Nuestro hogar

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Unos meses después, tomaron una decisión importante: buscarían un lugar propio, un hogar donde pudieran estar juntas y construir algo sólido. Empezaron a ver apartamentos y casas pequeñas, emocionadas por dar ese paso. Finalmente, encontraron un lugar que les encantó, un departamento acogedor con una vista que les recordaba los primeros días de su relación.

El proceso de mudanza fue agotador pero emocionante. Entre cajas y risas, Karime intentaba decorar el espacio, mientras Gala le ayudaba a colocar cuadros y pequeños detalles que hacían que el lugar comenzara a sentirse como suyo.

Una noche, después de terminar de organizar todo, se sentaron en el sofá, observando su nuevo hogar.

—¿Sabes? Creo que nunca había sido tan feliz —dijo Gala, mirando a Karime.

Karime la abrazó, sintiéndose igual de afortunada.

—Este es solo el comienzo, Gala. Lo mejor está por venir.

Un lugar para nosotras🫀Donde viven las historias. Descúbrelo ahora