Capítulo 13

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Antes de tomar camino al pantano pasamos a la cabaña por municiones. Tomé la ballesta que se había convertido en mi arma favorita y nos pusimos en marcha. Al llegar al pantano comenzamos a seguir a Doom aún con desconfianza. Quería creerle. Deseaba creerle pero era difícil hacerlo. Mientras caminábamos sentía las miradas curiosas de Doom y fingía no darme cuenta pero era inevitable sonrojar me al sentir sus ojos en mi. Se estaba volviendo un poco incomodo para mi.

-¿hacia donde?. - pregunté para romper la incomodidad que sentía mientras me detenía a la orilla de un lago poco atractivo.

- tenemos que cruzar. - dijo señalando el lago. - al llegar a la otra orilla tendremos que caminar un par de metros más.

- ¿que no hay cocodrilos o algo así?. - pregunte mirando con horror.

- no te preocupes. - dijo entre risas. - a los cocodrilos no les gustan las personas testaruda. - dijo en broma. Lo mire queriendo arrancarle la cabeza. - tranquila. - dijo levantando las manos. - era una broma. No hay cocodrilos aquí. Y el agua te llegará por lo menos a la cintura.

El agua estaba terriblemente fría pero tenía razón me llegaba a la cintura y no había señales de algun reptil queriendo comerme.
Al llegar a la orilla seguimos avanzando con cuidado. Nos estábamos acercando cada vez más según Doom. Un ruido le hando llamó mi atención y les hice señales a los demás para que se detuvieran. Doom no me hizo caso. siguió avanzando más lento y alerta. Lo seguí. No muy lejos oí un sonido con el que estaba muy familiarizada. Sin pensarlo dos veces me lancé a Doom cayendo sobre su pecho. Una flecha se estampó contra un árbol justo detrás de donde se encontraba Doom.
Jadeando lo mire a los ojos.

- gracias. - dijo. Sentí como su brazo apretaba mi cintura y eso me hizo estremecer.

- te dije que te detuvieras. - dije mientras me incorporaba.

- acabas de salvar mi vida. - insistió levantándose.

- te necesito. - dije encogiendome de hombros. Vi un destello en sus ojos. ¿Esperanza?. - te necesitamos. - aclaré. - para llegar al amo oscuro.

Asintió.

- ¿Doom?. - la voz de una mujer nos llamó la atención y oí a mi familia preparar las armas. Me centré en ella, llevaba una gabardina negra y su cabello rubio recogido en una trenza. Sus ojos eran azules como los de doom y llevaba en las manos un arco.

- ¿cris ?.- dijo caminando hacia ella. - creí que habías muerto. - dijo mientras la abrazaba. Sentí una punzada en mi pecho. ¿Y si era su novia?.

- casi.- respondió ella separándose de él. - después de que te llevarán al calabozo salí corriendo. - explicó. - sabía que volverías. Eres muy predecible ¿sabes?

- ¿haz estado vigilando?

- si. - asintió. - e visto à muchos oscuros. Pareciera ser que ese idiota se prepara para algo grande. - sus ojos pasaron entre mi y los demás. - ¿cazadores?

- si. - respondí antes de que Doom lo hiciera. - y tu claramente eres la que disparó la flecha.

- no fui yo. - sonrió. - fue el.-dijo girandose para señalar a un esclavo que se encontraba tirado con una flecha en su corazón y junto a él. un arco.

- ¿nos ayudas?. - preguntó Doom

- ¿crees que me perdería la diversión?. - alzó una ceja. Caramente había algo entre los dos.
Seguimos avanzando hasta llegar a la entrada de una cueva. Había dos antorchas en la entrada iluminando un poco, pero después solo había completa oscuridad. Resople.

- ¿una cueva?. - dije con ironía. - porque no me sorprende. - dije avanzando. Pero Doom me detuvo.

- hay dos esclavos vigilando. Siempre los hay.

HAYLEY: CAZADORA DE DEMONIOS (terminada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora