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—¡Voy a matar a ese jodido alfa!.—Jungwon gritaba como loco.—¡Vas a decirme quien es! ¡Le cortaré las bolas!

—¡Mámaaaaaaa!—Chilló Sunoo.

—Jungwon, relájate ya. Tienes que respetar la decisión de tu hermano.

—¿Decisión? Sunoo no está pensando claramente. Ese bastardo le hizo un cachorro, por lo menos debería romperle...Mira Sunoo, no puedes protegerlo. Tiene que hacerse responsable, debió pensarlo mejor antes de meter su... hacerlo sin protección.—Se corrigió.

—¡Fue mi culpa! El pensó que me estaba cuidando, yo lo hacía.—lloriqueó Sunoo.—¡No te dire quién es!

—Esto es estúpido, apenas y puedes cuidarte tu solo y ¿cuidaras de un cachorro?

—No soy estúpido.—gruño Sunoo apretando los puños.—Puedo cuidar de mi cachorro.

—Bueno, bueno ya está bien.—interrumpió su padre.—Vamos a calmarnos todos. Si Sunoo quiere tener al cachorro y hacerse cargo, nosotros lo apoyaremos.

—¡Genial! Más le vale a ese alfa imbécil que no lo encuentre—bufó Jungwon antes de azotar la puerta detrás de el.

—¿Estas seguro Sunnie?—preguntó su madre acunando sus mejillas y Sunoo asintió.—Estas dejando fuera de esto al padre de tu cachorro.

—Sunghoon va a odiarme mami. Yo quiero que sea feliz, no lo será por mi culpa.—chilló.—Por favor, yo seré un buen padre.

—Esta bien, es tu decisión cariño. Vamos a apoyarte.

Ese gran cambio en la vida de Sunoo lo animó. Había pensado que estaba realmente enfermo de amor pero resulto ser por el pequeño cachorro que crecía dentro de él. Un bebe de Sunghoon, pensaba emocionado. Amaba a Sunghoon y aunque todavía tenía el corazón roto, el cachorro era un consuelo en su corazón.

Se pasó horas leyendo blogs de bebés, recopiló toda la información necesaria para estar listo durante los siguientes meses. Investigó la psicología de los cachorros nacidos sin un vinculo, no era tan malo. Estaba listo para darle todo el amor y cuidado a su bebé.

Aquella tarde, se encontraba emocionado buscando posible nombres, hizo una lista de los que mas le gustaban mientras disfrutaba de los deliciosos trozos de manzana que su mamá le había preparado. Lo estaban consintiendo aún más en casa desde que supieron del cachorro. ¡Demándenlo! Siempre fue el consentido de la casa, ahora lo sería mas.

Su celular lo interrumpió con un mensaje, erа Jake...
Sunoo, lo siento mucho. La he cagado...

Sunoo miró confundido el mensaje, apenas se decidía a responder pero una llamada entró y abrió los ojos sorprendido en cuanto vio el nombre en la pantalla. Sunghoonie♡

Sunoo se levantó de golpe de la cama, tragó el trozo de manzana que tenía en la boca y respondió al tercer timbrazo.

—¿Hola?

—Sunoo, tenemos que hablar. ¿Donde estas ahora? Estoy llendo a tu casa.

—¿A mi casa?

—Si, estaré ahí en menos de tres minutos.—Sunghoon se escuchaba molesto pero entonces Sunoo recordó...¡Jungwon estaba en casa!

Sunghoon, no puedes...—La llamada se cortó.

Sunoo corrió se puso unos jeans, peinó su cabello en el espejo y roció un poco de perfume. Antes muerto que sencillo ¿no?

Cuando se apresuraba a bajar las escaleras, el timbre de la casa ya estaba sonando.

Inocente Mentiroso || Sungsun Donde viven las historias. Descúbrelo ahora