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Solo pasa un segundo desde que me siento en la cama hasta que escucho el alboroto y los gritos.

Me pongo de pie y me apresuro a mirar por la ventana y lo que veo es tan aterrador que me tengo que sostener de la pared para no caer de la impresión: Taehyung y Jungkook están peleando a golpes.

Solo tengo que procesar eso para reaccionar y correr escaleras abajo, en el camino me encuentro con Sunhee y Chae, que parecen confundidas hasta que abro la puerta.

Están rodando sobre la arena, cada cierto tiempo una está encima del otro dándose golpes en el rostro, Subin solo está gritándoles que se detengan y sé que si yo hiciera lo mismo no haría ninguna diferencia.

Trato de ignorar la parte de mi que quiere volver adentro y simplemente dejar que se maten a golpes mientras miro al rededor, cuando veo algo que podría funcionar no dudo en correr y abrir la llave del agua, antes de tomar la manguera, cambio la presión del chorro y luego la dirijo hacia ellos, sin poder evitar mojar a Subin y su perfecto cabello en el proceso.

Casi tan pronto como el agua cae sobre sus cuerpos se detienen.

Jungkook suelta a Taehyung antes de mirarme y admito que la manera en la que parece reaccionar y avergonzarse me hace sentir un poco de satisfacción. Aún así no quito el chorro de agua hasta que no están lejos el uno del otro, luego tiro la manguera al suelo antes de ir a cerrar la llave, los miro a ambos y me aseguro de que mi voz sea firme cuando hablo.

-Debería avergonzarles el comportarse de esa manera en una casa que no es la suya, se supone que son personas civilizadas, sin embargo siguen actuando como orangutanes solo por una chica.

Me aseguro de decir lo último mientras miro a Subin, y me siento muy bien cuando veo como se le pone el rostro rojo, ya sea por la rabia o la vergüenza, la verdad es que el rojo es un color que no le favorece para nada.

Doy la media vuelta dándole una mirada de disculpa a Sunhee que parece más sorprendida que molesta antes de volver a la habitación, ignoro las pisadas detrás de mi.

-Ara... -Dice Jungkook detrás de mi-

-Cállate, no quiero escucharte en este momento.

A pesar de que estoy siendo grosera ni siquiera se queja cuando empujo la puerta con la intención de cerrarla sin importarme que esté detrás de mi.

-No te enojes conmigo -Dice cerrando la puerta detrás de el, frunzo el ceño y lo fulmino con la mirada- Está bien, enójate conmigo, pero no me ignores.

Tomo una respiración profunda, debo manejar esto con dignidad y cuidado, me gusta pensar que soy una persona pacífica.

-Ni siquiera entiendo como puedes ser tan idiota -Dije indignada- ¿Por que demonios te pelearías con Taehyung? ¿Dijo algo de Subin que te molestó?

Jungkook bufa como si mis palabras fueran ridículas, lo cierto es que lo eran, ya que quería fingir que no había escuchado nada de repente estaba actuando como si nunca hubiera habido ningún tipo de tensión entre nosotros dos, como si el nunca me hubiera dicho que no le gustaba Subin.

-No pensé que fueras un tipo de reacciones violentas Jungkook y creo que he descubierto la única cosa que podría decepcionarme de ti -Frunció el ceño y negó con la cabeza-

-No soy alguien violento, esto es un cosa de una sola vez, lo juro -Suspire viendo la sangre en su labio y ceja y el moretón en su pómulo-

Me dirijo al baño, porque sé que vi un botiquín cuando estaba husmeando en los cajones más temprano, cuando lo encuentro vuelvo a la habitación y lo encuentro sentado en la cama mirando hacia la puerta del baño.

ExtraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora