Capítulo 13: Ecos del Pasado y el Presente

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La noche siguiente, Londres parecía vibrar con una energía distinta. Las reuniones sociales de la temporada continuaban, y aunque los eventos eran numerosos, todos los ojos estaban puestos en la gran velada que la familia Bridgerton organizaba en su residencia. Invitados de todas las familias influyentes acudían ansiosos, no solo por disfrutar del evento, sino también por ser testigos de los recientes acontecimientos que envolvían a Anthony y Penelope.

Penelope Featherington, por su parte, se preparaba con nerviosismo en la mansión Featherington. Lady Portia había insistido en que Penelope debía lucir impecable, y el vestido de seda verde que llevaba aquella noche había sido seleccionado cuidadosamente para resaltar su figura, pero Penelope apenas se sentía cómoda. Sus pensamientos estaban en Anthony, y en lo que podría suceder esa noche, pues sabía que los rumores continuaban creciendo.

Eloise, fiel a su costumbre, había llegado a la casa de los Featherington para recoger a Penelope y acompañarla. Mientras ambas subían al carruaje, Eloise no tardó en romper el silencio.

—No puedo esperar a ver cómo reacciona todo el mundo esta noche —dijo Eloise, con un brillo de diversión en los ojos—. Los rumores sobre ti y mi hermano han sido lo único de lo que se habla en los últimos días. Debo admitir que me resulta entretenido.

Penelope miró a su amiga con preocupación.

—Para ti puede ser entretenido, Eloise, pero para mí es una presión insoportable. No sé qué hacer ni qué pensar. Anthony y yo... no sé ni siquiera si hay algo real entre nosotros o si todo esto es producto de la imaginación de la sociedad.

Eloise la miró con más seriedad, dejando por un momento de lado su actitud burlona.

—Penelope, siempre he pensado que tienes más coraje del que dejas ver. Si realmente sientes algo por Anthony, o si algo ha cambiado entre ustedes, entonces deberías ser honesta contigo misma. Y si no es así, bueno, entonces la sociedad puede hablar lo que quiera, pero tú seguirás siendo la misma de siempre.

Penelope suspiró, asintiendo lentamente. Eloise tenía razón en cierto modo, pero no era tan fácil. Las dudas sobre sí misma, sobre lo que sentía y lo que el mundo esperaba de ella, la atormentaban. Además, estaba Colin. Cada vez que pensaba que había dejado atrás sus sentimientos por él, algo surgía y la hacía cuestionarse todo de nuevo.

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En la mansión Bridgerton, la velada ya estaba en pleno apogeo. Las luces iluminaban los jardines, y los salones estaban repletos de nobles que conversaban animadamente mientras esperaban la llegada de la anfitriona, Lady Violet, y de sus hijos. Anthony, impecable como siempre, permanecía cerca de su madre, pero su mente estaba en cualquier lugar menos en la conversación que mantenían.

Daphne, que observaba a su hermano desde un rincón, se acercó a él con una sonrisa traviesa.

—Anthony, si sigues mirando hacia la puerta cada vez que se abre, la gente comenzará a sospechar que esperas a alguien en particular.

Anthony la miró con una ceja levantada, claramente irritado.

—Daphne, siempre tan perspicaz. No estoy esperando a nadie en particular. Estoy vigilando que todo esté en orden.

Daphne dejó escapar una pequeña risa.

—Claro, hermano. Y yo soy la reina de Inglaterra. Sé que Penelope vendrá esta noche, y puedo ver en tu rostro que te preocupa su llegada. ¿Qué temes exactamente? ¿Lo que dirá la sociedad o lo que tú mismo estás empezando a sentir?

Anthony apartó la mirada, sin querer admitir la verdad, ni siquiera a sí mismo. Había pasado tanto tiempo luchando contra cualquier emoción que pudiera desviarlo de su deber, que ahora, cuando comenzaba a sentir algo por Penelope, le resultaba difícil enfrentarlo. Sabía que ella no era el tipo de mujer que la sociedad esperaría que él tomara por esposa. Y sin embargo, había algo en su carácter, en su sinceridad y en su fuerza, que lo había atraído sin que se diera cuenta.

El comienzo de un cambio (Anthony x Penelope?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora