La vida y mentiras de Albus Dumbledore

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Harry Potter pertenece a J.K.ROWLING

quien quiere leer ahora_ preguntó el director.

lo haré_ dijo Hagrid, recibiendo el libro

La vida y mentiras de Albus Dumbledore_ leyó, frunciendo el ceño.

parece que escucharemos mas del libro de Skeeter_ dijo Harry con un pequeña mueca.

El sol estaba saliendo: la pura, incolora inmensidad del cielo se extendía, indiferente ante él y su sufrimiento. 

eso sonó muy Dramático Potter_ dijo Draco.

no lo hace menos cierto_ murmuró Harry con un ligero sonrojo.

Harry se sentó en la entrada de la tienda de campaña y aspiró una profunda bocanada de aire limpio. A pesar de que estar vivo para ver la puesta de sol sobre la centelleante ladera nevada debería haber sido el mayor tesoro de la tierra, sin embargo él no podía apreciarlo: sus sentidos estaban afectados por la calamidad de haber perdido su varita. Miró por encima de un valle envuelto en nieve, las lejanas campanas de iglesia repicando a través del brillante silencio. Sin darse cuenta, estaba clavándose los dedos en los brazos como si así intentara resistir el dolor físico.

vamos, Harry, no puede ser para tanto o si_ preguntó Ron_ claro necesitas una varita, pero el perderla no debería doler así, yo rompí mi varita en segundo año...

rompiste una varita heredada_ dijo Sirius_ es muy diferente a perder TU varita, no había realmente un vinculo_ sin contar todo lo que Harry a pasado con esa varita.

Había derramado su propia sangre más veces de las que podía contar; 

Harry se permitió una pequeña sonrisa cuando su padrino bufó ante eso, sonando muy parecido a como lo haría canuto.

una vez había perdido todos los huesos de su brazo derecho; este viaje ya le había dejado cicatrices en el pecho y antebrazo para sumar a las de su mano y su frente, 

lindo_ dijo Daphne con sarcasmo.

es parte del trabajo_ dijo Harry encogiéndose de hombros, antes de fruncir el ceño_ eso seria un problema_ preguntó.

claro que no_ dijo Daphne_ solo me preocupas_ aseguró. 

pero nunca, hasta este momento, se había sentido tan fatalmente débil, vulnerable e indefenso, como si la mejor parte de su poder mágico se hubiera desprendido de él. Sabía exactamente lo que Hermione diría si él expresara algo de aquello: la varita sólo es tan buena como el mago. 

es cierto_ dijo Hermione_ eres un gran mago Harry y lo serás aunque tengas que usar otra varita.

tal vez, así sea normalmente_ dijo Harry_ pero mi varita es especial.

Pero estaba equivocada, su caso era diferente. Ella no había sentido la varita girando como la aguja de un compás y disparando llamas doradas a su enemigo. 

eso haría que cualquiera amara su varita_ dijo Viktor, todos asintieron.

Había perdido la protección de los núcleos gemelos y sólo ahora cuando ya había desaparecido, se dio cuenta de cuánto importaba. 

La historia del trio de oroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora