¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Venías de un mundo que no alcanzaba a imaginarme. Eso ame de ti, esa extrañeza". -Octavio Paz.
- ¿Hoy no vas a irte con Jacob todo el día?.
- Mm no, hoy quiero pasar mi dia con mi papá favorito - le sonreí cuando el volteo hacia mí - hace tiempo no hacemos algo juntos.
Él simplemente me observo como no creyendo lo que le decía, y bueno eso es mi culpa. Pase demasiado tiempo fuera que es razonable que él piense eso, pero ahora que todo está en orden no volvere a irme de casa.
— Podemos ir a pescar juntos.
— Te dan miedo las lombrices — primer pero, para esa actividad.
— Ya se ... podemos salir en tu patrulla para checar la sona.
— No haremos eso Lana, es peligroso. Además no te dejare subir a mi patrulla otra vez.
Chispas, es tan dificil convencer a papá después de eso. Creo que el pequeño choque estuvo de más, pero en mi defensa aún no sabía conducir adecuadamente. Y me emocioné demasiado cuando me dijo qué podía subir a la patrulla.
— Tu rata ayer me dio un susto horrible — yo no tengo ratas que recuerde, pero tal vez se refiere a copito — cuando termino de comer... se fue a ese lugar dónde pusiste esa cama que le compraste.
Chispas, creo que ya se hacia donde va todo. Esto.
— Pensé que había ido para dormir y así fue por qué después no lo vi más, pero cuando pase por ahí — la cara que tenía justo ahora papá era de susto al máximo nivel, y como me tenerla. Se que me contara a continuación y es justificada — él estaba durmiendo en una pose algo extraña. Tenía medio cuerpo en la cama y la mitad fuera de ella, lo moví pero no reacciono. Estaba por llevarlo con el veterinario para que lo revisara, pensé que había muerto. Pero después se despertó como si nada hubiera pasado, ¿Podrías explicarme que le sucede?.
— Verás ese es una de las características de los hurones, también me ha pasado a mi. La primera vez también me asusto de manera horrible, pero después de investigar un poco más. Me di cuenta de qué era normal en él hacer eso, y se me olvidó decírtelo. No hay de que preocuparse descuida.
— Gracias por quitarme un peso de encima — pobre Charlie, tengo que recordar contarle esas cosas. Él suele ser demasiado asustadizo — ahora ya la tranquilidad volvió a mi cuerpo.
Me encanta platicar con papá, siempre tiene algo nuevo que decir. Y siempre me anima en cualquier momento. Pero creo que justo ahora, la que termino animandolo fiu yo.