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Pedri y Maika estuvieron más de dos semanas sin hablarse

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Pedri y Maika estuvieron más de dos semanas sin hablarse.

¿Podemos hablar?--dijo Pedri.

Que.--dijo ella en el trabajo de su madre.

Me lo contaste en el avión, y ellos lo oyeron.--

¿Es enserio?--dijo, llevándose las manos a la boca.

Si, te lo juro Maika.--

Lo siento muchísimo, me siento fatal.--dijo esta, llenándose de lágrimas.

No pasa nada, ¿Vale?--

Pedri abrazo a su novia, mientras que esta le abrazaba más.

Vamos a ver, centrados en lo vuestro.--dijo Noa mientras Maika le miraba mal.

¿Lo sabe?--dijo Pedri.

Sospecha.--

¿Y que harás con Gavi y ferrán?--dijo.

No se, no pretendo hablarles.--

Cuando ambos terminaron de 'trabajar' se fueron a sus respectivas casas.

¿Estáis saliendo o no?--pregunto Noa, ya muy seriamente.

No mamá, somos mejores amigos y ya.--dijo esta.

Os veo muy juntos, y el beso del otro día, no se Maika...—

¿Y a ti que te influye que seamos algo o no?—dijo esta, yéndose a su habitación de un portazo

Maika y Pedri no atravesaban sus mejores momentos, ya que la diferencia de edad, era bastante notable...

Asómate a la ventana.—dijo Pedri, por teléfono.

Habían castigado a Maika, la actitud sobre su madre no era la correcta.

¿Que haces aquí?—dijo Maika, viendo a Pedri en su ventana.

Ella rápidamente fue, y cerró el cerrojo de la puerta.

¿Estamos bien Maika?—dijo este.

No lo sé...¿si?—

Esta dudó, ya que ella sentía que la primera pelea lo definiría todo.

Maika, si has dudado es por algo.—aclaro Pedri mientras esta se llenaba de lagrimas.

No se que me pasa, yo no quiero ser así.—dijo Maika, mientras este la abrazaba.

No tienes culpa de nada Maika.—

Yo solo quiero ser normal, como tú.—dijo esta, mientras pedri se llenó de pena.

Maika estaba harta de esa forma de ser que tenía, de su forma tan inmadura de pensar y de su pasado relativamente oscuro.

¿Maika?—dijo Gabriela.

Estoy cambiándome, fuera.—dijo esta, mientras Pedri se alarmaba.

Joder, que pesada.—

Maika se secó las lagrimas y abrazó a su novio, con el cual, ya estaba segura de lo que quería ser.

Pedri.—

¿Si?—dijo este, mirándole los ojos.

Te quiero.—

Pedri entendió que ella estaba lista, pero quería que fuera ella quien se lo diría.

Dímelo.—dijo Pedri, dándole la mano.

Quiero ser tu novia.—respondio con una sonrisa, aunque sus lagrimas, reflejaban todo su pasado.

𝙐𝙣 𝐕𝐄𝐑𝐀𝐍𝐎 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐢𝐠𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora