❀𝔇𝔞𝔯𝔨 𝔒𝔟𝔰𝔢𝔰𝔰𝔦𝔬𝔫❀

47. Revelación Infernal

Había un chico azabache corriendo al rededor de la cancha polideportiva de la universidad.  Hacía aproximadamente dos días que había regresado a la universidad después de qué el señor Min y Jimin lo dejaron en la puerta de su casa.

¿Qué había sentido exactamente al ver el auto partir de ahí sabiendo que su amigo Jimin iba con ese hombre?

Sin duda un sin fin de emociones.  Así que se había encerrado en su habitación por un día y medio. Sus padres no lo notaron ya que casi nunca paraba en casa, la mayor parte del tiempo  estaba con Taehyung ya que ambos pasaban las tardes revisando redes sociales y grupos de chat en busca de Jimin.

El entrenamiento con su equipo de Fútbol había terminado pero él se había quedado dando vueltas y vueltas, llevaba más de media hora dando vueltas alrededor del lugar y simplemente no se rendía.

Necesitaba tener la mente enfocada en algo, necesitaba estar ocupado.

Si no lo hacía, probablemente ya hubiese cometido la locura de ir directamente con los Kim para decirles dónde estaba Jimin. Estuvo bastante cerca de hacerlo.

Pero ¿No había escuchado la historia que le contó su amigo?

Jimin vivió abuso desde pequeño por su casi Vecino el señor Jung Yang Sung. Ellos vivían en el mismo apartado donde los socialités compraban sus condominios y mansiones. Jungkook vivía en otro lugar no tan lujoso pero algo cerca, conoció a Jimin desde la primaria y jamás se dio cuenta de nada extraño a excepción de qué era constantemente llevado a la Casa Jung por la Nana de éste. 

A veces los mismos Kim eran quienes llevaban a Jimin ahí.

Así que ahora la duda, el escepticismo y la furia se adueñaban de su mente cuando se quedaba sin algo que hacer. No quería cometer el mismo error que había cometido cuando salió corriendo a casa del detective Jung para decirle que tenia sospechas de donde estaba Jimin, para informar que Taehyung y él habían encontrado algo importante pero con tan malísima suerte de que quien estaba en la casa ese día había sido el Señor Jung.  Jungkook había cometido el terrible error de decirle por qué motivo había llegado a buscar a su hijo el detective Jung. 

Un motivo muy importante que tampoco quiso reverlarle a Jimin.

No sintió ni vio venir el ataque, todo lo que supo después de que el hombre le pusiera un  trapo mojado con cloroformo en la nariz fue que despertó atado en aquella silla de aquel viejo sótano en la casa abandonada.  Después describiría  los demás acontecimientos como alucinantes y poco creíbles pero en verdad habían pasado. Lo describiría como una revelación infernal.

Jimin estaba bien,  estaba vivo, y al parecer estaba enamorado del señor Min. No es que fuera repulsivo, el señor Min no se veía para nada un viejo decrépito era más bien muy apuesto y se veía joven y distinguido.  Le llevaba como 13 años a Jimin y vio que eso no le importaba a su amigo. Vio esa manera extraña en que le brillaban los ojos a Jimin cuando veía a Min, jamás había visto a nadie de aquella manera y Jungkook no sabía si era amor, obsesión o adoración de Jimin hacia ese hombre y viceversa.

Jimin jamás lo miró a él de aquella manera aunque lo deseara secretamente.

Nunca tuvo una oportunidad con Jimin porque nunca le mencionó lo que sentía y ahora pensaba que quizá jamás le habría correspondido ni aceptado porque para Jimin solo existía la sed de venganza y Min Yoongi.  Era sobre lo que había aprendido en aquel viejo sótano.

Lo demás fue traumante, ver como Min torturaba al viejo Jung ordenado por Jimin,  fue como ver un espantoso show de marionetas, Jungkook pudo observar que Min trabajaba bajo una especie de hipnótico control ejercido nada menos que por su amigo Jimin.