ÉXTASIS (NEGAN) +18

32. it's yours

— No voy a creer en esa jodida historia, Daryl. — me río, aunque su cara está llena de decepción, frustración, y hasta podría decir que tristeza. — ¿O cómo explicas tu desesperación por querer buscar condones constantemente para nosotros follar? ¿Eres imbécil, o piensas en que yo lo soy?

— Es por lo que te estoy diciendo. Más de una jodida vez ideaste el hecho de tener una familia. Si, soy un mentiroso de mierda por haber ocultado algo así, por nunca habértelo dicho desde un principio, pero si no lo hice fue por ese motivo. ¿De qué iba a servirte estar conmigo si jamás iba a poder cumplirte el hecho de ser madre? — no lo soporta mucho más. Él se queda en silencio, bajando su mirada, pasando la manga de su brazo por sus ojos, limpiando las lágrimas traicioneras que ya han rodado por sus mejillas. — Pero felicitaciones. Otro te lo ha hecho en menos tiempo del cual estuvimos juntos.

El mundo se me hace confuso de un segundo hacia el otro.

Su frustración y su tristeza me confirman en que habla con la suma verdad.

Siento que mis piernas se debilitan y de hecho él lo nota, pero me sostengo rápidamente de una de las sillas que rodean la mesa del comedor.

Intenta acercarse pero yo le hago una señal de alto con mi mano para que se detenga y no se acerque a mi.

— No. Ni se te ocurra tocarme. Eres un jodido cabrón. ¿Por qué no lo dijiste nunca, Daryl? ¡Iba a cometer una puta locura! — digo, aludiendo a las píldoras abortivas.

— Eso significa que quién sea ahora el padre si merece aquel embarazo, ¿no? Si se trataba de mi...

— ¿Qué clase de padre ibas a ser tú? Los Salvadores no son mi enemigo, Daryl. Tú eres el mayor. El peor villano en mi historia. A mi padre le contabas todo, absolutamente todo de mi, ¿pero jamás tuviste los cojones de decirle de lo nuestro? ¿No era que te ibas a ir lejos conmigo? No, claro que no. — le digo, riendo con ironía. — ¿Cómo te irías lejos conmigo si ni siquiera éramos nada? Cuando te confesé lo que sentía por ti, te alejaste completamente. Pero luego, cuando ya no tenías a tu coño personal revoloteando y arrastrándose por ti, volviste corriendo. ¿Sabes por qué, Daryl? Simplemente porque eso es lo que necesitas para tener a tu ego bien en la cima. Que alguien vaya detrás tuyo, y la idiota que ganó todos los números de la lotería fui yo. Porque yo fui la única a quien a pesar de que la trataras como un trapo de piso, siempre estuvo contigo. Ni siquiera mi jodido padre lo hizo, y eso que lo idolatras y lo tienes bien en lo alto.

Voy hacia él y con violencia le quito las píldoras abortivas que sostiene en su mano izquierda.

Me giro veloz y camino decidida hacia la puerta de la casa de Carol.

En cuanto abro de ella, esperándome a encontrar a Theo, en realidad a quien me encuentro es a una persona diferente.

Theo está sobre la calle abandonada, siendo sostenido desde su cuello por Aaron, quien le rodea con su brazo.

Quien está en este momento frente a nosotros, el cual congela desde mi sangre hasta mis huesos, dejándome inmóvil, es nada más y nada menos que mi progenitor.

Si su mirada tuviera que describirse en una sola palabra, la definiría con que es asesina.

Porque eso es lo que sus ojos ahora mismo deliberan. Asesinar.

— Hijo de puta.

Me toma del brazo con violencia y hace que yo me haga a un lado para ir directamente hacia Daryl y darle un puñetazo que lo derriba, dejándolo en el suelo.

— ¡Papá! — chillo, sintiendo a mi garganta doler por mi grito. — ¡Para!

Intento ir hacia él pero rápidamente Aaron y el padre Gabriel suben las escaleras del porche e intentan intervenir.