Capítulo 44

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CAPITULO +18

Estoy en el cuarto recostada en la cama mientras trato de recordar lo último que paso antes de todo este desastre, hace 5 años. Escucho como tocan a mi puerta, sin enderezarme pido que pase.
Me fijo quien es y es Alexei.

--Ahora eres la sirvienta de la casa?-- pregunto un poco burlona

Él voltea a verme mientras deja la charola con comida en el escritorio-- Para ti, soy lo que sea-- dice muy coquetamente, alcé las cejas junto con una sonrisa

--Harías cualquier cosa que yo te pida?-- sigo en la cama, lo veo de pies a cabeza y me muerdo el labio, él no deja de mírame, sus ojos brillaron de un dorado muy sexy

--Eres mi reina, por ti, hasta doy la vida-- dice muy seguro

--Quítate la ropa-- digo muy segura, él  me mira no muy seguro-- dijiste que lo que sea, así que quítate la ropa-- hice el movimiento con mi mano para que lo hiciera

Dudosamente puso sus manos en su cinturón y lo desabrocho, al mismo tiempo se quitó las botas, desabrocho su pantalón y no lo bajo, sonrió y se quitó la playera negra que traía, madre santa, ya lo había visto sin playera pero cada vez es un regalo a la vista.

Dudo en los pantalones--continua-- dije disfrutando de la vista

--La verdad es que no me gusta ser el único desnudo en una habitación-- sonríe muy sexy

--Esta bien-- me levante, empece a sacar mis tenis, para luego desabrochar mi pantalón y quitar mi blusa, básicamente quedamos igual los dos

--Mi reina...

--Dime Morgan, me estas viendo desnuda o semidesnuda, cuando terminemos aquí te digo como debes llamarme después.

Dicho esto nos besamos, aclaremos algo aquí, no tengo 18 años, fácil tengo unos 450 años, claramente virgen no soy, me gusta cuando las cosas pasan como quiero y sin tantos rodeos.

Alexei besa de manera increíble, nuestros cuerpos están lo más pegados que pueden, me levanta tomándome del culo y yo en respuesta enrolle mis piernas en su cadera.

Me recuesta en la cama separando el beso dejando mis labios con ganas de más, lo miro él sonríe y sin decir nada toma mi pantalón e intenta sacarlo de mis piernas, lo ayudo alzando la cadera y moviendo un poco mis piernas, quedando ahora si en ropa interior para él.

Alexei se limita a mirarme y procede a bajar su pantalón en donde deja ver una notable erección bajo ese bóxer negro, alzó las cejas y muerdo mi labio.

--Te gusta lo que ves?-- me pregunta

--Definitivamente y a ti?-- preguntó

--No tienes ni una idea-- vuelve a besarme recostandose encima de mi.

Mis manos viajan a su espalda bien trabajada, mis piernas están a cada lado de su cadera, haciendo fácil dar la vuelta quedando encima de él, me incorporo quedando sentada en su erección, me muevo lentamente de atrás para adelante mientras llevo mis manos al seguro de mi sosten y lo retiro dejando así mis pechos al aire, a su vista, a su merced.

Alexei no pierde el tiempo y toma uno masajeandolo delicadamente, nos vuelve a girar para así quitar las últimas prendas que nos están estorbando. Ahora si, completamente desnudos, una vez más se ubica encima de mi, entre mis piernas, acomodándose siento como rosa mi entrada.

--Estas completamente húmeda-- lleva sus dedos a mi entrada haciendo que mi cuerpo tenga una oleada de placer-- sabes muy bien, como toda una reina-- le sonrió y lo jalo a mi para besarle y sentir mi propio sabor.

En medio del beso siento como lentamente se introduce en mi, haciendo que deje de besarle para poder gemir de puro placer, él se da cuenta de que me gustó, por lo que empieza con estocadas más rápidas, haciendo que me agarre con fuerza de su espalda dejando marcas en ella, ambos estamos gimiendo y dejando besos de placer en el cuello del otro.

De repente se alejo de mi haciendo que sintiera un vacío-- volteate-- fue una orden a lo que gustosa hice caso, quede en posición de perrito, con el culo al aire el pecho bien pegado a la cama y las rodillas con una separación considerada-- perfecto-- susurro

Sentí una nalgada dando placer a mi cuerpo, cuando creí que se introduciria de nuevo, empecé a sentir su lengua en todo mi coño, lamiendo y succionando, mi clitoris estaba en su punto y él lo noto, siguió con su lengua hasta que empecé a sentir ese hormigueo en el cuerpo, ese calor que sabes que lleva al orgasmo.

--Sigue así-- ordene entre gemidos

--Con gusto, quiero probarte

Y así fue, el orgasmo llegó fuerte y fascinante, lo sentí succionar más.

--Sabes exquisita-- llena de placer no pude responder pero sentí que ahora si, su miembro formó parte de mi otra vez, estocada tras estocada, una nalgada tras otra, tomo mi cabello y tiro de el, lo único que puedo pensar es el placer de todo esto.

Unos minutos más y otra vez el hormigueo y el calor llego a mi, otro orgasmo, pero este llego junto con el de Alexei, sentí como su miembro palpitaba dentro de mi. Salió de mi y se tiro a un lado de la cama, yo solo me dejé caer en mi lugar. Voltee a verlo y tenía una capa de sudor en su frente haciendo que su cabello se pegara en ella. No sería la primera vez que nos vemos sudados.

--Definitivamente dime Morgan-- dije haciendo que riera por lo bajo y yo lo seguí.

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