The greatest | A Lando Norris F1 fanfiction

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Capitulo 22: "Idiota"

Jenna sonrió débilmente, agradecida por su amabilidad.

—Solo necesitaba un poco de aire. Gracias por venir a buscarme, George.

—De nada, Jenna. Cualquier cosa que necesites, sabés dónde encontrarme.

Jenna le agradeció nuevamente antes de dirigirse al hotel. Cuando llegó, estaba agotada y solo quería dormir. Se preparó rápidamente, apagó las luces y se metió en la cama, esperando dejar atrás la frustración del día. Pero justo cuando estaba por cerrar los ojos, escuchó un golpe en la puerta.

—¿En serio? —murmuró, levantándose a regañadientes.

Abrió la puerta, pero no había nadie. Miró hacia abajo y vio un pequeño papel en el suelo. Lo recogió y lo leyó, pero no entendió nada. Estaba en francés.

—Charles... —susurró, reconociendo su letra.

Decidida, se dirigió al pasillo y tocó la puerta de la habitación de Leclerc. Charles abrió con una sonrisa.

—Sabía que eras vos —dijo Jenna, alzando el papel—. No sé qué dice, pero supuse que eras vos.

Charles se rió, haciendo un gesto para que pasara.

—Es solo una tontería para animarte, Jenna. Lo siento, no pensé que te lo tomarías tan en serio.

—Está bien, no pasa nada. —Jenna entró y se dejó caer en una silla—. Es que... ha sido un día largo.

Charles la miró con curiosidad.

—¿Quieres hablar de eso?

Jenna suspiró, sintiéndose repentinamente más relajada.

—Lando me convenció de hacer una carrera ilegal... fue una locura. Al principio pensé que sería divertido, pero ahora... la penalización, la multa... y encima él solo tiene que pagar la multa. Es tan injusto.

Charles la escuchó atentamente, sin interrumpirla. Cuando Jenna terminó, esperó un momento antes de hablar.

—Mirá, Jenna, cometiste un error, sí. Pero todos lo hacemos en algún momento. No te juzgo. Si querés, podés quedarte acá esta noche. Hacemos una mini pijamada, ¿qué te parece? Te prometo que te vas a sentir mejor.

Jenna lo miró sorprendida, pero luego asintió.

—Me parece una buena idea.

Pasaron la noche charlando, compartiendo historias y riéndose de tonterías. Jenna sintió cómo poco a poco su ansiedad se desvanecía, reemplazada por la calidez de la amistad de Charles. Al final de la noche, se sintió mucho más preparada para enfrentar la clasificación del día siguiente.

—Gracias, Charles —dijo finalmente, con una sonrisa sincera.

—Para eso estamos, Jenna. Ahora, a dormir. Mañana va a ser un gran día.

Jenna se acomodó en el sofá de la habitación, sintiendo que, después de todo, no todo estaba tan mal.

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La clasificación en el Gran Premio de Japón comenzó con una atmósfera cargada de tensión. Las nubes grises se cernían sobre el circuito de Suzuka, y aunque no llovía todavía, todos sabían que el clima podía cambiar en cualquier momento. Jenna Verstappen estaba más decidida que nunca a aprovechar cada oportunidad. La penalización de 10 puestos la obligaba a dar el máximo, y cada milésima de segundo contaba.

La Q1 y la Q2 pasaron sin mayores sobresaltos para Jenna. Su Ferrari se sentía bien, y aunque la lluvia ligera que comenzó en la Q2 complicaba las cosas, ella se mantenía firme, avanzando a la Q3 con tiempos sólidos. Sabía que su única opción era calificar lo más alto posible, incluso si luego caía en la parrilla. Cuando llegó la Q3, el asfalto estaba cada vez más resbaladizo, y las nubes oscuras prometían más lluvia.