Belle Y Grayson :La Reina Perdida

CAPITULO 17

                                 BELLE

Anoche necesitaba ducharme y quitarme la ropa ensangrentada. Liam me llevó a mi casa.

No se alegró cuando salí del baño vestida
con mi uniforme de camarera.

—Hoy no trabajas —afirmó—. Necesitas
descansar.

—Lo que necesito es ganar dinero para
poder permitirme mi apartamento en lugar de verme obligada a vivir bajo un puente como una especie de trol. Mi turno empieza en veinte minutos.

Pasé junto a él, cogí mis tacones de la puerta principal y me los puse en los pies.

Liam parecía enorme en mi pequeño
apartamento. Aunque supongo que eso no era, justamente, difícil. Cualquiera parecería grande aquí. Demonios, yo parecía grande aquí.

Todo el espacio consistía en una habitación individual con un lavabo, unos cuantos armarios, una cómoda, una pequeña mesa redonda y tres sillas, y el espacio justo para el colchón de dos plazas que estaba tirado en el suelo, en un rincón.

Había un cuarto de baño comunitario unas puertas más abajo.

Así que, sí, el apartamento no era gran cosa,pero era mío. Estaba contenta de vivir por mi cuenta en lugar de depender de otra persona.

—Belle, son las cuatro de la mañana.Todavía no ha salido el sol —continuó argumentando Liam-. Anoche abriste y cerraste el restaurante. No pueden esperar que sigas así. No es sano. O legal. Estás trabajando demasiado.

Puse los ojos en blanco. Era tan dramático.

—Creo que puedo manejarlo.

Me devolvió la mirada, claramente dispuesto a no dejar pasar el tema.-Estaré bien.

Liam. Me siento muy bien, mejor de lo que he estado en meses. Todavía estoy un poco asustada por todo lo que pasó anoche. Pero no me duele nada y me siento descansada por primera vez en mucho tiempo. Esa sangre de vampiro que me diste es realmente mágica. Incluso mi marca no duele tanto.

En realidad, fue un milagro. La marca de Grayson en el cuello seguía teniendo un aspecto horrible —creo que se me había
infectado-, pero ya no me dolía tanto como antes.

La palpitación profunda bajo la piel había disminuido considerablemente y ya no ardía.
Me dieron ganas de llorar de alivio.

¿Era posible que pudiera disfrutar realmente de mi día en lugar de estar incapacitada por un dolor horrible?
O tal vez, sólo tal vez.. significaba que Grayson por fin había decidido dejarme en paz después de sentir por lo que había pasado la noche anterior. Tal vez pensó que estaba muerta.

Pero, probablemente, sólo era una ilusión.

—No me importa —continuó acosándome Liam-. Anoche sólo dormiste dos horas.Necesitas descansar. Sobre todo después de todo lo que has pasado.

Me reí sin gracia.—Sí, no, gracias.—
Dormir significaba pesadillas, y las
pesadillas eran lo último que necesitaba
ahora mismo. Quería a Grayson fuera de mi cabeza, muchas gracias.

Liam siguió discutiendo conmigo
durante otros diez minutos. Finalmente,
cedió cuando salí por la puerta sin él,
amenazándolo con ir sola a la cafetería, cosa que sabía que odiaría.

Me siguió a regañadientes, conduciéndome a su coche y murmurando en voz baja que algún día me mataría trabajando.

               
                              ***