Capítulo dos

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Me lavante temprano,gracias al maldito ruido del despertador,tome un baño y me vesti,baje a prepararme un café con tostadas,una vez que terminé deje la taza en el fregadero,tome un cepillo y comensé a cepillar delicadamente mi cabello,cuando acabe me puse mi perfume favorito,de vainilla,mi abuela me había regalado uno para mi cumpleaños número dieciséis y desde entonces es el único que utilizo.
Agarre las llaves del auto,salí de casa,y me encamine nuevamente a Espósito enterprise para comenzar con un nuevo año laboral.

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Guarde mi auto auto en el estacionamiento de la empresa y me dirigí a las grandes puertas de cristal.

-Buenos días señorita Espósito-

-Hola Victorio.¿Como están Mariela?¿y los niños?-

-Todos estamos excelentes,gracias por preguntar señorita Espósito-

-Dime Lali- le Sonreí y seguí caminando.

Victorio era el portero del edificio,estaba cerca de los sesenta años,un poco canoso y con algunas arrugas,sin embargo,mantenia ese brillo natural en sus ojos que lo hacian parecer muchos años mas joven de los que tenia.Era un viejo amigo de mi tia,solía trabajar en la rotiseria que estaba a unas cuadras de la casa de mi abuela,pero la rotiseria cerro sus puertas dejando,así,sin trabajo a muchos empleados,entre ellos,Victorio,cuando Julia se entero le abrió una oportunidad en Espósito enterprise.

Me dirigí hacia el ascensor y marque el numero diesisiete,le tenia pánico a estos elementos,cuando tenia doce me quede atrapada con mi hermana,Ema,y estuvimos mas de cuatro horas encerradas hasta que pudieron repararlo,fue horrible.Tenia que subirme a este ascensor si o si porque,por mas de que este acostumbrada a subir por las escaleras,diecisiete pisos era demasiado.
Una vez que las puertas metálicas se abrieron camine por el estrecho pasillo hasta llegar a la oficina de Julia,toque la puerta con delicadeza y espere hasta escuchar el "pase" que provenía del otro lado del muro.

-Hola Lali,amor,pasa porfavor-Julia iba con un vestido floreado hasta las rodillas,que se ajustaba a su cuerpo esbelto,llevaba unos tacones negros que la hacían lucir mas alta de lo que ya era,y tenia un collar con un dije de diamantes que debía costar una fortuna,era un obsequio que le había dado su segundo marido en su fiesta de compromiso.

-Hola Tía- La salude con un beso en la mejilla.

-Que bueno que llegaste a tiempo,recién empezamos con el trabajo y ya hay cuatro casos de divorsios,dos te los he otorgado a ti y el resto los tiene Matías,espero que sepa manejarlos-

-Hará un buen trabajo,tia,siempre lo ha echo-

Tomamos asiento en el sofá negro en forma de L que tenia en su oficina,Julia tenia un excelente gusto de la decoración,la sala estaba adornada con distintos cuadros de grandes artistas,la mesa junto con la computadora y los papeles de trabajo,a un costado,junto al ventanal de cristal había una mesa con una cafetera,distintos licores, vasos y tazas de todo tipo.A un costado, una gran biblioteca que ocupaba toda la pared,llena con libros e inciclopedias de todo tipo.

Nos servimos unos cafes deliciosos,no tanto como me los preparaba yo o mi mama,pero estaba exquisitos.

-A media mañana realizaremos una reunion,con los abogados de la sección uno,o al menos la mayoría de ellos.

-¿una reunión?¿para que?-

-Estába pensando en incorporar nuevos miembros a Espósito enterprise,hay demasiados casos y somos realmente pocos,incorporar desde abogados nuevos hasta personal de limpieza,también tendríamos que despedir a un par que ya están entrando a la etapa de la vejes,renovar el ambiente,de espíritus jovenes-

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