Antes de tomar camino al pantano pasamos a la cabaña por municiones. Tomé la ballesta que se había convertido en mi arma favorita y nos pusimos en marcha. Al llegar al pantano comenzamos a seguir a Doom aún con desconfianza. Quería creerle. Deseaba creerle pero era difícil hacerlo. Mientras caminábamos sentía las miradas curiosas de Doom y fingía no darme cuenta pero era inevitable sonrojar me al sentir sus ojos en mi. Se estaba volviendo un poco incomodo para mi.
-¿hacia donde?. - pregunté para romper la incomodidad que sentía mientras me detenía a la orilla de un lago poco atractivo.
- tenemos que cruzar. - dijo señalando el lago. - al llegar a la otra orilla tendremos que caminar un par de metros más.
- ¿que no hay cocodrilos o algo así?. - pregunte mirando con horror.
- no te preocupes. - dijo entre risas. - a los cocodrilos no les gustan las personas testaruda. - dijo en broma. Lo mire queriendo arrancarle la cabeza. - tranquila. - dijo levantando las manos. - era una broma. No hay cocodrilos aquí. Y el agua te llegará por lo menos a la cintura.
El agua estaba terriblemente fría pero tenía razón me llegaba a la cintura y no había señales de algun reptil queriendo comerme.
Al llegar a la orilla seguimos avanzando con cuidado. Nos estábamos acercando cada vez más según Doom. Un ruido le hando llamó mi atención y les hice señales a los demás para que se detuvieran. Doom no me hizo caso. siguió avanzando más lento y alerta. Lo seguí. No muy lejos oí un sonido con el que estaba muy familiarizada. Sin pensarlo dos veces me lancé a Doom cayendo sobre su pecho. Una flecha se estampó contra un árbol justo detrás de donde se encontraba Doom.
Jadeando lo mire a los ojos.- gracias. - dijo. Sentí como su brazo apretaba mi cintura y eso me hizo estremecer.
- te dije que te detuvieras. - dije mientras me incorporaba.
- acabas de salvar mi vida. - insistió levantándose.
- te necesito. - dije encogiendome de hombros. Vi un destello en sus ojos. ¿Esperanza?. - te necesitamos. - aclaré. - para llegar al amo oscuro.
Asintió.
- ¿Doom?. - la voz de una mujer nos llamó la atención y oí a mi familia preparar las armas. Me centré en ella, llevaba una gabardina negra y su cabello rubio recogido en una trenza. Sus ojos eran azules como los de doom y llevaba en las manos un arco.
- ¿cris ?.- dijo caminando hacia ella. - creí que habías muerto. - dijo mientras la abrazaba. Sentí una punzada en mi pecho. ¿Y si era su novia?.
- casi.- respondió ella separándose de él. - después de que te llevarán al calabozo salí corriendo. - explicó. - sabía que volverías. Eres muy predecible ¿sabes?
- ¿haz estado vigilando?
- si. - asintió. - e visto à muchos oscuros. Pareciera ser que ese idiota se prepara para algo grande. - sus ojos pasaron entre mi y los demás. - ¿cazadores?
- si. - respondí antes de que Doom lo hiciera. - y tu claramente eres la que disparó la flecha.
- no fui yo. - sonrió. - fue el.-dijo girandose para señalar a un esclavo que se encontraba tirado con una flecha en su corazón y junto a él. un arco.
- ¿nos ayudas?. - preguntó Doom
- ¿crees que me perdería la diversión?. - alzó una ceja. Caramente había algo entre los dos.
Seguimos avanzando hasta llegar a la entrada de una cueva. Había dos antorchas en la entrada iluminando un poco, pero después solo había completa oscuridad. Resople.- ¿una cueva?. - dije con ironía. - porque no me sorprende. - dije avanzando. Pero Doom me detuvo.
- hay dos esclavos vigilando. Siempre los hay.
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HAYLEY: CAZADORA DE DEMONIOS (terminada)
FantasyUna profecía por cumplirse. secretos por revelar. Y un amor prohibido en todos los sentidos. A Hayley se le complica la vida en el momento en que su madre le revela la verdad sobre sus raíces. Heridas del pasado que se abrirán de nuevo. una guerra e...