06💘

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Aquella noche fue por mucho la mejor noche en la vida de Sunoo. Sunghoon lo llevó a una hermosa habitación de hotel con la mejor vista de Seoul, pero lo único que Sunoo deseaba era estar con su alfa.Los lujos ya no lo sorprendían.

Desde que era un niño, tuvo todo lo que quiso. Sus padres lo mimaron y siempre lo hicieron sentir el omega mas especial, pero con Sunghoon se sentía completo, protegido. Era el alfa con el que siempre soñó. Era cariñoso y tierno, y a la vez protector y mandón cuando lo necesitaba. Sobre todo cuando sus horribles celos lo hacia tener una rabieta porque su lobo tomaba el control. Sunoo estaba dispuesto a mostrarle los colmillos a cualquiera omega que intentara coquetear con su alfa.

¡Mío! Su lobo arañaba furioso cuando alguien se acercaba con intenciones de llamar la atención de Sunghoon.

Por eso había estado insistiendo en tomar su nudo ¡y esa noche lo iba a conseguir!

En cuanto entraron a la habitación Sunghoon mordisqueó sus labios y Sunoo gimió disfrutando de su aroma.

—¿Quieres pedir algo de tomar?—preguntó el alfa quitándose la chaqueta y mirándolo con los ojos inyectados en lujuria. El omega negó mordiendo su labio inferior. Estaba completamente embriagado de excitación como para detenerse a ordenar algo.

—Bien.—respondió Sunghoon antes de volver a chupar esos bonitos labios y meter su lengua más profundo.

Después de eso todo fue un borrón cargado de besos y gemidos que salían de ambos.

Sunoo se sentía sobre estimulado y volando tan alto con las manos de Sunghoon trabajando mientras le quitaba la ropa.

—¡Jodido infierno!—Sunghoon se detuvo a horcajadas sobre un Sunoo recostado en la cama, acariciando la piel de su estómago y bajando con la yema de sus dedos hasta sus bragas de encaje rosa.—Eres hermoso Sunoo.—murmuró acariciando por encima de la tela su erección.

El cuerpo del omega se arqueaba inquieto buscando el roce de sus manos.

Mio, mi alfa.

Sunghoon lo rodó boca abajo para acariciar la parte trasera de las bragas. Amasando sus mejillas y gruñendo.

—Esto es hermoso bebé, pero se tiene que ir.—Dijo sacando de golpe las bragas de encaje mientras Sunoo ponía su culo más en pompa buscando su toque.

Sunghoon separó sus bonitas mejillas y rozó sus bordes jugando con el y esparciendo la lubricación con el dedo pulgar acariciando su rosado agujero, mientras el omega gemía por aquellas caricias.

Sunoo se encontró empujando contra aquel dedo, chillando desesperado y apretando las sábanas debajo de él.—¡Más, más por favor!

Su agujero se sentía vacío, necesitaba ser llenado por su alfa.

—Lléname alfa.—gimió.—Te necesito.

Sunghoon levantó las caderas de Sunoo y hundió su lengua entre las blancas mejillas. Gruñiendo y follándolo con su lengua. El pequeño omega empujaba su culo para follarse más profundo pero Sunghoon mantuvo el agarre firme en sus caderas mientras alternaba meter su lengua en el lindo agujero y morder sus mejillas.

—¡Oh por Dios!—gritó Sunoo enroscando los dedos de sus pies cuando el placer fue demasiado abrumador.—Me voy a...

—Aún no bebé.—Sunghoon se detuvo y Sunoo se mordió el labio inferior frustrado.—Voy a follarte, aún no puedes correrte. No hasta que yo lo diga.

Sunghoon quería hundirse en ese omega con labios ridículamente bonitos y piel suave.Hacerlo llorar de placer y darle el mejor orgasmo de su vida. Lucia tan bonito sonrojado, sudoroso, con sus labios rosados y bien besados.

