Charlotte Morningstar, la futura gobernante del Infierno, se une a algunos de sus amigos en un intento desesperado por detener el Exterminio que azota su reino periódicamente. El Hotel, creado para redimir a los pecadores, podría ser su última esper...
Los personajes random, como avise anteriormente, los sigo llamando como "/Dem1/", "/Dem2/", "/Dem3/",etc. Pero en este capítulo, voy a agregarles nombres para que sea más fácil, cuando interactúen con los otros personajes y también para reconocerlos mejor.
Mis ojos aún permanecían cerrados, perezosa intentaba despertar, una tarea difícil por culpa de mi suave y tentadora cama. Pero una fastidiosa pesadez sobre mí, ayudo a descartar la idea de seguir unos minutos más. Incluso, por culpa de ese extraño peso, se me dificultaba respirar con normalidad...emprendí a removerme en mi cama.
Al pasar unos segundos...caí en conciencia. Abrí mis ojos de par en par y escape rápidamente, asustada de ese extraño cuerpo.
- ¡CARAJO! (Caí de la cama)
(Me sobé por el dolor de la caída) - ¡Alastor! No puedes seguir asustándome así...un día me mataras del susto.
No respondió, continuaba tumbado en la cama, boca abajo.
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- ¿He....Alastor?
Me levanté del suelo acercándome a él, pero yacía profundamente dormido o eso aparentaba. Con un gran esfuerzo y dificultad, logré girarlo. Dejándolo boca arriba, puse mi cabeza en su pecho, oí sus latidos y respiración. Exhalé todo el aire de mis pulmones, "Está vivo"...sentí un poco de tranquilidad.
Pero era extraño, lo agité repetidas veces mientras gritaba su nombre...y nada. Incluso, con un poco de culpa, le di unas leves bofetadas...pero, no hubo reacción alguna. Si se enterara de lo que hice me mataría.
- ¡Umbra! (En unos segundos se hizo presente) Algo extraño le sucede a Al... (Advertí preocupada)
(Umbra lo inspeccionó, sorprendido respondió) -Está sedado.
- ¿Sedado, estás seguro?
-No tengo dudas. Lo extraño es que no existe nada que pueda hacerlo.
- ¿Por qué lo dices tan seguro?
-Es casi imposible que duerma, normalmente, en el pasado ha probado de todo y jamás encontró algo eficiente.
(Charlie miró a Alastor) -No...lo sabía (Suspiró) Luego le preguntaré, pero mientras tanto ¿Qué haremos Umbra?
-No creo que podamos hacer más que esperar...mientras miraré los alrededores buscando alguna evidencia.
§ Narrador
Alastor entreabrió los ojos, analizó e inspecciono con la mirada su alrededor, pero todo estaba en total oscuridad. Solo irradiaba brillo la cadena que se encontraba colgando de su cuello, era lo único que emitía luz en aquel lugar.
