Capítulo 40

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*Capitulo algo largo.

Las semanas pasaron de manera rápida y sin algo interesante, mis días solo eran levantarme, desayunar, entrenar con Alexei, pelear con Angelo que anda de un humor que ni el diablo lo quiere, ocasionalmente me topaba con alguna de mis hermanas pero nada relevante sucedía.

Como días anteriores estoy esperando a Alexei para entrenar. Escucho como se abren las puertas y bajo la máscara sonrió al verlo, me agrada y es muy bueno conversando.

--¡Por fin llegas!-- él me sonrió, esa sonrisa es para morir

--Morgan ¿Qué te parece si hoy no hacemos nada agresivo?-- lo mire a los ojos

--¿Por qué?-- ya se canso de mis golpes-- ¿Ya me tienes miedo?-- empezó a reír

--No, para nada, pero hoy es tu cumpleaños, no puedes andar toda morada en la ceremonia, Jonathan me azotara-- se veía que hablaba en serio y suspire

--Bien, solo porque creo que soy la unica que te puede golpear-- él sonrió asintiendo

--Vamos a correr alrededor del terreno ¿Qué te parece?-- bajo mi máscara juro que estoy sonriendo

--Vamos, veamos que tan lento eres

Mientras bajamos no dijimos nada, aunque se que por dentro se moría por hablar, en el castillo todas las paredes escuchan y más ahora que todos se ven extraños, supongo que estresados por el evento de hoy en la noche.

--Ahora, haz la pregunta-- volteo a verme como si no me entendiera-- oh por favor, se que te mueres por preguntar-- me analizo con la mirada

--¿Segura?-- asentí mirándolo-- ¿Cuántos años cumples?-- sonreí con malicia

--Cumplo 18, ¿No es así?-- en mi mirada él podía notar la duda

--Claro que sí-- hizo facepalm-- que estupido soy-- me reí por su reacción

--Bien, entonces empecemos.

Empezamos trotando y luego empezamos a correr, estábamos entre risas y bromas, me burlé de él cuando se tropezó y él de mí cuando me estrelle contra un árbol por estar viéndolo, luego nos persiguieron los perros, no supe de dónde demonios salieron pero sí que corrimos y si que me reí.

Alexei dejó de ser el tipo de la guardia y se convirtió en una especie de amigo para mi, es increíble estar con él y sabe cuando respetar mis decisiones y cuando puede refutarlas o incluso negociar. Me agrada.

Pov. Angelo

Estoy en el despacho de Jonathan, estamos hablando del evento de hoy, normalmente ayudo en los preparativos de este tipo de eventos, pero ahora hay algo que no me agrada. Mientras estoy perdido en mis pensamientos viendo el cielo bajo la mirada para ver a Morgan riendo con Alexei.

Gire la cabeza para mirar a Jonathan y luego volví a Morgan.

--¿Por qué dejaste que él entrenará con ella?-- Jonathan levanta la vista de los papeles y me miró desde su escritorio

--¿Por qué no?-- alzó los hombros-- no es mal chico y bien sabes que todos aquí están por lealtad, no le harán nada-- se levantó y caminó para ver lo que yo miraba-- relájate y deja de tener esa cara

--¿Es acaso que no lo notas?-- pregunte y sonó casi desesperado

--¿Que debería de notar?-- empezó a caminar al bar y yo fui detrás de él

--No es ella-- nos sirvió un poco de whisky a los dos

--¿Como que no es ella?-- le dio un trago a su vaso-- necesitas descansar, se que Mauricio no te agrada pero no le paso nada a Morgan

HíbridaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora