Un lugar para nosotras🫀

La vida junto a ti

Con el paso de los meses, la vida de Gala y Karime en su nuevo hogar se volvió un hermoso entramado de momentos compartidos. Habían aprendido a adaptarse a los desafíos y las sorpresas que la vida les deparaba, siempre con el amor como su guía.

Una tarde, mientras estaban sentadas en el sofá, Karime giró hacia Gala con una mirada pensativa.

—¿Te acuerdas de todo lo que pasamos? —preguntó, su voz suave pero cargada de emoción.

Gala asintió, recordando cada pelea, cada duda y cada reconciliación.

—Sí, y también recuerdo cuánto hemos crecido. —respondió Gala, sonriendo—. Nunca imaginé que llegaríamos tan lejos.

Karime sonrió, tomando la mano de Gala entre las suyas.

—¿Qué te parece si hacemos algo especial para celebrar nuestro viaje? —sugirió.

Gala levantó una ceja, intrigada.

—¿A qué te refieres?

—Una noche de recuerdos. Podemos cocinar juntas, poner nuestra música favorita y revivir los momentos que nos unieron. —dijo Karime, con entusiasmo.

Gala se iluminó ante la idea.

—Me encanta. Vamos a hacerlo.

Mientras cocinaban, las risas llenaban la cocina. Cada ingrediente que agregaban era como un ladrillo más en la construcción de su hogar. Recordaban sus primeros días juntas, las inseguridades y los sueños que habían compartido.

Después de cenar, se sentaron en la terraza, rodeadas de luces parpadeantes que colgaban en el aire. La ciudad brillaba ante ellas, un hermoso telón de fondo para su historia.

—Karime, he estado pensando... —comenzó Gala, mirando el horizonte—. Quiero hacer esto oficial. Quiero que nuestra relación se convierta en algo más.

Karime la miró, sorprendida y emocionada.

—¿A qué te refieres?

—Quiero compartir mi vida contigo, en todos los sentidos. —dijo Gala, sintiendo el corazón latir con fuerza—. Quiero que seas mi compañera de vida.

Karime se quedó en silencio por un momento, procesando lo que Gala había dicho. Finalmente, su rostro se iluminó con una sonrisa que dejó sin aliento a Gala.

—Sí, sí, sí. Quiero lo mismo. —dijo Karime, con la emoción brotando de cada palabra—. Eres mi todo, Gala.

Ambas se acercaron, y Gala sintió una oleada de felicidad mientras Karime la abrazaba fuertemente.

—Te amo, Karime. —susurró Gala, sintiendo que las palabras resonaban en su interior.

—Y yo a ti, Gala. —respondió Karime, mirándola a los ojos, llena de amor y ternura.

El silencio de la noche fue interrumpido solo por el suave murmullo de la brisa. Ambas sabían que el futuro que les esperaba estaba lleno de posibilidades, pero lo enfrentarían juntas, como siempre lo habían hecho.

Con una renovada conexión, Gala y Karime decidieron seguir adelante, sin importar los desafíos que se les presentaran. Habían aprendido que su amor era más fuerte que cualquier adversidad, y estaban listas para escribir el siguiente capítulo de su historia, juntas.

Así, bajo el cielo estrellado y en su pequeño rincón del mundo, comenzaron una nueva etapa, listas para abrazar todo lo que la vida les ofrecía, unidas por el amor que habían construido.

FIN 🫀