Híbrida

Capítulo 7

¿En donde demonios estoy? No recuerdo haber despertado, este lugar... Qué demonios hago aquí? este lugar se me hace vagamente conocido, pero no sé de dónde exactamente. Es una especie de cuarto, está oscuro, se escuchan susurros, no entiendo que dicen ninguno termina la frase.
"Morgan..."
"Morgan..."
"Ven..."
"Anda o te verá..."
--¿Quién me verá? ¿quien eres? ¿qué es lo que se supone que hago aquí?-- por más que preguntara no contestaban, no entiendo, la voz se me hace conocida, pero no sé de donde, quiero seguir la voz pero no me puedo mover, deseo correr en serio quiero hacerlo, me empiezo a desesperar por no poder moverme, grito, pataleo, no entiendo.

--MORGAN!!-- escucho unos gritos lejanos-- despierta con un demonio!-- empecé a abrir los ojos-- por fin-- suspiro, parecía asustada

--Amonet, ¿que paso?-- pregunte sentandome

--Chica no sé qué demonios te pasó, pero de la nada te pusiste a gritar y patalear, incluso me golpeaste-- dijo inspeccionando que no tuviera nada malo.

--Lo lamento fue una pesadilla supongo-- dijo frunciendo el ceño

--Claro, no importa ya son las  7:30 tenemos que entrenar-- dijo levantándose- iré a mi habitación a cambiarme-- dijo caminando a la puerta, para al final salir, por fin me retire la máscara que milagrosamente no se movió de su lugar, me talle la cara, no entendía nada, jamás me había pasado algo asi.

Deje de pensar en eso solo me causaba dolor de cabeza, entre al baño hice mis necesidades, me lave la cara y me recogí el cabello en una trenza francesa, así pude ver mi marca, ya no tenía las venas negras, lo toque no dolía, eso quiere decir que esta mejor, eso espero, saliendo del baño, me cambie para entrenar, me puse pantalones deportivos y un top deportivo, encima una chamarra igual deportiva, tenis y listo, bueno faltaba mi mascara, para entrenar solo sería una de lo más sencilla, color negra, me la puse y ahora si estaba lista para entrenar, pero antes iría a la enfermería.

Cuando abrí mi puerta me encontré con Angelo y Amonet, esto es extraño. Los dos vienen vestidos de manera deportiva, él de negro completamente y ella usaba negros los pantalones deportivos, traía una blusa rosa y sus guantes estos siempre eran negros y su melena afro libre, como siempre.
--¿Qué es lo que pasa?-- pregunte muy seria y frunciendo el ceño

--Te dije que iríamos a la enfermeria-- dijo Angelo recordandome-- y crei correcto invitar a Amonet, así las dos ven a sus hermanos

--¿Vamos?-- preguntó Amonet, yo solo asentí cerrando la puerta detrás de mí, los tres empezamos a caminar sin decir ninguna palabra, bueno eso solo duro unos segundos.

--Hoy entrenamos de manera diferente-- volteo a verlo esperando a que siga hablando pero no lo hace

--¿A qué te refieres?-- pregunté, no sé por qué Amonet no decía nada

--Pues es obvio, lo harán ustedes dos, veremos que tal estan peleando-- dijo muy tranquilo

--¿Estas de broma?-- volteo a ver a Amonet-- sin ofender-- le dije

--No veo porque-- dijo muy tranquila, fruncí el ceño

--¿Por qué lo tomas con tanta calma?

--Ella ya sabia esto-- dijo Angelo viendome.

--Explicate-- pedí a Angelo pero ella contestó

--Hace como 4 años, yo estaba en la cocina de noche, tenía sed así que baje por un poco de sangre, cuando iba saliendo me tope con él, no traía guantes así que cuando lo toque del brazo pude verlo, tú y yo peleando, pero la pelea no iba para nada favorable al menos no para mi, por lo tanto le pedí a Indiana un entrenamiento un poco más... agresivo-- dijo muy tranquila mientras caminábamos, ya estabamos practicamente enfrente de las puertas de la enfermería, ya no dijimos nada, yo solo espero que Amonet si de buena pelea.