Las visitas de Max a casa se habían hecho más concurrentes con el paso de las semanas, jugaba y compartía con Annie, me alegraba escucharlos reírse y pasar bonitos momentos entre ellos, mi madre y abuela ya lo habían perdonado y se llevaban muy bien, me levante de mi escritorio estirándome perezosamente, había pasado la mayor parte del tiempo enfocada en los últimos detalles del próximo lanzamiento que seria en agosto, estábamos a días.
Escuche a mi abuela conversar con Max sobre una serie que estaban viendo, suspire lanzándome a mi sillón del despacho un poco desanimada, mire las estrellas fluorescentes que estaban en el techo.
-lo extraño-admití en voz alta, pero no sabia realmente que hacer, desde aquella noche que me beso no había ocurrido nada, sentía que había sido simplemente producto de mi imaginación por mi bien, podíamos estar en la misma habitación pero la distancia siempre existía.
-Damia, ven a cenar-llamo mi madre desde afuera y no estaba lista para verlo, siempre trataba de evadirlo y no hacerlo más incomodo para ambos.
-no tengo hambre-respondí colocando la almohada en mi rostro agotada
-mami vamosh a comel-soltó mi hija entrando a mi despacho riendo, escuchaba sus pequeños pasos, aun seguía con la almohada cubriendo mi rostro.
-no tengo hambre, ve a comer tu-respondí girándome y dándole la espalda, sentí sus manos tocar mi espalda y cabello
-mami mala-soltó enojada y suspire -¡papi, mi mami no quiele comesh!-grito fuerte y me levante de golpe mirando como Max entraba a el despacho con cautela, trate de acomodar mi cabello y lo mire avergonzada
-hola-saludo acercándose mientras lo veía
-hola-respondí abrazando a Annie que se había subido y lanzado a mis brazos
-traje tu comida favorita, por eso Annie se ofreció a venir a llamarte-indico y sentí como mis mejillas se sonrojaban incontrolablemente -si te sientes incomoda con mi presencia me iré para que cenes-añadió y negué de inmediato
-no, solo es que he estado algo estresada-respondí mirándolo apenada y sonrió encantadoramente
-bueno vamos-animo y afirme levantándome con cuidado ya que tenia a Annie entre mis brazos aferrada como un koala solo con la diferencia que ya era un poco más pesada y grande, iba a tropezarme ya que mi rodilla se debilito solté un grito junto a Annie, pero Max corrió a rodearnos evitando la caída, sentí su cuerpo sostenerme con cuidado y sin pensarlo recosté mi rostro en su pecho sintiéndome segura
-¿están bien?-pregunto y afirme alejándome mirando a Annie quien seguía aferrada aferrada a mi
Nos alejamos tímidamente y mejor fuimos a comer en silencio, había sido un susto horrible de solo imaginarme caerme con Annie en mis brazos me aterraba, la pude haber lastimado jamás me lo perdonaría.
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Un detallito Inesperado
Teen FictionDamia Moore soñaba con ser mamá soltera y darle todo su amor, atención y comprensión a un pequeño ser por lo que estaba dispuesta a todo por lograrlo, era una chica que cumplía todo lo que se proponía. Maximiliano necesitaba ayudar a su madre y luc...