💥Sargento Park: Misión BBH💥 [ChanBaek]

Capítulo 28

En la sala de interrogación se encontraba el agente Kim Jongin, esta vez optaron por que fuera él quien llevara a cabo el interrogatorio con la esperanza de qué corriera con mejor suerte que el sargento Oh. 

Pasaron tres días desde el último interrogatorio, le dieron tiempo a los mafiosos en custodia de considerar sus opciones y en este caso la mejor era que hablarán. Nadie los representava,   ni siquiera el abogado de oficio. Se negaron a la ayuda con la estúpida esperanza de que su jefe algún día apareciera, aunque esa idea comenzaba a cansarlos ya que el hombre no aparecía por ningún lado en su ayuda.

– ¿Y bien? – comenzó a hablar el agente Kim, se cruzó de brazos y se recargo en el respaldo de su silla – ¿Seguirán sin decir nada?

Los tipos lo miraron fríamente, desinteresados en el tema.

El agente suspiró cansado, pero aún no con la derrota encima.

– Creí que serían más inteligentes – sonrió ladino y extendió sus brazos sobre la mesa – Pero ya veo que no, son un par de…

– Más cuidado con lo que dirá, agente – gruñó uno de los tipos con molestia – Usted no nos conoce.

– Pero ahora lo estoy haciendo – continuó hablando con esa sonrisa ladina en su rostro – Y no pensé que al ser mafiosos fueran unos tipos tan ingenuos, por no llamarlos de otra forma.

Los hombres se miraron entre sí, nunca nadie los había insultado de tal forma como lo hacía el agente, la rabia se encendió en sus cuerpos, no más burlas.

– Y no lo somos.

– Pues yo veo todo lo contrario – se inclinó, acercándose a la mesa – Su jefe los ha abandonado aquí y ustedes siguen fiel a él – negó con su cabeza – Yo diría que sí son medio imbéciles. 

Uno de los hombres no se inmuto ante las palabras del agente, se mantuvo tranquilo, más el otro apretó sus puños debido al insulto a su persona. Kim se percató de ello y supo que ese era su objetivo. 

– Bien, los interrogaré por separado. 

La puerta de la sala se abrió dejando ver al agente Xiao quien se dirigió al hombre que no reaccionó a las provocaciones de Jongin y lo llevó fuera de la sala.

Una vez el agente se quedó a solas con el hombre, lo observó minuciosamente por unos minutos, el hombre parecía un poco nervioso de estar sólo con el agente, lo que le indicaba a Jongin que estaban cerca de lo que buscaban.

– Ahora estamos solos– anunció el agente lo que era obvio, su mirada la mantuvo fija en el hombre– Puedes hablar con libertad.

El hombre lo miró con un poco de duda pero ahora no tenía muchas opciones más qué  confiar en él agente ¿O no? Pero su jefe no aparecía por ningún lado y era evidente que no lo haría, los dejaría a su suerte en prisión y él seguiría gozando de su libertad, algo que para ese hombre era demasiado injusto.