Epílogo

3.2K 594 54
                                    

Jimin

Los jardines en verano siempre se veían resplandecientes, quizás por la cantidad de agua que recibían el césped y las plantas que lo adornaban.

O por los dos niños que corrían de un lado a otro con pistolas de agua recargadas, rociándose y jugando como si fuera su época favorita, a pesar del calor que hacia.

Jungsoo y Haneul.

Nuestros hijos.

La historia del como me entere que Haneul venia en camino es un poco graciosa, en esas épocas navideñas donde la comida abunda y la familia se reúne para compartir, yo no podía dejar de vomitar y sentirme asqueado por los fuertes olores que habían en todo el lugar.

Muy lejos de creer que era demasiado pronto, pues nuestro niño a penas cumplía dos años. Jungkook me apoyo en absolutamente todo, brindándome el cariño y la protección que tanto desee.

No estuve solo, no fue un embarazo riesgoso, no tuve miedo. Todo fue perfecto.

– ¡¿Quién quiere limonada?! - Mis dos angelitos dejan sus pistolas olvidadas para correr hacia mi y tomar sus diferentes vasos de colores llenos de una limonada fresca.

Incluso si los años han pasado, hay quienes siguen teniendo repudio hacia nosotros, afortunadamente el nuevo presidente consolidó la ley de protección a Donceles y estableció ciertas reglas que debían ser cumplidas al pie de la letra, estábamos viviendo en una sociedad tranquila donde por derecho merecíamos lo mismo que cualquier otro ser humano.

– Creo que si necesitare la ayuda de un mecánico.- Ruedo los ojos cuando la voz de mi amor llena mis canales auditivos y volteo hacia el con la bandeja en mano. - ¿Para mi?

– Te dije que necesitabas un Mecánico.

Aunque para ser sinceros, verlo en short y camiseta, completamente sucio de aceite es bastante excitante.

¿Hace demasiado calor?

– No me mires así, eres un pervertido.- Sonrio y el toma el vaso restante de la bandeja.- Tae vendrá por los niños en una hora ¿Por que siguen jugando? deberían alistarse.

– No lo se, estoy cansado.- El asiente y estira su mano para tocar mi pancita de cuatro meses de embarazo.

Ni siquiera hablare de ello, mi marido es jodidamente caliente y nos gustan los bebes, pero este será el último.

– Lo se amor, te juro que no quise molestarte, pero son lo suficientemente grandes para hacerlo por si solos.- Asiento y miro a mis niños reír, realmente soy afortunado, tengo un hombre que me ama, dos niños sanos, uno en camino y una familia que la vida me regalo.

Pero sobre todo, puedo ser yo mismo sin tener miedo.

– Ve a descansar, me encargare de los niños.

– Llama a ese mecánico.- Lo señalo en clara advertencia.

– Lo haré.

– Te amo.

– Y yo a ti, amor mio.- Se inclina y besa mis labios dejándome sumergido en una burbuja dulce, llena de su amor.

Y su amor es fuerte.

Decido hacerle caso, voy a mi habitación a descansar, se que tiene todo bajo control, mis hijos son obedientes y el un hombre paciente, que a parte no tiene estilo para vestir a Haneul, así que seguramente Taehyung entrara hecho furia y la vestirá a su manera.

Si, así es nuestra familia.

Mi mente divaga en los recuerdos de lo que ha sido nuestra vida, como empezamos un noviazgo que parecía común, a vivir en una casa con tres hijos y haber influenciado en una decisión importante de un país entero.

Es que no tiene sentido. En el mundo lo diferente siempre se ha visto de mala manera, recuerdo que durante noches me preguntaba a mi mismo ¿Soy realmente una aberración? ¿Esta mal mi existencia?

Mientras la vida de Jungsoo se desarrollaba en mi vientre, yo seguía teniendo una lucha interna por los prejuicios de una sociedad, me consumí tanto en ellos que afecto en parte la vida de mi hijo.

Entonces finalmente entendí que realmente ¿A quien le importa? los prejuicios, los comentarios mal intencionados e incluso la maldad misma, seguirá existiendo de todos modos, ¿Debemos dejar de ser nosotros mismos por complacer a los demás?

No.

Esta bien ser diferente, si alguien no lo acepta, entonces que se vaya al diablo.

Así debemos vivir.

Ahora toco mi panza, mi pequeño bebé está seguro en mi vientre y yo estoy seguro en el mundo, ¿Hay un mejor final? no lo creo.

– ¡¿Es enserio?! Vestido rojo con medias rosas. ¡Es horrible tu combinación Jungkook!

– ¡Vamos Tae! irán de paseo no a una puta pasarela.

– ¡No digas groserías papá!

Si, mi mundo es el mas seguro, cálido y hermoso que pueda existir.

Así que incluso si mis recuerdos están llenos de momentos tragicos, mi vida ahora recompensa todo el dolor que pase en el pasado, en ese entonces odiaba ser un doncel, pero ahora...

No quisiera ser algo mas, realmente me amo como soy y amo a mi familia.





Doncel [KM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora