En la casa de KORM
Che: (con voz temblorosa) —Sol, necesito hablar con usted.
Sol: —¿"Sol"? No te confundas, basura. Cuando te atrevas a dirigirte a mí, te arrodillas y mantienes la cabeza baja. ¿Lo entiendes? Tú y yo no somos iguales; tú eres un insecto bajo mi bota, un esclavo de KORM, y yo soy tu dueña. Ahora, arrodíllate y besa mi mano. ¡Hazlo!
Che: (bajando la cabeza, tragándose la humillación mientras se arrodilla y besa su mano) —Sí, señora...
Sol: (mirándolo como si fuera una criatura insignificante, una sonrisa cruel curvándose en sus labios) —Ahora, dime qué es eso tan "importante" que no podía esperar, pedazo de escoria.
Che: (con voz temblorosa) —Es cierto que... Dante es su hijo...
Sol: (su expresión se endurece en un gesto de disgusto, sus ojos brillan con odio) —Puede que sí... pero ¿Qué más da? Ese desecho no significa nada para mí. Es basura, igual que tú. Estoy considerando cómo... eliminarlo, lentamente, para que sufra. Y disfrutaré cada segundo.
Che: (su voz se quiebra, la angustia reflejada en sus ojos) —Señora, por favor... Dante podría ser mi hijo. Usted me prometió que si cumplía con todas sus órdenes, me diría dónde había enterrado a nuestro bebé. Ahora que él está vivo, todo cambia. Me dijo que nuestro hijo había fallecido. (su tono se vuelve implorante) Le ruego que me diga la verdad. ¿Dante es realmente mi hijo? (la vulnerabilidad asoma en su mirada, como si toda su existencia dependiera de esa respuesta) Necesito saberlo... por favor...
(De repente, Sol levanta la mano y le da una bofetada a Che con fuerza brutal, el eco del golpe resonando en la habitación como un trueno.)
Sol: (ríe con desprecio, su mirada ardiendo con malicia) —¿Tu hijo? ¿De verdad te crees tan importante? (se ríe con desdén) ¡Jajajaja! No seas ridículo. ¿Tú crees que eso me interesa? Eres un perro, Chen, una distracción insignificante. Me he acostado con tantos esclavos que sería imposible saber de quién es esa basura de Dante. Tal vez sea de tu querido "enemigo", Not. (le susurra al oído, cada palabra impregnada de veneno) ¿Cómo te hace sentir saber que tal vez has estado arrastrándote para proteger al hijo de otro? Eres una broma, un payaso sin gracia en esta historia.
(Che baja la cabeza, con el rostro ardiente por la bofetada y la humillación, su expresión llena de desesperación.)
Sol: (con un tono más oscuro, su desprecio alcanzando nuevos niveles) —Escúchame bien, maldito gusano. Eres solo una herramienta, y la única razón por la que te mantengo con vida es porque tus habilidades me son útiles. Si algún día dejas de serlo, no dudaré en hacerte desaparecer sin pestañear. Tus sentimientos, tus deseos, y esa patética lealtad hacia un hijo que no es tuyo... no valen absolutamente nada para mí. ¿Crees que tienes algún derecho a pedirme algo? ¡Eres un esclavo! Un perro cuya única función es obedecer.
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TRAVESURAS DE MEDIANOCHE (VEGAS Y PETE)
RandomTravesuras de Medianoche es una invitación a perderse en la oscuridad del deseo, donde los juegos de poder, control, y sumisión se vuelven protagonistas. Para mayores de 18 AÑOS , este relato te lleva al corazón del SADOMASOQUISMO , donde el placer...