Capítulo 8

97 9 0
                                    

El sonido de pasos resonaba por el pasillo, un eco constante que hacía que mi corazón latiera con fuerza, tan fuerte que podía escuchar su ritmo en mis oídos. Sabía que los Wrellyn habían llegado a buscarnos. Alicia y yo nos miramos, el miedo y la confusión reflejándose en nuestros rostros, atrapadas en esa mirada compartida como si buscáramos una respuesta en el silencio de la otra.

Un grupo de militares Wrellyn entró en la sala, su presencia imponente llenando el espacio. Llevaban uniformes de un material oscuro y brillante, ceñidos a sus cuerpos esculpidos. Uno de ellos, notablemente más alto que los demás, se acercó y, con un gesto suave pero firme, indicó que debíamos levantarnos.

—No tengan miedo —dijo, y aunque no movió los labios, sentí su voz resonando en mi mente. Era como un susurro profundo, que se filtraba en mis pensamientos. No comprendía su idioma, pero su intención era tan clara como el tono de su voz.

Alicia apretó mi mano, y sin más opciones, nos levantamos. Nos condujeron a través de un largo pasillo, donde las luces brillaban intensamente, casi cegadoras, haciendo que me sintiera cada vez más distante de mi libertad, y más cerca de un destino incierto. Sabía que cada paso nos alejaba de todo lo que conocíamos, de la posibilidad de reencontrarnos con nuestras familias.

—¿A dónde nos llevan? —pregunté, mi voz apenas un susurro, mientras intentaba desesperadamente mantener la calma.

—Hacia la Purificación —respondió el Wrellyn, mirándome con ojos que parecían escrutar hasta el último rincón de mi alma. Había en su mirada algo extraño, casi como si comprendiera lo que sentíamos. Me sorprendí al sentir una pizca de alivio, aunque no entendía qué significaba realmente ese destino.

Llegamos a una sala amplia, donde pantallas gigantes estaban alineadas en las paredes, proyectando imágenes de mujeres en cápsulas individuales, rodeadas de luces vibrantes y flora alienígena que nunca antes había visto. Una voz profunda y resonante surgió, como si el mismo espacio nos hablara, y comenzó a explicar el proceso.

—Bienvenidas a la Sala de Purificación. Ustedes son esenciales para nosotros en este momento. El proceso de purificación les permitirá desintoxicarse y conectarse con sus verdaderas energías.

Miré a Alicia, mis ojos llenos de preguntas que solo ella podía entender. Justo cuando iba a decir algo, un segundo Wrellyn se acercó. Su rostro, aunque igual de imponente, tenía una expresión amable que me hizo sentir un poco más tranquila.

—La desintoxicación energética se llevará a cabo en cápsulas individuales —explicó con calma—. Cada una de ustedes será tratada con fluidos energéticos, extraídos de nuestras flores especiales. Es un proceso seguro y profundamente transformador.

Una extraña sensación de inquietud se apoderó de mí. ¿Transformador? No sabía si confiar en ellos, pero había algo en la promesa de purificación que me resultaba tentador. Tal vez, solo tal vez, esto era lo que necesitábamos para sentirnos más fuertes y entender qué significaba realmente estar aquí.

—Después de la desintoxicación —continuó el Wrellyn—, pasarán por baños de luz. Esta luz es curativa y eliminará cualquier energía negativa acumulada. Es un paso crucial para su bienestar.

De repente, una mujer apareció entre los Wrellyn. Su cabello plateado y ojos brillantes destilaban una intensidad tan magnética que me sentí atraída por su sola presencia. Se acercó y nos sonrió, con una amabilidad que casi parecía humana.

—Soy Kalum —dijo, su voz tan suave y melódica que parecía un canto—. Estoy aquí para guiarlas a través del proceso. No se preocupen, estaré con ustedes en cada paso.

—¿Qué es exactamente este proceso? —preguntó Alicia, con el mismo aire de curiosidad y recelo que yo sentía.

—Es una experiencia única —respondió Kalum, mirándonos con una sonrisa serena—. La purificación no solo limpiará su energía, sino que también las conectará con sus antepasados y con la esencia de los Wrellyn. A través de este proceso, descubrirán quiénes son realmente y su conexión con nosotros.

Las pantallas comenzaron a mostrar imágenes de flores luminosas y luces danzantes. Kalum continuó explicando que las flores utilizadas en el proceso tenían propiedades extraordinarias, capaces no solo de purificar, sino de liberar aromas que atraerían a nuestras almas gemelas Wrellyn.

La idea de la purificación como un medio para descubrir una conexión profunda con los Wrellyn me provocaba sentimientos encontrados. Era intrigante, y a la vez aterrador. Kalum, al parecer, notó mi vacilación.

—Confía en el proceso, Agatha. Están aquí para algo mucho más grande. —Dijo, y en sus ojos había una promesa de consuelo.

Finalmente, nos llevaron a la sala de purificación. Las cápsulas individuales se alineaban en el centro, rodeadas de luces suaves que parecían respirar. Kalum me guió hacia una de las cápsulas, y mientras me explicaba, noté un brillo de emoción en su mirada.

—Al entrar, sentirán una conexión con las flores. Esta conexión les permitirá liberar cualquier carga emocional. Y después, pasaremos a los baños de luz. Será una experiencia mágica.

Entramos en nuestras cápsulas, y sentí el líquido tibio rodeándome, mientras una vibración sutil comenzaba a resonar dentro de mí. Los aromas de las flores me envolvieron, llenando el aire de calma y paz. Cerré los ojos y me dejé llevar.

De repente, la luz me envolvió, y visiones comenzaron a fluir a través de mi mente. Vi mujeres que habían vivido antes que yo, mujeres que amaron y lucharon. Sus rostros parecían tan familiares, y un extraño sentido de pertenencia me invadió.

—Estás viendo a tus antepasadas —susurró Kalum, su voz resonando en mi mente—. Ellas también fueron parte de nuestra historia.

Las visiones se volvieron más intensas. Vi cómo las mujeres habían estado conectadas a los Wrellyn, guardianas de un poder antiguo que les había sido arrebatado. Con cada imagen, sentía que una parte de mí despertaba, como si esos recuerdos hubieran estado aguardando este momento.

Cuando la luz comenzó a desvanecerse, salí de la cápsula, sintiéndome ligera y renovada. Kalum me esperaba, con una expresión de satisfacción en el rostro.

—Has hecho un gran progreso, Agatha. Ahora es el momento de pasar a los baños de luz.

Me condujo a una nueva sala, donde las luces parecían danzar en el aire. Kalum me explicó que el baño de luz purificaría aún más mi energía y profundizaría mi conexión con los Wrellyn.

Las luces me envolvieron, y sentí que cada parte de mí se iluminaba. Fue abrumador y hermoso, y mientras el resplandor me rodeaba, escuché murmullos, ecos de recuerdos olvidados. Las voces de mis antepasados resonaban, como si siempre hubieran estado ahí, esperando ser escuchadas.

De repente, las luces formaron una cascada brillante. Kalum tomó mi mano, y juntas nos sumergimos en esta corriente de energía purificadora. Sentí una ola de liberación, como si cada gota estuviera limpiando no solo mi cuerpo, sino mi alma.

—Este es solo el inicio, Agatha —dijo Kalum mientras la energía nos rodeaba—. Son parte de algo grande, y la historia apenas comienza a revelar su verdadera magnitud. Su conexión con los Wrellyn trasciende el tiempo y el espacio.

Mientras el agua continuaba fluyendo, supe que la purificación no era solo física; era un renacimiento espiritual. Todo comenzaba a tener sentido, y entendí que el lazo con los Wrellyn era más que un simple vínculo. Era un hilo que unía nuestras almas a través del tiempo.


-----------------------------

¿Qué piensan de la historia? Las leo <3

Apolo ArsenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora