Min YoonGi y Min Jungkook son dos hermanos qué lideran a la mafia más poderosa de Corea del sur, sin embargo sus vidas comienzan a dar un drástico giro cuando dos lindos chicos aparecen en sus vidas.
Park Jimin solo quiere tener su libertad y Kim T...
Nota: La letra en cursiva se usa para referirse a recuerdos pasados, los espacio qué no están separado por un separador son saltos en el tiempo entre recuerdo y recuerdo.
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—¡Hey, YoonGi!—El aludido vio sobre su hombro al hombre de edad un poco más avanzada que la suya acercarse hacia él.—Te estaba buscando, quiero presentarte a alguien.—El hombre se giró un poco, YoonGi pudo ver a el acompañante de su amigo, un joven chico quizá de su edad, unos centímetros más bajo qué él.
—Hola.—Sonrió suavemente, estiró su mano hacia el chico y este la tomó rápidamente, no dejó de ver sus ojos.—Min YoonGi, un gusto.
—Kim Daehyun.
—¿Algo más?—Wook fue el primero en mirarlo y quizá también el primero en saber que algo andaba diferente.
YoonGi no lo miró estaba nervioso, jamás había tenido una relación formal, mucho menos había tenido que presentar a alguien con su familia, pensó que cuando el día llegará podría pedirle un consejo a su padre, pero ahora mismo el ya no estaba en este mundo.
Tomando la valentía qué tenía suspiró dejando de lado todos sus miedos y encaró a los tres pares de ojos qué lo veían con curiosidad.
—Estoy saliendo con alguien.
—Jungkook…—YoonGi gruñó levemente molesto. Su hermano ignoró por completo el sonido y continuó.
—YoonGi, solo escucha ¿Si? Se que estas enamorado y todo pero, no creo que Daehyun sea alguien en quien podamos seguir confiando, lo vi merodeando en documentos importantes y c…
—Dije que ¡Basta!—El pálido terminó de colmar su paciencia, vio a su hermano con molestia cargada en los párpados, este al verlo cayó molesto y ofendido.—Conozco a Daehyun, sé que es alguien bueno.
—No. No lo sabes.—Su hermano le miró herido.
—¿Me necesitas?—Wook asomo su cabeza por la puerta, Min alzó la vista antes de asentir y dejar de lado un par de documentos que estaba revisando.
—Necesito que me hagas un favor, pero voy a necesitar que seas discreto ¿Bien?—Su hombre de seguridad asintió.
—¿Qué es?
—Necesito que sigas a Daehyun, quiero saber todos sus movimientos.
Tomó entre sus manos la carpeta oscura que Wook había dejado sobre su escritorio esa mañana, no quería abrirla, porque hacerlo significaba perder una parte importante de su vida, pero no podía seguir con la duda, no iba a poner en riesgo a su familia por alguien que solo estaba ahí para lastimarlos.
