Pov Regina
Los constantes cambios de Emma me han preocupado a lo grande aunque no lo parezca, a escondidas junto a Neal he buscado una solución para lo que sea que le este pasando y creemos qué hemos descubierto más de lo que queríamos.
Ahora solo debo esperar a que ella despierte para pedirle que vayamos a mi antiguo hogar, así mientras Neal la entretiene yo podre seguir buscando más información en los libros y ayudar a impedir que algún día pierda el control por completo y termine matando a todos.
Pero al paso que vamos creo que ella despertara hasta mañana.
—Emma —susurré con voz tierna y comienzo a besar su rostro y su cuello de manera aleatoria—, despierta amor, recuerda que prometiste que iríamos a visitar a mi madre.
—Mmm quiero dormir —responde con voz ronca y se da la vuelta en la cama para terminar dándome la espalda y se abraza a una almohada.
—Emma, lo prometiste —digo triste y mis lágrimas comienzan a brotar de mis ojos.
Había olvidado lo sensible que me he vuelto conforme el embarazo ha ido avanzando.
Ella nota que he comenzado a llorar y solo suspira.
—Bien, nos duchamos y partimos —responde tranquila y se levanta lentamente para comenzar a caminar rumbo al baño.
—¿Juntas? —pregunté con una media sonrisa y limpio mis lágrimas.
—¿Acaso planeas abandonarme? —pregunta y me mira con ironía.
—Nunca mi amor —respondo con una sonrisa
—Entonces ven aquí —pide tranquila y me sonríe.
Corro lentamente hacia ella y salto para que me atrape y me lleve cargando al baño.
Ella sonríe aunque se que en el fondo esta molesta porque no la deje dormir, pero no me importa, ya la recompensare cuando me sea posible.
Antes del anochecer ya hemos llegado a casa de mi madre justo a tiempo para cenar, Emma había prometido que nos quedaríamos aquí esta noche y eso no me representó ningún problema pues me seria más fácil seguir investigando.
—Regina me ha comentado sobre tus cambios cuñadita —dice Neal mirando a Emma.
—Nada que no tenga bajo control —responde segura y mi hermano tiene que aguantar la risa pues sabe que es mentira.
—Claro, pero por si las dudas ya estoy tomando cartas en el asunto —dice serio—, nada personal, solo quiero estar listo para evitarle cualquier riesgo a mi gente.
—Claro, comprendo —responde Emma tranquila pero en el fondo Neal la ha hecho enojar.
Al terminar la cena pasamos a la sala para platicar y me veo en la necesidad de sentarme en el regazo de Emma para tratar de calmarla y que no le arranque la cabeza a mi hermano.
Al parecer las señales qué me da son para hacerme entender que su enojo se ha ido pues los besos que he estado dejando en su cuello han provocado qué cierta parte de ella despierte y la puedo sentir activa debajo de mi.
—Emma tranquilízate —le digo cuando Neal acompaña a mamá a la cocina por algo de beber.
—No te atrevas a decir eso cuando has estado frotando tu trasero apropósito sobre mi —dice seria y da una pequeña mordida a mi oreja.
—No pensé que fueras tan débil —digo con una sonrisa burlona.
—Será mejor que cierres la boca porque sabes perfectamente que la débil aquí eres tu —dice seria—. ¿O quieres que vayamos a tu antigua habitación para que te lo demuestre?
Esa pregunta en definitiva me hace callarme pues ella sabe perfectamente que no soportaría ni si quiera un par de sus embestidas.
—Me las vas a pagar Emma —digo seria y le doy la espalda.
—Cuando quieras princesa —responde y se que tiene una gran sonrisa sobre su rostro, o de lo contrario su mano no estaría apretando mi trasero.
Cuando Neal y mi madre vuelven es mi momento y aprovechando mi reciente enojo me levanto y me voy al despacho de Neal para continuar con lo que habíamos dejando pendiente.
“Hace más de mil años, se corrió el rumor de que el alfa del clan Swan seria asesinando por un terrible monstruo cuyo poder estaría más allá del imaginable.
Este ser tendría la apariencia de un lobo, un lobo salido de alguna cueva del infierno y de un tamaño aterrador.
No se especifico una fecha, en cada cambio de alfa, los Swan debían estar listos por lo que eran entrenados desde que nacían para ser poderosos lobos guerreros y así poder matar aquella criatura qué desde hace tanto los tenia viviendo con miedo.
Pero los años pasaron y este ser nunca apareció.”
No tiene sentido, según todo lo que Neal me dijo, Arthur aseguraba ser quien mataría al alfa Swan me dejo caer en la silla al saber lo que esto significa, pero Emma sigue viva, quiere decir que algo peor esta por venir.
Escucho una pequeña risa que me hace alarmarme y me pongo de pie. De entre las sombras de la habitación sale Ruby pidiendo perdón por haberme asustado.
—Ruby, ¿qué haces aquí? —pregunté confundida.
—Neal me contacto y me contó lo que pasaba —dice tranquila.
—Llevamos más de una semana leyendo todo lo que hay aquí y aún no se que es lo que tiene Emma —digo frustrada—, y ahora resulta que algo peor podría venir.
Ella ríe y no entiendo el por qué hasta que se acerca para cerrar el libro que momentos antes leía.
—Emma no tiene nada, solo su mente está muy estresada, necesita volver a darle el balance qué tenia y listo asunto arreglado —dice tranquila—, en cuanto a lo otro, tranquila, el ser del qué sé habla ya apareció, estas casada con ella.
—¿Qué? —pregunté confundida.
—Emma es el ser del qué ese rumor habla, el ser qué tanto tiempo tuvo atormentada a mi familia y que asesino a mi padre vive dentro de Emma —dice tranquila—. Ella es el verdadero hombre lobo demonio.
Mi mente a quedado en shock por la información revelada por Ruby y eso le causa gracia.
—Eres algo lenta Regina —dice riendo—, pensé que después de que la vieras convertida en aquel lobo enorme ya lo habías deducido.
—Yo… —claro, cómo no me di cuenta desde el principio.
—Bueno ahora que lo sabes es momento de irme, Lily me espera en el auto a 20 minutos de aquí —dice con una sonrisa y de despide.
Ahora mi alma se siente un poco mejor al saber que Emma esta o estará bien. Pero aun así siento que debo estar preparada para algo.
Algo qué tal vez vendrá en un futuro.
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Mi Luna de Lunas (SwanQueen) [ABO]
FanfictionDestinada a amarla con cada parte de ella a pesar de las circunstancias. Protegerla de todo, incluso de ella misma al tiempo que se propone a amarla. Regina se ve obligada a casarse para evitar una guerra qué probablemente acabaría con toda su famil...