Lo giro sobre su espalda y hundió sus dientes en su rechoncho labio inferior. ¡Dios esa boca lo enloquecía!

—Follame, por favor entra en mi.—gimió el omega aturdido abriendo sus piernas y mostrando su rosado y lubricado agujero.

El alfa se inclinó para tomar un condón pero Sunoo lo tomó del antebrazo cuando entendió lo que estaba por hacer.

—No, por favor. Quiero tu nudo. Dámelo por favor alfa.—se retorció debajo del mas grande con los ojos vidriosos y excitados.

El alfa se inclinó para besarlo, un beso áspero y cargado de deseo.

—Bien si eso es lo que quieres.—dijo dándole un par de tirones a su polla dura y esparciendo el presemen de la punta.

Sunoo asintió mientras acariciaba sus rosados pezones. Hermoso, inocente y caliente.

—Va a doler.—advirtió Sunghoon dejando un chupón en su cuello.

—Confío en ti.—Murmuró.—Anúdame alfa.

Se hundió lentamente en ese apretado calor.

Maldiciendo entre dientes mientras disfrutaba de ver su polla desaparecer dentro de Sunoo. ¡Dioses! Lo amaba, amaba a este mimado omega. No lo merecía pero era suyo. Sunghoon sentía que podía vencer cualquier cosa mientras él fuera suyo.

Balanceó sus caderas más fuerte mientras disfrutaba de este hermoso ser retorciéndose de placer debajo.

No iba a durar mucho. Así que en un movimiento rápido, colocó a Sunoo a horcajadas sobre el y lo folló mientras besaba su bonita boca y dejaba chupones salvajes en la lechosa piel de su cuello. La polla de Sunoo, se apretaba entre ellos y fue cuando el alfa sintió los espasmos de su orgasmo mientras el culo de Sunoo apretaba más su polla y sabía que se estaría corriendo pronto también.

Sunghoon apretó más el cuerpo deshuesado de Sunoo, mientras rodaba sus caderas para hundirse más profundo y correrse.

Su nudo comenzó a crecer y Sunoo chilló golpeando contra los hombros de Sunghoon para zafarse.

—¡Duele! ¡duele! Es muy grande..—¡joder! Sunoo estaba tratando de liberarse, golpeando y arañando a Sunghoon en el pecho, pero eso era ya imposible. Lo apretó más contra su pecho con una mano en su espalda y con la otra sujetaba sus caderas para poder anudarlo.

—Shshsh, todo está bien bebé.

Justo cuando el esperma lo llenó, Sunoo gritó corriéndose de nuevo y retorciéndose en el placer que llegó de inmediato.

Clavó sus dientes en el hombro del alfa mientras ahogaba gemidos.

—Todo está bien bebé, ya pasó. .—murmuró el pelinegro acariciandole el cabello y besando su mejilla.

Sunoo comenzó a ronronear como un gatito y el alfa levantó su rostro para que dejara de morder su hombro.

—¿Estas bien bebé?—preguntó pero Sunoo aún parecía sobre estimulado por el esperma del nudo.

—En un momento pasará.—dijo retirando un mechón de pelo de su frente sudada.

—No quiero que se acabe.—murmuró en bajito Sunoo y Sunghoon no pudo evitar sonreír.

El nudo de un alfa es doloroso al principio pero el semen de ese nudo hace que él omega se sienta drogado llevándolo a tener un orgasmo intenso.

Después de unos 10 minutos el nudo bajó y El Alfa rodó sobre su espalda el cuerpo deshuesado de Sunoo.—¿Quieres algo de beber?—preguntó a un Sunoo aún adormilado.

—Uhum.—balbuceó.—Agua.

Cuando volvió, Sunoo estaba profundamente dormido. Se veía tan hermoso desnudo, con las marcas de los chupones en todo el cuerpo.

Sunghoon sonrió. ¡Era el jodido alfa más afortunado del mundo!

Inocente Mentiroso || Sungsun Donde viven las historias. Descúbrelo ahora