¿ค๓๏г ๏ ς๏รՇย๓๒гє? //YosoyplexxElmariana

El...me ama?

El beso continuo, a medida que seguían el mariana dejaba de oponerse a aquellos labios, cuando plex se percato de eso comenzó a tocar el cuerpo del contrario, con sus manos recorrió la espalda de el Mexicano, bajando lentamente hasta su espalda baja, ahí se detuvo y comenzó a apretar y amasar el trasero de Osvaldo, este debido al toque no podía evitar lanzar suspiros con su boca mientras se besaban. 
Plex empujó al Mariana contra la pared mientras lo seguía besando y tocando. En cuanto el Mexicano se topo con la pared volvió en sí y se separo de plex respirando de manera agitada y sonrojado.

Mariana: tenemos que parar, esto no está bien (agarra las manos de plex) basta.

Daniel hizo caso omiso y atacó el cuello de Osvaldo, besando y mordiendo este como si de fruta se tratase. En respuesta Osvaldo dio un gemido de dolor al sentir como los dientes del Español se clavaban en su piel.

Mariana: Pendejo esperate! (Trata de apartarlo)

Plex Lamia el cuello del Mexicano, y por debajo sus manos recorrían toda la espalda baja del mismo.
El mariana no podía soportarlo más, se sentía caliente, y muy inconscientemente quería más, quería llegar más allá, pero su otro pensar era que eso era incorrecto ya que Plex se encontraba en estado de embriaguez. 

Plex: Quiero...tenerte...quiero follarte (susurra en el odio del mariana) déjame follarte.

Eso fue la gota que derramó el vaso, el mariana dejó de forcejear y accedió al toque del contrario, se dejó llevar por la caricias.

Mariana: Vamos a mi habitación (le susurra al odio)

Plex no lo pensó dos veces y entre besos y choques con la pared llegaron a la habitación de el mariana.
Plex arrojo al Mexicano a la cama de manera brusca mientras se quitaba el restante de ropa, el contrario imito la acción.
Algo estaba claro, Plex ya no estaba tan ebrio y estaba consciente de lo que hacía, algo que Osvaldo no sabía, este solo se dejó llevar por las caricias y toques de el español. 
...
El aire estaba cargado de una tensión electrizante, como si cada molécula vibrara con una energía peligrosa.
El ventilador en el techo giraba lentamente, apenas aliviando el calor que parecía emanar no solo del ambiente, sino también de los cuerpos presentes.
Las paredes, testigos mudos de la escena, parecían acercarse, atrapando cada sonido y cada susurro.
Risas nerviosas y miradas furtivas rompían el silencio.
Los movimientos eran rápidos, casi frenéticos, y las decisiones, impulsivas.
Las manos temblorosas de Osvaldo buscaban contacto, encontrando piel caliente y respuestas igualmente ansiosas.
Las sábanas, arrugadas y enredadas, eran un reflejo de la confusión y el deseo que dominaban el momento.
Afuera, el mundo continuaba ajeno a la tormenta emocional que se desataba en esa habitación.

...
A la mañana siguiente.
El sol entró por la única ventana en la habitación,  en la cual se encontraban dos cuerpos desnudos completamente dormidos.
El primero en despertar fue Osvaldo el cual al percatarse de la escena y acordarse de lo sucedido sintió una ola de arrepentimiento invadir su mente.
Se trató de levantar pero el brazo del Español lo retenía con fuerza por la cintura, aparte de un dolor agudo que provenía de su trasero.
Dio un suspiro y con toda su fuerza se sentó en la orilla de su cama. Ni si quiera quería mirar al Español,  se sentía avergonzado a más no poder, se puso en pie con dificultad y avanzo hasta el baño para tomar una ducha y poder pensar bien en lo que acababa de suceder. 
Por el otro lado Daniel acababa de despertar, escucho el ruido de la regadera y se puso en pie, su cabeza dolía, sentía una resaca horrible, más sin embargo se sentía liberado, estaba consciente de lo que hizo y no estaba para nada arrepentido es más, se puso en pie y se dirigió al baño de donde provenía el sonido de la ducha.

Abrió lentamente la puerta y ahí vio al mexicano tranquilamente tallando su cabello, en su cuerpo había marcas por doquier, mordidas y chupetones.
Plex entró al baño junto con el, y lo tomó de la cintura, en respuesta el mexicano dio un salto y un pequeño grito, luego se giro para quedar cara a cara con el español.

Mariana: Me asustaste pendejo! (Sonrojado) que haces aquí?!

Plex: Me duele la cabeza no grites  (comienza a tocarlo de arriba a abajo) quiero un poco más de esto (aprieta el trasero de Osvaldo)

Mariana: (nervioso) E-esto está mal (titubea) Plex, estabas ebrio.

Plex: aja y el problema? (Besa el cuello contrario)

Mariana: (jadea) aun me duele el culo.

Plex: (rie) seré gentil. (Gira a Osvaldo y lo pone contra la pared) Te haría más marcas pero creo que ya no hay sitio.

Mariana: (traga saliva) No seas tan brusco, ayer parecía que estabas en celo. (Sonrojado)

Plex: (Acerca su miembro) Enserió? Y eso que no estaba en mis 5 sentidos. (Rie) bien, como me duele la cabeza solo será un rato, no te preocupes. 

Mariana: (jadea) Después de esto me debes una explicación pendejo.

Plex: (le da una nalgada) Ese lenguaje muñeco.

Mariana: solo mételo!

Plex: lo que mi muñeco diga.

...

3 hrs después

Mariana: (acostado en la cama boca abajo) dijiste que seria un rato!

Plex: (bebiendo agua)

Mariana: (lo mira) tengo sed.

Plex se acercó y en un beso le paso el agua que había bebido.
El mariana trago el agua y lo miró serio.

Mariana: eso ni en pedo me quita la sed. (Agarra la botella de agua y la bebe)

Plex: al menos lo intente (rie)

Mariana: ahora (deja la botella a un lado) Porque vergas terminamos cogiendo?

Plex: (suspira y se deja caer en la cama) No lo se.

Mariana: haste wey (se acomoda y lo mira) Desde hace tiempo había notado tus coqueteos.

Plex: Aja (lo mira)

Mariana: Como que aja?! (Molesto) Esto era lo que querías?

Plex: (niega) Tranquilo muñeco, eres alguien expontaneo, atrevido, gracioso,carismático y siendo sincero (lo toma de la mano) nunca he conocido a alguien como tu.

Mariana: (sonrojado) Enserió?

Plex: (asiente) No hay nadie más que me haga sentir como tú lo haces (le acaricia la mejilla) mi dulce muñeco.

Mariana: (suspira) y pensar que en algun momento sentí ganas de meterte un putazo. (Sonrie)

Plex: pues en cierto modo lo hiciste. (Se levanta y se pone de pie) que opinas si nos cocinas algo, Muñeco.

Mariana: claro (se levanta pero siente una punzada en la espalda baja) claro, si puedo ponerme en pie.

Plex: (le da la mano) es verdad. Mejor pidamos algo de comida rápida.

Mariana: (asiente) tengo que cambiarme.

Plex: (se coloca el bóxer) Iré por mi celular y pediré algo. (Sale de la habitación)

Mariana: (piensa)*acaso el si esta enamorado de mi?* (sonrie emocionado) *Esto es un sueño*

...