SasuNaru | Prueba de embarazo

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Advertencias: 

●Canon-ninjaverse. ●Smutt/R+18. ●Período en blanco.


¡My Cherry, Cherry, Cherry Love!

La misión "Convertir a Sasuke Uchiha en todo un hombre" había terminado en esto.

Escuchar las carcajadas y risitas de Kurama de fondo mientras le daban la noticia, Tsunade personalmente, debió ser suficiente señal.

Pero Naruto quería creer que se trataba de una broma muy elaborada por sus años de travesuras y jaquecas al fallecido tercer hokage.

—¿Qué dijiste vieja...?

Tsunade resopla y le arroja a la mesa los resultados, pasando el insulto.

—En hora buena, Naruto. Estás en la dulce espera; tendrás un bebé.

No, no, no. Él no podía estar... embarazado.

Pensarlo era incluso raro.

Seguramente la vieja alcohólica había confundido los resultados con los de una mujer que sí estaba con el vientre lleno.

Entonces una enfermera entraría corriendo por la puerta, si, esa puerta y se disculparía en lágrimas por la confusión y le dirían que solo estaba enfermo del estómago.

Tsunade volvió a resoplar cuando no comenzó a escuchar a su bocazas nieto adoptivo gritar y maldecir. 

Incluso ella estaba sorprendida por la inverosímil situación; ver los resultados, que al inicio había hecho por una aparente infección estomacal, borraron su resaca matutina. 

Luego de revisar una y otra vez la máquina de pruebas y golpearla ella borró toda indiferencia por Naruto. Y ahora se encontraban en esta situación. Tsunade quería tener fe en que seguía borracha y estaba teniendo alguna clase de delirio por intoxicación.

—No creo que tenga que decirte cómo se hacen los bebés o el cuento de la abejita y la flor.

Naruto Uzumaki sabía muy bien cómo había acabado con masa especial para bebés y ahora con un bollo en el horno.

Y Tsunade ya se daba una idea clara de quién había venido tal semilla para su flor y cómo sucedió.

—Escucha, no tengo tiempo para tus disparates cuando reacciones, así que sal de aquí.

—P-pero sólo... 《Sólo había sido una broma》—pensó patéticamente al final.

Sin opción y con el cerebro congelado simplemente salió del consultorio, viendo por encima del hombro como Tsunade sacaba una enorme botella de sake y golpeaba su cabeza contra el escritorio mientras maldecía.

Si, a Naruto le gustaría tener un refugio como ese en el que ahogarse y borrar ciertos recuerdos, pero el oshiruko ahora solo saciaba su atroz apetito y lo mantenía feliz.

—Ugh, ahora me dio hambre— acariciando su vientre, Naruto pensaba en lo lamentable que era no poder comer su amado ramen.

Teuchi debía extrañarlo mucho al no verlo cerca. Rezaba por su buena salud y que sus fideos fueran bendecidos.

En su lugar, cosas dulces y ácidas como los limones y mandarinas alegraban a su corazón y reconfortan su alma cada mañana.


Todo había comenzado por una broma. Una muy infantil.

Sasuke, un adulto de 25 años, con más alcohol que sangre en las venas, había confesado nunca haber tocado a alguna mujer.

Agosto de MpregDonde viven las historias. Descúbrelo ahora