|Cap 30|

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—Visita al Hotel—

Ese mismo día, en el Hotel

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Ese mismo día, en el Hotel.

Vaggie bajó las escaleras, observando cómo todo el personal estaba reunido, viendo a una Charlie que se volvía loca.

-¡No entiendo por qué no funciona el plan! ¡Vamos a ver...! ¡Vamos, Charlie, piensa, piensa, piensa! -la menor se golpeaba la cabeza con estrés. -¡Si empiezo con un salto de confianza cada mañana! ¿¡Pero qué pasa si...?! -se interrumpió a sí misma, desesperada.

-Pobrecita. -dijo Angel con preocupación, viendo cómo Charlie se atormentaba.

-Charlie. -llamó la albina con suavidad. -Amorsito. -repitió Vaggie, acercándose a ella.

-¿Estás bien? -preguntó Caín, mirándola con inquietud.

-¡NO! ¡No, para nada! ¡JAJAJA! -se giró hacia la pizarra, llena de anotaciones. -Me quedé despierta toda la noche tratando de entender por qué mi plan no funciona. ¡Ni los saltos de confianza ni compartir nuestros sentimientos están dando resultado! ¡Y ya solo quedan pocos meses para la exterminación! ¡JAJAJA! -se rió desquiciada, dejando escapar varias almas en pena de su boca.

-Tal vez deberías... -empezó a sugerir Vaggie, dudosa.

-NO.

-Contactar...

-NO, LO DIGAS. -amenazó la princesa, fulminándola con la mirada.

-A papá. -sugirió Caín con mala gana, cruzándose de brazos.

-A tu papá. -dijo Vaggie al mismo tiempo, viendo a su novia desplomarse.

La princesa se quejó bajando sus orejitas de cabra. Su padre es literalmente el diablo, ni quién lo aguante.

-Charlie, sé que no se llevan bien, pero necesitamos toda la ayuda posible. -Vaggie la tomó de las manos, tratando de animarla.

-¡Pero él fue quien permitió la exterminación en primer lugar! En el cielo le preguntaron y dijo "¡Claro, vayan y maten a toda mi gente!" sin importarle que mi madre sí quiere a sus hijos. -Charlie se detuvo un momento, una idea brillante cruzó su mente. - ¡Ya lo tengo!

-¿Matar a todos? -preguntó Caín, levantando una ceja.

-¡Papá podría conseguirme una reunión con el cielo! -dijo Charlie, esperanzada.

-¿Qué no hizo eso ya? -preguntó Vaggie, frunciendo el ceño.

-¡Lo hizo! Pero con Adán, que es todo un cabronazo. -Charlie sacó su celular, buscando el contacto de "Lucifer". -Necesito hablar con gente sabia.

Charlie se detuvo en seco, pensando si era buena idea. Su padre siempre la había odiado después de su idea de redención, literalmente le hubiese arrebatado su apellido si su madre no lo detenía y amenazaba.

Alas de Rebelión . //AppleRadio//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora