le molesta con tan solo mirarlo. Era increíble lo mucho que podías llegar a conocer a la gente.

Mateo siempre fue todo para mí, desde que lo conozco es mi compañero en todo.

Pero desde que lo conozco siento ese cosquilleo en la panza y con el paso de los años se ha vuelto más intenso; cada mirada que nos dábamos, cada sonrisa, cada línea de sus canciones, cada pequeño contacto entre ambos era suficiente como para sentir el cosquilleo.

Sigo sin identificar mis sentimientos; no sé si es amor o solo son nervios por alguna extraña razón.

Pero estoy empezando a pensar que es la primera; han pasado años y en vez de disminuir, aumenta.

¿Estoy enamorada de Mateo Palacios, mi mejor amigo desde que tengo 8 años? ¿Con el que tuve mi primer beso? ¿Con el que le confié mi primera vez y él me confió la suya? ¿Con el que lloré una noche entera por una película? ¿Con el que apoyé en cada momento sin importarme a que se quisiera dedicar en el futuro? ¿Con el que me dedica canciones desde que se volvió rapero?

¿Estoy enamorada del único chico con el que me he sentido completa? Si, al parecer si.

Al parecer, estoy enamorada de Mateo.