Jungkook caminaba lentamente por el campus de la universidad, su mente aún revuelta con los pensamientos que lo habían atormentado durante todo el día. La brisa fresca de la tarde acariciaba su rostro mientras sus pies lo guiaban hacia el lugar de siempre, el pequeño parque escondido detrás del edificio principal. Era un sitio tranquilo, apartado del bullicio de los estudiantes y perfecto para conversaciones privadas. Las hojas de los árboles susurraban suavemente al compás del viento, creando una melodía relajante que contrastaba con el caos en su interior.
Mientras se acercaba al lugar, vio a Taehyung y Namjoon ya sentados en una de las bancas de madera, bajo la sombra de un gran roble. Tae sostenía una botella de agua y hablaba animadamente con Namjoon, quien asentía con una pequeña sonrisa en los labios. Cuando lo vieron, ambos se detuvieron y levantaron la mano para saludarlo. Jungkook intentó devolverles la sonrisa, pero solo logró esbozar una mueca tensa.
-Hyung, por aquí -llamó Taehyung con su habitual entusiasmo, pero su expresión reflejaba una preocupación sincera. A pesar de su carácter juguetón, Tae siempre podía percibir cuando algo no estaba bien con sus amigos.
Jungkook se sentó frente a ellos, dejando escapar un suspiro largo. No sabía por dónde empezar. Era extraño para él estar así de vulnerable, incluso con sus amigos más cercanos. Siempre había sido el fuerte, el que no dejaba que nada lo afectara, pero ahora... ahora todo era diferente.
Namjoon fue el primero en hablar, su voz calmada y suave como siempre. -Jungkook, no tienes que apresurarte. Tómate tu tiempo. Estamos aquí para escucharte.
Jungkook asintió lentamente, agradecido por la paciencia de sus amigos. Bajó la mirada, sus manos jugueteando nerviosamente con el borde de su chaqueta. -Es... complicado -comenzó, su voz apenas un murmullo. -No sé ni por dónde empezar.
-Entonces empieza por el principio, hyung -sugirió Taehyung, su tono más suave de lo habitual. -¿Qué es lo que te tiene así de confundido?
Jungkook respiró hondo, dejando que el aire llenara sus pulmones antes de soltarlo lentamente. -Todo esto empezó... creo que después del incidente en el bar con Jimin. Desde ese día, algo cambió en mí. Me he estado cuestionando muchas cosas, especialmente cómo lo he tratado a él y a sus amigos. Antes de eso, yo... era un idiota con ellos. Yoongi me lo recordó hoy. Le dije cosas horribles... incluso lo llamé "omeguita con complejo de alfa". -Su voz se quebró un poco al recordar sus propias palabras. -Fui tan grosero. Nunca pensé en cómo eso podría afectarlos.
Namjoon lo miró con una mezcla de comprensión y leve reprensión. -Sí, eso fue bastante insensible, Jungkook. Pero lo importante es que te estás dando cuenta ahora. Eso es lo que cuenta.
El alfa asintió, su mirada todavía fija en el suelo. -Lo sé, hyung. Pero eso no es todo. También hay algo más... algo con Jimin. No sé cómo explicarlo, pero cuando estoy cerca de él, siento algo diferente. Mi lobo... reacciona a él de una forma que no había sentido antes. Me siento fuera de control, como si no pudiera pensar con claridad cuando él está cerca. Y es extraño, porque antes no era así. Siempre peleábamos, siempre competíamos por ser el mejor en todo, especialmente en baile. Pero ahora... ahora es como si algo hubiera cambiado.
Taehyung intercambió una mirada con Namjoon antes de hablar. -¿Y crees que estos sentimientos que estás teniendo por Jimin son nuevos, o es algo que siempre estuvo ahí y recién te estás dando cuenta?
Jungkook se quedó en silencio por un momento, reflexionando sobre la pregunta. -No lo sé. Siempre pensé que no me agradaba. Su forma de bailar es tan diferente a la mía. Yo soy más técnico, más preciso... él es más apasionado, más elegante. Al principio, pensé que eso era lo que me molestaba de él, pero... últimamente, cuando lo veo bailar, siento... admiración. Pero también me confunde, porque no sé si siempre fue así o si es algo nuevo.
Namjoon sonrió con suavidad, comprendiendo la lucha interna de su amigo. -A veces, los sentimientos que pensamos que son negativos pueden ser simplemente mal interpretados. Puede que siempre hayas sentido algo por él, pero no lo reconociste porque estabas demasiado centrado en competir con él. Tal vez siempre admiraste su forma de bailar, pero te negaste a aceptarlo porque te hacía sentir vulnerable.
Jungkook asintió lentamente, procesando las palabras de Namjoon. -Quizás... nunca lo pensé de esa manera. -Luego suspiró. -Pero si es así, ¿qué hago? No quiero seguir lastimándolo. Creo que... creo que debería disculparme. No solo con Jimin, sino con todos ellos, especialmente con Yoongi.
Taehyung asintió con entusiasmo. -Sí, eso sería un buen comienzo, hyung. Y sobre todo, trata de ser honesto contigo mismo sobre lo que sientes. Si realmente hay algo más entre tú y Jimin, necesitas descubrir qué es antes de hacer cualquier movimiento.
-Y también -añadió Namjoon-, asegúrate de que tus sentimientos sean claros y sinceros. No juegues con los sentimientos de Jimin ni con los tuyos. Si necesitas tiempo para aclararte, tómatelo.
Jungkook asintió, sintiendo una ligera sensación de alivio por primera vez en mucho tiempo. -Gracias, chicos. No sé qué haría sin ustedes.
Hubo una breve pausa antes de que Taehyung, siempre el más animado del grupo, rompiera el silencio con una confesión inesperada. -Bueno, ya que estamos siendo sinceros... -empezó, frotándose la nuca nerviosamente. -Creo que me gusta Yoongi.
Namjoon y Jungkook lo miraron sorprendidos, pero rápidamente sus rostros se iluminaron con sonrisas cómplices.
-¿En serio? -preguntó Namjoon, claramente sorprendido pero también divertido. -Eso es inesperado, Tae.
Jungkook rió por primera vez en todo el día, una risa genuina que alivió algo de la tensión en su pecho. -Vaya, eso sí que no me lo esperaba. Pero... bueno, Yoongi tiene un carácter fuerte. Será difícil acercarse a él.
Taehyung sonrió, aliviado de que sus amigos no lo estuvieran juzgando. -Lo sé, pero... no sé, es algo en él que me atrae. Aunque todavía no tengo idea de cómo hablarle sin ponerme nervioso.
Namjoon le dio una palmada en la espalda. -Bueno, estamos todos en el mismo barco entonces. Apoyémonos mutuamente y veamos a dónde nos lleva esto.
La conversación se volvió más ligera, las risas comenzaron a fluir más fácilmente. Jungkook sentía que, aunque sus problemas no estaban completamente resueltos, al menos no estaba solo. Sus amigos lo entendían, y eso era suficiente por ahora.
El sol comenzó a ocultarse detrás de los edificios del campus, bañando el parque con un suave resplandor dorado. Los tres amigos se quedaron un rato más, hablando de todo y nada, disfrutando de la compañía mutua y de la sensación de alivio que viene con ser comprendido.
Jungkook sonrió mientras observaba a sus amigos. Sabía que el camino por delante no sería fácil, pero por primera vez en mucho tiempo, sentía que podría encontrar su camino. Todo empezaba a encajar, y con sus amigos a su lado, sabía que lo lograría.
-Gracias, chicos. De verdad -dijo, su voz llena de sinceridad.
Namjoon le dio una palmadita en el hombro. -Siempre estamos aquí para ti, Jungkook. No tienes que enfrentarlo todo solo.
Taehyung asintió, sonriendo. - Para eso estamos los amigos.
Con eso, el sol se puso completamente, dejando a los tres amigos envueltos en la tranquila serenidad de la noche que comenzaba. Jungkook supo que, aunque el camino por delante no sería fácil, no tendría que recorrerlo solo. Y eso, en ese momento, era más que suficiente.
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Cuando el Sol y la Luna Danzan - Kookmin
FanfictionEn la academia de danza de la Universidad de Seúl, Jeon Jungkook y Park Jimin son los dos bailarines más destacados, pero con estilos y personalidades opuestas. Jungkook, un alfa dominante, es conocido por su técnica impecable, mientras que Jimin, u...