Capítulo 28 Alexa

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Después de dos días en el hospital por fin nos dieron el alta y nos estamos yendo a nuestro hogar, cuando llegamos están todos recibiéndonos entre todos ellos veo a Alejandro con un brazo en un cabestrillo, me acerco a el y le doy un abrazo.

_ gracias por cuidarnos y protegernos no sé qué hubiese pasado si no estabas cuidándonos, te lo agradezco un montón, no solo por lo ultimo sino por lo de todos estos años. - el me da una media sonrisa.

Alejandro- no agradezca señora ese es mi deber, usted tiene mi lealtad y hasta que deje de respirar la voy a seguir cuidando a usted como a todos los bebes que esperan.

Miro toda la habitación viendo a toda mi familia junta mis ojos paran en un grandulón que me esta mirando, me acerco a él.

_ podemos hablar? El me asiente.

Vamos a el despacho entramos cierro la puerta, camino hasta los sillones sentándome veo como Matteo toma el que está enfrente mío, nos quedamos mirando por unos segundos.

Matteo- Perdona Alexa te juro que nunca quise que pensaras que te deje abandonada, es que no quería que estuvieras en este mundo que no sabes cuando vas a acabar con un tiro, no quería eso para ti quería que tuvieras una vida normal, te cases con un hombre decente y tengas hijos. - yo me rio.

_ bueno me case y voy a tener hijos, no pidas disculpas el pasado hay se queda en el pasado, que te parece si empezamos de cero? El me da una media sonrisa.

Matteo- me encantaría Alex, siempre pensé que hubiese sido si estuviéramos juntos tener una hermana y ahora no voy a desperdiciar eso.

_ gracias por lo que hiciste por fede te arriesgaste tu para donarle el hígado. - el niega.

Matteo- no agradezcas lo hubiese echo mil veces por cualquiera de ellos.

_ bueno así que ahora tengo un hermano mayor, que está casado de mi mejor amiga que loco.

Me siento muy nerviosa no sé qué hacer nunca pase por esta situación lo tendría que abrazar son muchas preguntas y dudas veo como el me mira, sin pensarlo mi cuerpo se levanta moviéndose hasta estar enfrente de Matteo, veo como el se para nos miramos y lo abrazo el me toma entre sus brazos dándome ese calor de hermano que necesitamos.

Salimos del despacho todos nos quedan mirando como bichos raros, yo salgo con una sonrisa atrás mío viene Matteo.

Matteo- mas cale que no me hagas arrepentirme de donarte mi hermoso hígado y trates bien a mi hermana y sobrino sino me voy a olvidar de todo y te voy a sacar el hígado con mis manos. - todos se ríen.

Veo como federico se acerca a mi lado abrazándome.

Fede- ya no mas no voy a meter la pata nunca más es una promesa, ya no más mentiras.

Estamos todos charlando cuando la puerta se abre de golpe, entra alguien corriendo directo a mi esposo y lo abraza.

Alai. Dios ni bien me entere tome el primer avión que encontré, como estas hermanito, no sabes el susto que me pegue.

Fede- Alai princesa como supiste?, estoy bien tranquila no fue anda.

Veo como ella se despega de el y me mira a mí.

Alai- y tu cuñada como estas como esta mi sobrino hermoso. - me da un abrazo tocándome la panza.

_ Estamos bien por suerte y tu estas bien corazón. - ella asiente.

Alai- si veo que me preocupe demasiado. - Ella comienza a saludas y darles abrazos a todos.

La miro con duda por que su actitud fue un poco rara, la miro de pies a cabeza buscado algún indicio de algo que oculte, la veo moverse cuando va saludando a los chicos y veo que hace un gesto de dolor cuando Romeo la abraza un poco fuerte levanto una ceja.

Abogadas de los Mafiosos HackerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora