26. Sorpresa

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(Valerie)

No pensé en las consecuencias de mis actos debo admitirlo.

Solo quería desaparecer.

Pero estoy totalmente agradecida con Dios por haberme dado una última oportunidad para hacer las cosas bien esta vez.

¿Han escuchado eso de que cuando estas en coma puedes escuchar todo lo que pasa a tu alrededor? Pues es verdad. Escuchaba todo lo que mis amigos me decían (o parte de), lo que mi mamá y Joe también, a Stefan... todo.

Cada una de las historias que me contaban parecía tan real para mí que ahora pienso que esa fue mi verdadera historia, no la tormentosa, si no la versión de mis amigas y Stefan.

Salí un par de días después de que desperté del hospital y el doctor recomendó una semana más de reposo pues mi cuerpo estaba débil aun, pero mis amigas me visitaban diario al salir de la escuela, y Stefan también estaba diario en mi casa, a veces igual los amigos de Stefan venían y por lo que me habían contado, Albert y Yannel ya eran novios al igual que Iker y Marlenne, Poleth... ella seguía con Emmanuel, pero yo sabía que de quien realmente estaba enamorada era de Harry, pero respetaba ahora su decisión, yo no era quien para privarla de su felicidad ¿cierto? A pesar de eso, era feliz teniéndolos aquí a todos, lo que aún no entendía del todo era porque Stefan nunca me dejo entrar a su vida y ahora si... Necesitaba una explicación pero Yannel se oponía dejarme sola con él, no sé qué paso aquel día entre ellos que ella lo miraba con odio... Bueno igual miraría así a Albert si le hiciera daño a ella.

Bueno, la semana paso y el viernes después de que Stefan se fue, Yannel me dijo -Val, mañana iremos de compras, ya le pedí permiso a tu mami y dijo que si- sonreí -¿De verdad? Eso sería genial, estoy aburrida ya aquí- Poleth se acercó a mí y me tomo por los hombros - ¡Sí! Y veremos los posibles vestidos para la graduación- había olvidado eso, faltaban aproximadamente dos semanas para la graduación -Si, pero solo veremos porque mañana iremos por otras cosas, los vestidos los compraremos la semana que viene- añadió Marlenne y Yannel y Poleth la miraron extraño -Bueno... yo digo- fruncí el ceño -Ok... como sea, mañana iremos de compras- platicamos un rato más y luego los novios de Yannel y Marlenne las llamaron y se fueron, estaba actuando algo extrañas o eso creía, me quede solo con Poleth -Val.... ¿ya te dije que lo siento?- sonreí -Si Poly, me lo has dicho desde el día que desperté y no sé cuántas veces lo dijiste mientras estuve inconsciente- se sentó a mi lado -Es que lo siento... y quiero contarte algo-suspire -Ya no te preocupes por eso... ya acepte tu decisión, será algo difícil empezar sola la universidad pero, tu felicidad es lo primero- le di un apretón ligero de manos y ella sonrió -Es precisamente de eso de lo que quiero hablar- le di un codazo -Pues dime- ella suspiro -Reflexione sobre muchas cosas en mi vida mientras estuviste en el hospital, la historia que te contamos sobre Harry y yo, él se enteró y me dijo que yo... que yo le gustaba y nos besamos Val, fue ahí cuando me di cuenta de que... al que en realidad amo es a Emmanuel- una lagrima cayo por su mejilla y yo no podía creer que se habían besado -El me pidió una oportunidad pero le dije que no podía porque mi corazón estaba ocupado ya... Val, rompí su corazón, pero no fue mi intención... yo no sabía la diferencia entre gustar y amar a alguien hasta ese día, él lo entendió y me dijo que si al menos podíamos ser amigos, accedí a eso y luego hable con Emmanuel, sobre mis prioridades, sobre mis planes, nuestros planes y por fin me entendió, no me iré con el ahora, decidimos que hablara con mis padres y será mi novio formal, terminare la carrera y si duramos tanto como quiero que esto dure... nos casaremos y me iré con él o posiblemente él se quede aquí en california- un nudo se formó en mi garganta -¿De verdad?- fue lo único que pude preguntar, ella asintió -Si Val, no te dejare sola- la abrace y comencé a llorar, si bien era cierto que Emmanuel no era santo de mi devoción y yo quería que mi amiga se quedara con Harry... pero me hacía feliz que el la hiciera feliz.

Al día siguiente, las chicas llegaron a medio día, Yannel llevo el BMW blanco de su papa y fuimos a recorrer varias tiendas de ropa y zapatos, y vimos muchos, muchos vestidos de graduación hermosos. Llevábamos aproximadamente 3 horas visitando tiendas y las chicas ya llevaban varias bolsas de ropa, yo solo llevaba un par de jeans rasgados y una blusa estampada de Mickey Mouse, decidimos hacer una parada para comer y Yannel dijo -Val... las chicas y yo queremos hacerte un regalo- sonreí -¿A mí? ¿Por qué?- pregunte algo intrigada -Por ser nuestra amiga... por aguantarnos todo y seguir aun aquí- respondió Poleth con una enorme sonrisa -Más que nada porque sigues aquí... creímos que te perderíamos Valerie Fuller- añadió Marlenne -Gracias chicas, pero... no es necesario que hagan eso, saben que las quiero demasiado- y entonces como ya habíamos terminado de comer se levantaron y me llevaron con ellas -Pues te compraremos algo bonito y punto- dijo Yannel -Esta bien- respondí solamente y nos dirigimos a una tienda, me hicieron probarme varios vestidos, perdí la cuenta después de 5 y ninguno de los que a mí me gustaba les gustaba a ellas, luego de un rato, Yannel le dijo algo a la chica que me estaba dando los vestidos y ella asintió -¿Qué le dijiste Yann?- pregunte, ella solo sonrió -Que quiero un vestido especial- las tres intercambiaron miradas y yo solo me encogí de hombros. Cinco minutos después, la chica llego con un vestido color hueso, de encaje, se veía hermoso, se lo dio a Yannel y ella se dirigió a mí -Pruébate ese... creo que te quedara perfecto- sonrió y me metió al probador, la tela se sentía suave y ligera, perfecto para este clima, me quite el vestido que tenía y me metí en el que Yannel me dio y como si estuviera hecho a mi medida, encajo en todos lados, tenía descubierto un hombro y un cinturón imitando una cuerda, los detalles del vestido me encantaron, me mire al espejo y me gusto lo que vi. Salí del probador y las chicas me miraron y sonrieron -Perfecto- dijeron al unísono, luego de eso pagamos y me llevaron a una zapatería -Ahora necesitamos unas sandalias que combinen con tu fabuloso vestido Val- dijo Yannel y no hubo necesidad de buscar y buscar porque en el primer aparador vi unas hermosas sandalias de tiras negras que me encantaron, tenían el tacón color madera y unas cuentas adornando el frente. Una vez que pagaron, nos fuimos de vuelta a mi casa eran las 5 de la tarde cuando llegamos -Val, deberías darte un baño, digo porque estuvimos en el sol y puede darte temperatura o algo así- me dijo Marlenne y las demás la apoyaron y bueno... pues me di una ducha rápida, cuando salí, ellas tenían sobre mi cama el vestido y las sandalias que me compraron, fruncí el ceño -Pruébatelo Val, queremos verte- sonreí y me lo probé -¿Y si la peinamos para ver si servimos como estilistas?- dijo Poleth me reí porque se estaban comportando raras, pero bueno, hace mucho que no me mimaban. Secaron mi cabello, lo alaciaron y me recogieron cabello de lado izquierdo con una pequeña trenza, dejando mi oreja descubierta, luego me maquillaron ligeramente y sonrieron al ver el resultado -Val, te ves hermosa- dijo Yannel y me abrazo -Listo ahora vámonos- añadió Poleth... ¿irnos? - ¿A dónde iremos?- pregunte y las tres rieron -No lo sé queremos presumirte amiga- fuimos escaleras abajo y luego al auto de Yannel, Poleth encendió el autoestéreo y Any Kind of Guy de Big Time Rush comenzó y sonreí, siempre me había imaginado a Stefan cantándome esa canción -Y ¿Qué chico te gustaría que fuera Stefan para enamorarte?- pregunto Yannel sonriendo, sentí sonrojarme porque las tres comenzaron a hacer burla -Creo que él no puede enamorarme ya más... aunque necesito saber su versión de la historia- comente -Y tu Yann, no me has dejado escucharla- reclame, ella suspiro -Es que no quiero que él te lastime... paso la primera prueba cuando llego arrepentido al hospital, pero no confió totalmente en el- me respondió -¿Qué fue exactamente lo que dijo cuando llego al hospital?- pregunte porque no me habían contado bien eso -Pues dijo que necesitaba verte para explicarte todo, y yo no quería que el entrara pero se veía tan desesperado que... accedí porque dijo que siempre te quiso... y quizá sea hora de que sepamos la verdadera razón de todo ¿no crees?- asentí -Vamos a que sepas la verdad Val- dijo Poleth y no comprendí a que se refería hasta un cuarto de hora después.

Llegamos a la playa y comprendí todo.

La Última Oportunidad. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora