Lo dejé caer con cuidado y le sonreí.
-Miris: ¡Bienvenido a mi cuchitril, ja, ja! Siente como en casa, ah y no toques los cuadros que están ahí, es posible que aún no estén secas.
El charro recorrió parte de mi departamento con la mirada, procesando aún lo que estaba pasando, por educación se quitó el sombrero y lo sostuvo con ambas manos.
Tranquilamente lo dejé allí y entré al baño para colocarme ropa más cómoda y lavarme la cara, porque aunque me vean bien alegre, el sudor arrastra la tierra a mis ojos y A R D E como no tienen idea. Salí y él seguía inmóvil mirando al piso.
-Miris: Oye...¿'Tas bien?
-Charro Negro: Eso creo.
-Miris: Entonces, ¿Por qué estás como estatua? ¿Así estás todo el tiempo en tu casa o...?
-Charro Negro: Yo, no, yo solo...este...bueno, no recuerdo cuando fue la ultima vez que alguien me invito a pasar a su hogar.
-Miris: Oooh, ya veo... sin eeeembargo, si vamos a ser pareja va ser frecuente que estemos aquí.
Él sonrío tiernamente a la par que separaba sus ojos del suelo.
-Miris: Bueno, a mimir 5 horas. ＜（＾－＾）＞
-Charro Negro: Vas a estar como una momia al despertar.
-Miris: Wey, fui a la prepa y a la universidad, esta desvelada no es nada...¿No te has percatado del nivel de daño cerebral que tengo?, ya siento el cáncer y el Alzheimer desarrollándose, ja, ja.
-Charro Negro: No juegues con eso... ¡Y ya vete a dormir!
Me reí y lo tomé de la mano, llevándolo a... el colchón en el piso al que llamo cama.
-Charro Negro: ¿Por qué está en el piso?
-Miris: Kitty.
-Charro Negro: ¿Kitty?
-Miris: Kittymporta.
-Charro Negro: Grosera -_-
-Miris: Ja, ja, perdón quería hacer esa broma. ¿Qué te genera tanta extrañeza? Soy un adulto independiente.
-Charro Negro: ¿Eh?
-Miris: Los muebles son caros y además ¿Realmente necesito una cama?
Chocó su mano contra el centro de su rostro, mas logre ver por el rabillo del ojo que continuaba sonriendo feliz.
Antes de que pudiera reaccionar lo abrasé y lo hice caer junto a mí al colchón.
-Charro Negro: S-sabes que no necesito dormir ¿verdad?
-Miris: Ajá.
Le besé el cachete y me quedé abrazándolo.
-Charro Negro: Miris...sé que eres consiente de que soy un ser nacido de la oscuridad que le quita el alma a la gente, le quita el cuerpo a algunos para ocuparlo y vive en el inframundo. ¿Segura de que quieres estar en una relación conmigo?
-Miris: Sip.
-Charro Negro: ¿E-en verd-?
-Miris: No mames, ya me salté todas las banderas rojas ¿y hasta ahora me preguntas eso?
Le dediqué un sonrisa con un poco de burla, ya que, desde hace mucho me pasé esas weas por el Arco del Triunfo, de todas maneras, él les arrebata su alma a los codiciosos que por su propia voluntad aceptan hacer un trato con él; mi único problema es lo de Leo y eso, no obstante, estaré siempre para darle un "estate quieto".
-Charro Negro: . . .
-Miris: . . .
El penetrante silencio se termino en el momento en que ambos comenzamos a reír al mismo tiempo.
-Charro Negro y Miris: ¡Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja!
-Charro Negro: Ja, ja...Ay, cómo te amo.
Estiró uno de sus brazos para abrazarme, sin embargo ¡Auch!
-Miris: ¡Ey!
-Charro Negro: ¿Q-qué sucede?
-Miris: No te preocupes, solo tengo una herida, pero no es la gran cosa.
Me dedicó una mirada de preocupación, pero no dijo nada más. Le empecé a hacer piojito, inesperadamente, su cabello era suave; iba a detenerme pronto, pero él sostuvo mi mano.
-Charro Negro: Umm... ¿P-podrías continuar?
