Inocente Mentiroso || Sungsun

20💘

—Sunnie, perdóname.—puchereó Jake.—Fue un accidente.

—¿Cómo sucedió Jake?—preguntó Sunoo molesto.—¿Cómo verías a Sunghoon por accidente?

—Yo, bueno...hay algo que no te he contado…—Sunoo alzó una ceja expectante.

—El alfa bruto y yo...estuvimos follando.

—¿Queeeeé!? ¡Zorra!—apuntó con su dedito.—¡Debi imaginarlo! ¡Se te iban los ojos por ese alfa! ¡Por eso le mandabas fotos en bragas! Morías por follar con el.

—Pero ya se terminó—se defendió el omega castaño—El solo me dijo que no podía seguir haciéndolo. Ese día el...

Jake le contó.

Ese día Jake se había sentido demasiado perezoso para ir a casa después de follar. Últimamente disfrutaba de pasar más tiempo en casa del alfa y esa mañana despertó abrazado como un koala de Ni-ki. Abrió los ojos y encontró al alfa despierto con la mirada clavada en el techo y un brazo detrás de su cabeza.

Tan sexy, pensó Jake.

—Buenos días.—musitó Jake perezoso.—¿Hace mucho que despertaste?— murmuró juguetón restregándose en el cálido cuerpo del alfa, siempre funcionaba para conseguir otra ronda de buen sexo antes de irse.

Ni-ki giró su cabeza y miró al omega con una expresión impasible.—Se acabó Cara de muñeco.—dijo lacónicamente.

—¿Perdón?—Jake frunció el ceño.

—No follaremos más.—aclaró.

—¿pasó algo? ¿Hice algo que te enojó?

—No, solo se acabó.

—¿Estás bromeando? ¿Por qué decidirías tú cuando se acaba?—preguntó molesto Jake sintiendo su orgullo herido y se levantó para encarar al alfa.

—¿Eso te molesta? Nadie lo sabrá, así que no te preocupes...tus amiguitos no sabrán que follaste con un alfa como yo.

—¡Eres un idiota! ¿Cuál es tu maldito problema con mis amigos? ¿Estás celoso?.—rió sardónico el omega.—No me digas que quieres exclusividad.

—No dije eso.—bufó Ni-ki.—¡Eres tú el que disfruta contándome cómo se pelean por ti esos idiotas! Te encanta tener toda su atención.

—Solo acepta que estás celoso. ¿Estás enamorado?—preguntó con burla Jake.

—No dije eso. ¿Tú lo estás?

—Por supuesto que no.

—Entonces ¿por qué te molesta tanto que te diga que se acabó? Pensaría que estás dolido.

—¡Vete al diablo!—gritó Jake poniéndose la ropa.—No te creas tan especial, solo eres un buen polvo.—Jake salió furioso de la habitación y continuó despotricando.—¡Te lo dije mil veces! Yo no soy tan estúpido como para enamorarme de alguien como tú. Mira como termino Sunoo, embarazado de ese estúpido alfa. ¡Yo no terminaré así!

—¿Qué dijiste?—la voz de Sunghoon detrás de él, lo sorprendió. Jake giró y lo miró atónito.

—¿Acabas de decir que Sunoo está embarazado?—Sunghoon ladeó el rostro.

—Y-yo no dije nada.—balbuceó el omega.

—Si que lo dijiste. ¡Lo acabo de escuchar!

—¡Bien! ¡A la mierda, lo dije! — cuadró los hombros—¡Ustedes dos son igual de horribles, sobre todo el imbécil de tu amigo y espero no volver a verlo nunca— pasó de lado chocando el hombro de Sunghoon y se marchó.

Jake le escribió un mensaje a su amigo, la había cagado. Sunoo iba a matarlo esta vez.

—¿Por qué no me lo dijiste Jake?—preguntó molesto el rubio después de escuchar la historia de su amigo.

—Porque tenías demasiado con lo de Sunghoon y se suponía que solo pasaría una vez.—respondió Jake con expresión triste.

—Estás triste. No es pregunta Jake.

—No es para tanto Sunnie.—Jake se encogió de hombros.—Solo es mi orgullo herido, ya se me pasará.

—Ven aquí tonto.—Sunoo abrazo a su amigo.—Soy tu amigo, estoy enojado por tu boca floja y porque se supone que nos contamos todo.

—Perdóname Sunnie.—Jake sorbió su nariz.

—No importa. ¿Tu estás bien?

—Si, ese estúpido alfa... ¡Puede irse al demonio! ¿Cómo se atreve a votarme así? ¡Que se joda! ¡No quiero volver a verlo, ni a él ni a sus estúpidos hoyuelos!...—bufó apretando los puños—pero... ¿Qué hay de ti?—preguntó cambiando el tono de voz.—¿De verdad irás a vivir con Sunghoon?

Sunoo puchereó triste.—Jungwon estaba furioso y casi lo obligó a ello. No creo que sea lo que Sunghoon realmente quiere.

—¿Qué quieres tu?

—Yo...no lo sé. Ya estaba resignado a criar al cachorro como padre soltero. Amo a Sunghoon y tener un familia con él suena muy bien para mí pero...¿y si él me odia? Jake no podría soportarlo.—chilló cubriéndose el rostro.

—No creo que te odie. Cualquier otro alfa hubiera huido después de saber que estabas embarazado. Es tu oportunidad Sunnie.—Jake alzó las cejas repetidamente.—Tienes que recuperar a tu alfa.

—Si, es mi alfa.— reafirmó el rubio con determinación.

💘 💘 💘

Del lado de Sunghoon las cosas no iban bien, su enojo con el omega no disminuyó. Sunoo había estado dispuesto a esconder el embarazo y eso lo tenía furioso. También estaba estresado, el embarazo le había caído con un balde de agua fría en su peor momento. Sus finanzas empezaban a mejorar con el negocio pero el futuro era incierto aún y con dos bocas más que mantener no la iba a tener nada fácil.

—Eres un idiota ja ja ja.—reía Ni-ki.—¿No se te ocurrió usar protección? Ese omega es más astuto de lo que creía.

—Cállate Ni-ki.—resopló Sunghoon molesto.—Sunoo ni siquiera iba a decírmelo. Si no fuera por su amigo jamás lo hubiese sabido.

—¿Y ahora?

—Supongo que tendré que decírselo a mi abuela.—el alfa se talló el rostro.—Su hermano quería cortarme las bolas, si no me llevo a Sunoo conmigo quedaré como un cobarde.

Ni-ki rió más alto.—¿Quién lo diría? Ese omega te tiene agarrado de las bolas otra vez.

—No es gracioso. Ahora tengo que mantener a Sunoo y a un cachorro... Espero que tú sí hayas tenido cuidado con su amigo.

—Por supuesto, no soy un imbécil.—se defendió Ni-ki.—Siempre pude sacarla a tiempo ja ja ja y sin problemas. Ademas, lo del Cara de Muñeco y yo sé acabo, tú lo viste.

—Si y desde entonces tu humor ha empeorado.—murmuró Sunghoon con tono sardónico.—Estás seguro de que no te importa?

—¡Vete al diablo Sunghoon! ¿Por qué me importaría? Ese omega pensó que me tenía enredado en su dedo meñique. Solo es una cara bonita para follar.

—Bien, eso es bueno amigo. Me alegra que no te afecte como dices.—respondió Sunghoon en tono burlón.—El omega parecía ya muy apegado a ti y sobre todo a dormir en tu habitación demasiado seguido. Pensé que pronto se mudaría, a tu mamá le estaba empezando a agradar tomar el desayuno con el.

—Bueno, bueno. ¡A trabajar que tienes bocas que mantener!—cortó Ni-ki.