Capítulo 14

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Arregló sus ropas y cabello como pudo. Colombia tenía razón, no podía permitir que el pasado lo detuviera de vivir el presente. Ya no era ese país, ni tenía la intención de volver a serlo. Era momento de que dejara las dudas a un lado y se atreviera a vivir aquel sentimiento que creyó haber perdido años atrás. Al levantar la mirada, decidido a partir en búsqueda del ruso, un gran país que destacaba entre el resto por su altura captó su atención e inundó su mente, sin dejarle espacio a las preocupaciones.

— ¡Rusio! —saludó alzando una mano para llamar su atención.

— Chile —dirigió de inmediato la vista hacia la voz conocida.

Como si el alma le hubiera vuelto al cuerpo, un brillo reconfortó su preocupado semblante y se acercó rápida y felizmente hacia él. No pudo evitar rodearlo con sus brazos en un cálido y apretujado abrazo. Se tomó su tiempo para sentir su aroma, oír su voz, lo había extrañado con cada fibra de su ser.

— Ты в порядке? У тебя были проблемы с тем, чтобы добраться туда? (¿Estás bien? ¿Tuviste problemas para llegar?)  —lo apartó aún sosteniéndolo por los hombros—. Это поздно. Я тебе звонил. Честно говоря, я уже начал задаваться вопросом, приедешь ты или нет (Es algo tarde. Te estuve llamando. Honestamente ya me empezaba a cuestionar si llegabas o no) —admitió con una risa nerviosa.

— Sé que tengo fama de llegar atrasado a todos lados, pero esta vez te juro que si iba a llegar temprano —apenas si había podido dormir la noche anterior por miedo a quedarse dormido—. Por cagones no quisimos pagar un taxi y nos perdimos camino acá. Encima a esta cagá la batería no le dura nada —alegó refiriéndose a su celular.

— Я рад, что это было именно так (Me alegro de que solo haya sido eso) —admitió más calmado.

Unos meseros que rondaban el lugar se acercaron con una bandeja de variados cócteles. Rusia tomó dos copas de espumante y agradeció.

— Ты хорошо выглядишь черным (Te queda bien el negro) —comentó acercando la bebida.

— Gracias, tú hasta con un saco de papas te veí pintoso —inmediatamente sintió el calor subiendo por sus mejillas—. Olvida eso —evadió sus ojos y recibió el trago.

— Я ценю комплимент (Agradezco el cumplido) —extendió su copa—. Сегодня вечером (Por esta noche).

— Salud —chocó levemente los cristales entre sí y bebió un sorbo—. Ohh, que está rica —repitió la acción.

— Неплохо, хотя я предпочитаю вина, которые вы экспортируете  (No está mal, aunque prefiero los vinos que exportas) —le ofreció una mirada cómplice a la par que jugaba con su vaso.

— Me caías mejor cuando era yo el que te ponía nervioso —golpeó levemente su hombro.

El eslavo se limitó a reír y tomó su mano libre.

— Tengo algo para ti.

Tras hacer una seña se acercó uno de los asistentes del lugar con una bolsa blanca de papel con pequeñas decoraciones minimalistas en dorado y se la entregó.

— ¿Lo puedo abrir? —preguntó intentando ver el interior.

— Конечно, это твое (Por supuesto, es tuyo).

— ¡Ohh! ¡Me encanta este! —tomó una barra de chocolate—. ¿Cómo lo supiste?

— Я хорошо сделал домашнее задание (Hice bien mi tarea) —se encogió de hombros.

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⏰ Última actualización: Nov 07 ⏰

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