Capitulo 29

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La llegada de Ichika al grupo había traído un cambio palpable en la dinámica del hogar. Cada una de las chicas tenía su propia manera de relacionarse conmigo, y ahora, con la presencia de Ichika, las interacciones se volvían aún más complejas, pero también más divertidas y enriquecedoras.

Un Desayuno Especial

Era sábado por la mañana, y me desperté con el aroma a café recién hecho y el sonido de risas provenientes de la cocina. Al bajar las escaleras, encontré a Ichika, Miku, Nino, Mitsuri y Sinon alrededor de la mesa, preparando lo que parecía ser un desayuno especial.

—¡Buenos días, dormilón! —exclamó Ichika, con una sonrisa juguetona, mientras me pasaba una taza de café.

—Buenos días —respondí, aceptando la taza—. ¿Qué están preparando?

—Un desayuno de campeones —dijo Nino con una pizca de orgullo, mientras volteaba una crepa en la sartén—. Ya que todos estamos juntos, pensamos que sería genial empezar el día con algo especial.

Miku, que estaba cortando fruta, me miró con una sonrisa tímida.

—Espero que te guste. Intentamos hacer algo que todos disfrutarán.

Mitsuri, siempre animada, se acercó y me dio un suave abrazo de buenos días.

—¡Es un desayuno hecho con amor! —dijo alegremente, y su entusiasmo era contagioso.

Incluso Sinon, que generalmente era más reservada, sonreía mientras ayudaba a Ichika con la mesa.

La calidez y la unión que sentía en ese momento eran indescriptibles. Cada una de las chicas había encontrado su lugar en mi vida, y juntas, habían creado un ambiente que me hacía sentir más en casa de lo que nunca antes había sentido.

Un Día en la Ciudad

Después del desayuno, decidimos salir a dar un paseo por la ciudad. Ichika, con su sentido innato de la diversión, sugirió que visitáramos un mercado local que se había convertido en un punto turístico popular por sus artesanías y comida callejera.

Mientras caminábamos por el bullicioso mercado, cada una de las chicas encontró algo que le llamó la atención. Miku se perdió en una tienda de libros antiguos, mientras que Nino se dedicó a explorar una tienda de especias exóticas. Mitsuri, como siempre, estaba emocionada por todo lo que veía, y Sinon observaba con una curiosidad tranquila pero evidente.

Ichika, por su parte, se acercó a mí mientras las demás se dispersaban por el mercado.

—Este lugar es increíble, ¿verdad? —dijo, tomando mi mano sin previo aviso—. Me encanta cómo podemos disfrutar de estas pequeñas cosas juntos.

Le sonreí, sintiendo una conexión especial en ese momento.

—Sí, es genial poder compartir esto con ustedes. —Respondí, apretando suavemente su mano.

Ichika me miró con esa mezcla de travesura y ternura que la caracterizaba.

—Sabes, T/N, cuando decidí unirme a ustedes, no estaba segura de cómo encajaría en todo esto. Pero ahora, siento que estoy exactamente donde debo estar.

Sus palabras me conmovieron más de lo que había anticipado, y mientras caminábamos por el mercado, sentí que nuestra relación había dado un paso importante hacia una conexión más profunda.

La Tarde en el Parque

Después de explorar el mercado, terminamos el día en un parque cercano. Nos sentamos todos juntos en una amplia manta, disfrutando de la suave brisa de la tarde y de la compañía mutua. Mitsuri y Miku se habían unido para hacer una corona de flores para cada una de nosotras, mientras que Sinon y Nino conversaban sobre sus intereses compartidos en la tecnología.

Ichika, mientras tanto, se inclinó hacia mí y susurró:

—Oye, T/N, he estado pensando... con todas estas chicas increíbles alrededor, ¿cómo haces para no volverte loco?

Reí ante su comentario, pero luego respondí con sinceridad.

—Es un desafío, sin duda, pero también es lo más gratificante que he experimentado. Cada una de ustedes aporta algo único y especial a mi vida. No sé qué haría sin todas ustedes.

Ichika sonrió, pero esta vez, su sonrisa era más suave, más genuina.

—Bueno, me alegra ser parte de esto. Realmente lo disfruto, ¿sabes? Estar con todas ustedes me ha hecho darme cuenta de lo afortunado que soy.

Ichika, siempre tan perspicaz, captó la profundidad de mis palabras y se acercó para besarme en la mejilla.

—Nosotros también somos afortunadas de tenerte, T/N. No lo olvides.

Una Nueva Etapa

Con el paso de los días, la relación entre todos continuó creciendo. Ichika se convirtió en un pilar de nuestro grupo, alguien que, con su carisma y calidez, lograba mantener unida a la familia que habíamos formado. Las demás chicas, cada una a su manera, también encontraron un equilibrio en nuestra dinámica, y la amistad entre ellas floreció de formas que jamás habría imaginado.

Miku y Nino, siendo hermanas, ya tenían una relación fuerte, pero ahora, con Mitsuri y Sinon, se sentían más unidas que nunca. Compartían confidencias, consejos y, lo más importante, un profundo respeto y afecto mutuos.

Cada día con ellas era una aventura, y cada nueva incorporación solo hacía que nuestro lazo se fortaleciera aún más. Pero con la llegada de Ichika, una nueva capa de emoción y desafío se había agregado a la mezcla, y estaba claro que nuestra historia apenas comenzaba.

Continuará…

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