El comienzo de un cambio (Anthony x Penelope?

Capítulo 7: El Juicio de la Reina

La temporada en Londres alcanzaba su apogeo, y la reina Charlotte organizaba uno de los eventos más esperados del año: un baile en su honor. La alta sociedad se preparaba con entusiasmo, sabiendo que cualquier joven dama que captara la atención de la reina podría tener su destino sellado con un matrimonio favorable. Mientras las damas ajustaban sus vestidos y las familias planeaban estrategias, Anthony Bridgerton se encontraba luchando con los propios sentimientos que había mantenido bajo control durante tanto tiempo.

En su residencia, Anthony estaba con su madre y su hermana Daphne, mientras los preparativos para la noche se aceleraban.

—Anthony, deberías estar pensando en quién será tu futura esposa —dijo Daphne, su mirada seria mientras ajustaba los guantes—. Esta noche estarán presentes muchas jóvenes adecuadas. Las madres no harán más que lanzarte sus hijas.

—Daphne tiene razón, querido —añadió Violet, con su mirada aguda—. No puedes posponer esto para siempre. La reina estará observando, y deberías hacer un movimiento antes de que comiencen a preguntarse por qué el vizconde sigue soltero.

Anthony suspiró. Sabía que ambas tenían razón, pero sus pensamientos estaban llenos de un conflicto que no podían entender. Por un lado, sentía el peso del deber, la necesidad de elegir a una esposa adecuada para cumplir con su responsabilidad familiar. Pero, por otro lado, algo dentro de él se resistía a hacer una elección basada únicamente en la conveniencia. Había algo más, una sensación que no podía ignorar. Y esa sensación tenía nombre: Penelope Featherington.

—Haré lo que debo hacer —respondió Anthony finalmente—. Pero no me apresuraré.

Daphne lo miró con una mezcla de curiosidad y preocupación.

—Anthony, has estado actuando de manera extraña últimamente. Espero que no estés dejando que algún tipo de emoción interfiera en lo que sabes que debes hacer.

Anthony evitó su mirada, incómodo. La emoción era precisamente lo que estaba interfiriendo, aunque no estaba listo para admitirlo.

---

En la residencia Featherington, Penelope también se preparaba para el baile, con una mezcla de emoción y nervios. Sabía que la reina Charlotte estaría allí, observando todo con su mirada aguda. Pero lo que realmente ocupaba sus pensamientos no era la reina, sino Anthony. El baile que compartieron recientemente la había dejado desorientada, y aunque no quería admitirlo, había algo en la forma en que Anthony la había mirado que la hacía sentir especial.

Mientras se ajustaba el vestido frente al espejo, Eloise se acercó a ella.

—¿Qué te pasa? Has estado en las nubes desde el último baile —dijo Eloise, sin rodeos—. No me digas que has caído en las garras de las tonterías del amor.

Penelope forzó una sonrisa.

—No es nada, Eloise. Solo... hay mucho en lo que pensar.

Eloise la miró fijamente.

—No te creo ni por un segundo, pero no te preocuparé más. De todos modos, esta noche será otra reunión aburrida de la nobleza. La única parte divertida es ver lo que Lady Whistledown tendrá que decir mañana.

Penelope asintió, pero la mención de Lady Whistledown la hizo sentir una punzada de culpabilidad. Sus escritos habían comenzado a complicarse. Hablar de Anthony, especialmente, la inquietaba, ya que debía mantener la objetividad como cronista de la sociedad, pero no podía evitar sus propios sentimientos. De alguna manera, su pluma estaba comenzando a reflejar sus propios conflictos internos.

---

El salón de baile del palacio estaba adornado de manera deslumbrante. Los invitados llegaban uno a uno, saludando a la reina Charlotte, quien, como siempre, estaba sentada en su trono, observando a la multitud con una mirada afilada. Las familias más influyentes se acercaban para inclinarse ante ella, esperando su aprobación.